¿Cómo saber si una foto es creada con Inteligencia Artificial?
Cada vez es más frecuente la publicación de imágenes hiperrealistas que recrean situaciones inexistentes que confunden a las personas. Conozca la forma para identificar qué imágenes son reales y cuáles son creadas por IA.
Recientemente en redes sociales han circulado imágenes que para muchos usuarios son reales, pero generadas por inteligencias artificiales. Por ejemplo, el arresto del expresidente estadounidense Donald Trump, la supuesta nueva especie de felino amazónico con piel de serpiente y la chaqueta blanca del papa Francisco.
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Muchas personas en redes sociales ven estas imágenes y las comparten con la creencia de su veracidad, sin darse cuenta de que están cayendo en las conocidas fake news, noticias falsas o cuestionables que buscan desinformar o mal informar a los consumidores de diferentes formatos sobre temas específicos como la política, las ciencias, la historia y muchos más.
A pesar de la constante evolución de las inteligencias artificiales y sus creaciones digitales, hay formas para poder identificar cuando una fotografía es generada por ellas o es real. Son detalles que en una lectura rápida son difíciles de percibir, pero con un adecuado manejo y constante duda se pueden encontrar, para no asumirlas como ciertas.
Primero, tenga en cuenta que muchas veces cuando las imágenes son de celebridades o personas del ámbito público, no necesariamente se crean desde cero, sino que producen a partir de fotografías reales a las que la IA les puede modificar las expresiones faciales, copiar el rostro y hasta imitar el habla de las personas.
Estos casos son conocidos como deepface, fotografías y videos de celebridades y políticos que se superponen a otros para hacer parecer que, por ejemplo, Trump hable a favor o en contra de un caso específico de actualidad en el mundo, para tergiversar y suplantar personas. En estos casos antes de asumir que son testimonios reales, espere a que los medios especializados en el tema e hablen de ello.
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Además, muchos creadores de estas fotografías dejan marcas de agua esparcidas aleatoriamente en las imágenes para poderlas identificar como propias más adelante o incluso que las personas reconozcan su trabajo.
Otra forma de darse cuenta cuando una imagen es creada por una IA es buscar anomalías visuales, aquellos detalles que por más que parezcan normales, no lo son. Por ejemplo, el aumento o disminución de la cantidad de extremidades, gesticulaciones exageradas, partes borrosas o no entendibles visualmente.
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También los fondos de las imágenes se ven desenfocados, a veces tanto como si fueran manchones, pues las IA no siempre recrean texturas y entienden las siluetas como objetos extraños y deformes.
Finalmente, la gran mayoría de rostros van a parecer en un formato y tamaño que emula un documento de identidad, un primer plano o una mirada directa al espectador, con detalles y accesorios que a veces se confunden con la misma piel, cabellos y otras partes faciales.
Recientemente en redes sociales han circulado imágenes que para muchos usuarios son reales, pero generadas por inteligencias artificiales. Por ejemplo, el arresto del expresidente estadounidense Donald Trump, la supuesta nueva especie de felino amazónico con piel de serpiente y la chaqueta blanca del papa Francisco.
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