“Comimo”, la herramienta hecha en Colombia que identifica minería ilegal
Profesores y estudiantes de la Universidad del Rosario desarrollaron una herramienta que utiliza inteligencia artificial para detectar minas en imágenes satelitales. La iniciativa ganó una subvención de Google para su desarrollo.
Valeria Cortés Bernal
Hoy cualquier persona con acceso a internet puede ayudar a identificar minería ilegal en Colombia con solo un clic. Esto es posible gracias a Colombian Mining Monitoring (”Comimo”), una herramienta capaz de reconocer minas en imágenes satelitales del territorio nacional por medio de inteligencia artificial. Esta tecnología fue desarrollada por profesores, consultores y estudiantes de la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario, que pudieron apalancar el proyecto con recursos de Google.
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Hoy cualquier persona con acceso a internet puede ayudar a identificar minería ilegal en Colombia con solo un clic. Esto es posible gracias a Colombian Mining Monitoring (”Comimo”), una herramienta capaz de reconocer minas en imágenes satelitales del territorio nacional por medio de inteligencia artificial. Esta tecnología fue desarrollada por profesores, consultores y estudiantes de la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario, que pudieron apalancar el proyecto con recursos de Google.
“Comimo”, que es de acceso libre y gratuito, vio la luz hace apenas unos días luego de más de seis años de investigación. Fue creada para facilitar la llegada de las autoridades a zonas de explotación ilegal de minerales y ayudar a contrarrestar oportunamente sus impactos.
Así lo explica el profesor Santiago Saavedra, quien se graduó de su doctorado en la Universidad de Stanford (California, EE. UU.) con el modelo inicial hace cuatro años. En ese entonces investigaba sobre la correlación de las minas ilegales en Colombia con el deterioro en la salud neurológica de los bebés que habitan cerca de estos espacios.
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“El problema con el estudio es que no teníamos la ubicación de las minas ilegales. Ahí fue cuando empezamos a pensar en usar inteligencia artificial”, recuerda Saavedra, hoy profesor principal de la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario.
¿En qué consiste?
“Comimo” emite alertas de predicción de minería con base en imágenes que obtiene de cinco satélites mensualmente. Fue entrenado para identificar zonas que lucen como canteras y tiene una interfaz que permite contrastar esta información con datos de la Agencia Nacional de Minería (ANM), esto con el fin de determinar si dichas minas están en zonas con títulos mineros o no.
“Al modelo le damos fotos de minas y de otras cosas que no son minas, como playas o piscinas. Así empieza a encontrar patrones de lo que sí es una mina. Cuando se equivoca, le bajo su nota, le doy una función de pérdida. Y después de tantas interacciones y ejemplos, él encuentra lo mejor en este momento. Esa es la inteligencia artificial”, explica el docente.
El proyecto es tan ambicioso, que en 2019 ganó una subvención del Google AI Impact Challenge, una iniciativa de la compañía californiana que otorga capacitaciones y recursos a quienes utilicen inteligencia artificial para abordar desafíos sociales. “Comimo” fue el único ganador de un país hispanohablante entre 2.600 aplicaciones de todo el mundo.
Saavedra y algunos miembros de su equipo formaron parte de un programa intensivo de entrenamiento con Google entre mayo de 2019 y febrero de 2020. Allí recibieron acompañamiento y recursos para desarrollar la herramienta.
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“Ellos decían que teníamos que estar constantemente saltando a precipicios y desarrollando nuestras alas en la caída. Y así fue, esto ha sido un proceso de horas y horas de trabajo”, recuerda el profesor.
Hoy “Comimo” cuenta con una precisión del 90,54 %, en buena parte por la alta resolución de las imágenes que analiza. Además, detrás de este proceso hay 5,4 teras de datos y más de 1.000 modelos entrenados, el último de los cuales tiene más de 25 millones de parámetros.
Identificar minas desde el celular
Según Saavedra, las primeras predicciones fueron validadas con instituciones como la Fuerza Aérea, alcaldías municipales y Corporaciones Autónomas Regionales (CAR). Y aunque la herramienta ya está lista, su creador resalta que no es perfecta y que requiere el apoyo de la ciudadanía para verificar que las predicciones sean correctas.
Al ingresar a “Comimo” desde una computadora, o a través del celular, los usuarios se topan con una interfaz que les permite llevar a cabo diferentes tareas. Una de ellas es ubicar cualquier municipio de Colombia en el mapa y activar diferentes capas para visualizar la situación de la zona.
Se puede ver, por ejemplo, si hay presencia de minería activando la capa “minas confirmadas”, lo que agrega tonalidades moradas a dichas canteras. Luego es posible contrastar esta información con la capa de “títulos mineros”, con lo que el usuario podrá verificar si las minas están localizadas en zonas autorizadas.
Los usuarios que deseen ayudar a pulir la herramienta pueden suscribirse de manera gratuita para recibir las predicciones de minería de “Comimo”, que están disponibles mensualmente con nuevas imágenes satelitales. Allí podrán ver las tomas y decirle si se trata de una mina o una piscina, por ejemplo. Es como si se tratara de un juego. Dicha validación es revisada por el equipo y les ayuda a mejorar el monitoreo de la herramienta.
Asimismo, las comunidades que encuentren una mina ilegal cerca de donde viven pueden reportarla señalando su posición en el mapa o incluyendo las coordenadas en el sitio web.
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Tras el lanzamiento de la herramienta, su creador espera que las autoridades la usen para monitorear, controlar y tomar decisiones rápidas frente a la minería ilegal, flagelo que hoy es una de las principales causas de la deforestación en Colombia.
“Comimo” también busca proveer información actualizada a las comunidades sobre el uso del suelo en sus territorios para que puedan hacer control social de lo que pasa en ellos. “Se da un gran paso en la reducción de tiempo para que empiecen a actuar rápidamente. Pero nuestro sueño es que en el país se acabe la deforestación y la minería ilegal”, dice el docente. “La idea es que cualquier ciudadano pueda involucrarse en el monitoreo de nuestros recursos”, concluye.
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