¿Hay relación entre la belleza y los videojuegos? Esto dice un estudio
Detalles de los hallazgos de un estudio alemán sobre la relación que tiene la belleza física con el uso de los videojuegos.
El Instituto de Economía Laboral (IZA) es una organización de investigación económica privada e independiente con sede en Bonn, Alemania. Existe desde 1998 y se ocupa de dirigir la red de investigación en ciencias económicas más grande del mundo, pues se compone de más de 1.300 investigadores y afiliados internacionales. Entre ellos destaca la Universidad de Bonn.
Su trabajo se centra en 11 temas principales: educación, género y familia, economía del comportamiento, mercados laborales e instituciones, medio ambiente y mercados laborales, el trabajo en la macroeconomía, estadísticas laborales, movilidad y migración, el trabajo en las economías emergentes y en postransición y el empleo y el desarrollo, siendo la economía el eje central de todos.
Dentro de esos temas de interese se ha ubicado la industria de los videojuegos como un mercado que mueve más dinero que la música y el cine juntos. Según la consultora británica Newzoo, el Gaming produjo US $300.000 millones en 2023 y actualmente es uno de los negocios más rentables y emergentes en el mundo. A lo anterior se suman los eSports y la producción de hardware.
Por eso, en agosto de 2024, IZA publicó un estudio sobre la relación entre el atractivo físico de las personas y el uso de los juegos. Según el documento de más de 40 páginas, las personas “atractivas” pasan menos tiempo junto a un título que las personas “no atractivas”.
¿Qué tiene que ver el atractivo físico con los videojuegos?
La información utilizada en este análisis fue proporcionada por Add Health que registra datos de la población adolescente en Estados Unidos. En total fueron recolectados los datos de 20.000 adolescentes. Los investigadores clasificaron este grupo de personas dependiendo de su “atractivo” físico, esto lo determinaron de acuerdo a la percepción de sus pares cercanos y a su propia visión de belleza.
De esta forma, el estudio de IZA concluyó que las personas percibidas y autopercibidas como “más atractivas” pasan menos tiempo jugando una entrega o son menos tendenciosos a jugar videojuegos, que los que se consideran y son considerados “menos atractivos”. Este patrón se repite en la población de adolescente y adultos jóvenes.
Eso sí, el análisis recalca, aclara y repite en muchas ocasiones que la belleza física de una persona no está dada por el tiempo que pasa con un videojuego. Es decir, qué una persona pase menos tiempo jugando eso no lo hará más “atractiva”, ni tampoco por pasar más tiempo, será una persona “menos atractiva”.
¿Por qué se dan estos resultados?
El estudio titulado “Looks and Gaming: Who and Why?”, estableció que los entrevistados adolescentes considerados “atractivos” tenían 3,5% menos probabilidades de pasar prolongados periodos de tiempo jugando un título. Además, el grupo de los adultos “atractivos” dedica en promedio 2,05 horas menos al Gaming que los adultos “no atractivos”.
Esta comparación de belleza, un concepto subjetivo, y las horas en compañía de un juego debe tomarse con pinzas, pues el estudio señaló que una de estas variables son percepciones personales que no atienden a datos concretos, comprobables ni verificables de manera científica.
¿Por qué los y las “atractivas no juegan tanto? De acuerdo con los autores de “Looks and Gaming: Who and Why?”, esa percepción de belleza les hace preferir la interacción humana por encima de los videojuegos. Esto abre la discusión de cómo la concepción de terceros afecta el comportamiento y los pasatiempos propios.
Algo que podría tener sentir con otro estudio reciente que reveló que la mayoría de los gamers prefieren los títulos singleplayers, es decir, de un solo jugador, aquellos que solo requieren una interacción con la pantalla y no con otras personas virtualmente. Sin embargo, ese es otro debate y otro estudio diferente.
El Instituto de Economía Laboral (IZA) es una organización de investigación económica privada e independiente con sede en Bonn, Alemania. Existe desde 1998 y se ocupa de dirigir la red de investigación en ciencias económicas más grande del mundo, pues se compone de más de 1.300 investigadores y afiliados internacionales. Entre ellos destaca la Universidad de Bonn.
Su trabajo se centra en 11 temas principales: educación, género y familia, economía del comportamiento, mercados laborales e instituciones, medio ambiente y mercados laborales, el trabajo en la macroeconomía, estadísticas laborales, movilidad y migración, el trabajo en las economías emergentes y en postransición y el empleo y el desarrollo, siendo la economía el eje central de todos.
Dentro de esos temas de interese se ha ubicado la industria de los videojuegos como un mercado que mueve más dinero que la música y el cine juntos. Según la consultora británica Newzoo, el Gaming produjo US $300.000 millones en 2023 y actualmente es uno de los negocios más rentables y emergentes en el mundo. A lo anterior se suman los eSports y la producción de hardware.
Por eso, en agosto de 2024, IZA publicó un estudio sobre la relación entre el atractivo físico de las personas y el uso de los juegos. Según el documento de más de 40 páginas, las personas “atractivas” pasan menos tiempo junto a un título que las personas “no atractivas”.
¿Qué tiene que ver el atractivo físico con los videojuegos?
La información utilizada en este análisis fue proporcionada por Add Health que registra datos de la población adolescente en Estados Unidos. En total fueron recolectados los datos de 20.000 adolescentes. Los investigadores clasificaron este grupo de personas dependiendo de su “atractivo” físico, esto lo determinaron de acuerdo a la percepción de sus pares cercanos y a su propia visión de belleza.
De esta forma, el estudio de IZA concluyó que las personas percibidas y autopercibidas como “más atractivas” pasan menos tiempo jugando una entrega o son menos tendenciosos a jugar videojuegos, que los que se consideran y son considerados “menos atractivos”. Este patrón se repite en la población de adolescente y adultos jóvenes.
Eso sí, el análisis recalca, aclara y repite en muchas ocasiones que la belleza física de una persona no está dada por el tiempo que pasa con un videojuego. Es decir, qué una persona pase menos tiempo jugando eso no lo hará más “atractiva”, ni tampoco por pasar más tiempo, será una persona “menos atractiva”.
¿Por qué se dan estos resultados?
El estudio titulado “Looks and Gaming: Who and Why?”, estableció que los entrevistados adolescentes considerados “atractivos” tenían 3,5% menos probabilidades de pasar prolongados periodos de tiempo jugando un título. Además, el grupo de los adultos “atractivos” dedica en promedio 2,05 horas menos al Gaming que los adultos “no atractivos”.
Esta comparación de belleza, un concepto subjetivo, y las horas en compañía de un juego debe tomarse con pinzas, pues el estudio señaló que una de estas variables son percepciones personales que no atienden a datos concretos, comprobables ni verificables de manera científica.
¿Por qué los y las “atractivas no juegan tanto? De acuerdo con los autores de “Looks and Gaming: Who and Why?”, esa percepción de belleza les hace preferir la interacción humana por encima de los videojuegos. Esto abre la discusión de cómo la concepción de terceros afecta el comportamiento y los pasatiempos propios.
Algo que podría tener sentir con otro estudio reciente que reveló que la mayoría de los gamers prefieren los títulos singleplayers, es decir, de un solo jugador, aquellos que solo requieren una interacción con la pantalla y no con otras personas virtualmente. Sin embargo, ese es otro debate y otro estudio diferente.