¿Compraría un bombillo que emite tres tonos de luz diferentes?
La tecnología evoluciona a una velocidad casi impensada. Hoy, con tan solo encender y apagar un bombillo desde su ‘switch’ o través de un sensor, es posible ambientar un espacio con tonos diferentes de luz blanca o cálida.
Miguel Jaramillo Ángel - @migjaramillo
La tecnología “SceneSwitch” le permite a los usuarios tener tres ambientes diferentes en su casa u oficina. Esto, gracias al desarrollo LED que incluyen estos focos, que a diferencia de los ahorradores promedio sólo tienen un tipo luz: fría o cálida.
Estas bombillas tienen como objetivo que las personas inmediatamente pasen de un ambiente de luz fría a los que proporciona la natural o ámbar.
Al probar el bombillo se verificó que funciona igual en una lámpara que en un plafón tradicional, que se encuentra en una habitación, baño, cocina, sala o comedor de un hogar. Es decir, para generar cualquiera de los tres ambientes con los que cuentan estas bombilllas solo se necesita un interruptor o “switch”, y encenderlo y apagarlo. Es importante aclarar que no hay que utilizar instalaciones especiales o un regulador de luz, conocido como dimetizador, usado para controlar la cantidad que emite una fuente lumínica.
Además, los focos se encienden en el último color en el que se usó, lo que es denominado como memoria del bombillo.
Lea también: La mitad del alumbrado público de Bogotá se modernizará para 2019
Temperatura del color
Para entender el funcionamiento de este tipo de bombillos es importante saber que, como ocurre con el resto, la temperatura del color de las bombillas LED, es decir, su grado de calidez o frialdad, se determina por la cantidad de grados Kelvin que estas alcanzan y que tienen una relación directa con el color de la luz que emiten.
Luz fría: es más potente y por esto ilumina mayor cantidad de espacio. Además, por ser una fuente fría (5.000 grados Kelvin), su color es blanco y al reflejar en paredes del mismo tono aumenta la sensación de luminosidad. Recomendada para espacios abiertos y para no forzar la visión.
Luz cálida: esta es menos potente que las fuentes lumínicas frías. Genera ambientes acogedores (2.700 grados Kelvin) al ser una luz cálida de tonos amarillos. Ideal para leer o desarrollar tareas que no necesiten de la luminosidad de la luz blanca, que agota la visión al ser más intensa.
Luz ámbar: los tonos naranjas (2.200 grados Kelvin) de esta propician momentos de intimidad y calidez al iluminar menor cantidad de espacio, permitiendo que el foco visual esté en los objetos o personas más cercanos y de mayor tamaño.
Ficha Técnica
Lámpara LED oninidireccional
Horas de uso: 15.000
Flujo luminoso: Luz fría y cálida (800 lumens). Ámbar (80 lumens)
Potencia: 9.5 watts (fría). 8 watts (cálida). 3 watts (ámbar)
Eficacia luminosa: 84 lumens/watts
Temperatura del color: 5.000 Kelvin (fría). 2.700 Kelvin (Cálida). 2.200 Kelvin (ámbar)
Precio: 30.000 pesos
La tecnología “SceneSwitch” le permite a los usuarios tener tres ambientes diferentes en su casa u oficina. Esto, gracias al desarrollo LED que incluyen estos focos, que a diferencia de los ahorradores promedio sólo tienen un tipo luz: fría o cálida.
Estas bombillas tienen como objetivo que las personas inmediatamente pasen de un ambiente de luz fría a los que proporciona la natural o ámbar.
Al probar el bombillo se verificó que funciona igual en una lámpara que en un plafón tradicional, que se encuentra en una habitación, baño, cocina, sala o comedor de un hogar. Es decir, para generar cualquiera de los tres ambientes con los que cuentan estas bombilllas solo se necesita un interruptor o “switch”, y encenderlo y apagarlo. Es importante aclarar que no hay que utilizar instalaciones especiales o un regulador de luz, conocido como dimetizador, usado para controlar la cantidad que emite una fuente lumínica.
Además, los focos se encienden en el último color en el que se usó, lo que es denominado como memoria del bombillo.
Lea también: La mitad del alumbrado público de Bogotá se modernizará para 2019
Temperatura del color
Para entender el funcionamiento de este tipo de bombillos es importante saber que, como ocurre con el resto, la temperatura del color de las bombillas LED, es decir, su grado de calidez o frialdad, se determina por la cantidad de grados Kelvin que estas alcanzan y que tienen una relación directa con el color de la luz que emiten.
Luz fría: es más potente y por esto ilumina mayor cantidad de espacio. Además, por ser una fuente fría (5.000 grados Kelvin), su color es blanco y al reflejar en paredes del mismo tono aumenta la sensación de luminosidad. Recomendada para espacios abiertos y para no forzar la visión.
Luz cálida: esta es menos potente que las fuentes lumínicas frías. Genera ambientes acogedores (2.700 grados Kelvin) al ser una luz cálida de tonos amarillos. Ideal para leer o desarrollar tareas que no necesiten de la luminosidad de la luz blanca, que agota la visión al ser más intensa.
Luz ámbar: los tonos naranjas (2.200 grados Kelvin) de esta propician momentos de intimidad y calidez al iluminar menor cantidad de espacio, permitiendo que el foco visual esté en los objetos o personas más cercanos y de mayor tamaño.
Ficha Técnica
Lámpara LED oninidireccional
Horas de uso: 15.000
Flujo luminoso: Luz fría y cálida (800 lumens). Ámbar (80 lumens)
Potencia: 9.5 watts (fría). 8 watts (cálida). 3 watts (ámbar)
Eficacia luminosa: 84 lumens/watts
Temperatura del color: 5.000 Kelvin (fría). 2.700 Kelvin (Cálida). 2.200 Kelvin (ámbar)
Precio: 30.000 pesos