Guía de seguridad digital
¿Cómo crear contraseñas más seguras? ¿Cómo recordarlas? ¿Cómo tener comunicaciones cifradas? ¿Cómo navegar protegido en internet? Encuentre las respuestas en este documento que, en su versión original, fue elaborado por la Fundación Karisma, una organización dedicada a los derechos digitales.
-Redacción Tecnología.
Navegación anónima
Cada vez que va a un sitio de internet o usa una aplicación esto deja un rastro, lo que permite a las empresas, muchas de ellas de publicidad, conocer sus gustos y prácticas en la web. En otras palabras, lo rastrean o hacen “tracking”, como se suele conocer esta práctica.
¿Cómo lo hacen? Usan “cookies”, aunque no es lo único. Las “cookies” son un registro en su computador, vinculado con información de su navegación en internet, que los sitios que visita y las empresas de publicidad pueden revisar después.
¿Cómo se puede evitar este rastreo? Instale extensiones de protección de la privacidad como DoNotTrackMe, AdblockPlus y Privacy Badger. Configure la privacidad de su navegador. Tiene la opción de nunca recordar el historial o no aceptar las “cookies” de terceros. Evite dar el mismo correo cada vez que se registra en algún sitio (use alias u otros correos). Puede usar http://guerillamail.org y https://www.guerrillamail.com para este fin. Cuide las autorizaciones de las aplicaciones en celulares inteligentes y tabletas.
¿Con qué información lo rastrean? Una parte la entregó voluntariamente, por ejemplo, en formularios de registro, en su correo, en las redes sociales o cuando usa motores de búsqueda. Otra parte es recolectada por empresas de publicidad conectadas con los sitios que visita. Esa información puede ser desde el tiempo que permanece en una página o dónde hace clic. Incluso se le asigna un número para identificarlo a través de distintos sitios y mostrarle publicidad personalizada.
Contraseñas más seguras
Las contraseñas son uno de los puntos más flacos de todo el panorama digital, pues cada vez han ido requiriendo mayor complejidad por parte del usuario, lo que termina por generar una especie de pereza en las personas, que suelen utilizar la misma para muchos servicios.
Y cuando una de estas plataformas se ve comprometida, la información de los usuarios queda expuesta, muchas veces incluyendo contraseñas, panorama que empeora drásticamente cuando son las mismas para varios servicios.
Es recomendable tener una contraseña fuerte: 12 caracteres está bien, pero 20 es mejor. Lo ideal es que sean complejas, o sea, que incluyan mayúsculas, minúsculas, números y caracteres especiales.
Es ideal cambiarlas con regularidad. Una buena idea para recordarlas es usar frases de canciones o poemas. Por ejemplo, en la canción “se va el caimán, se va el caimán”, la frase que podría usar es “se va para Barranquilla”. Aplicando un sencillo código en donde a=4 y e=€, una posible contraseña podría quedar así: $€_√∂_μ4∫4-ß44ΩquillA.
Llaveros digitales
Los problemas con el uso y la recordación de contraseñas, como ya vimos, generan líos que terminan por vulnerar la seguridad digital de los usuarios.
Crear contraseñas más complejas puede ayudar a que las personas no las recuerden y, al final, terminen por volver a sus viejas prácticas o incluso a cometer errores muy comunes, como poner 123456 y asumir que eso es seguro.
El uso de llaveros digitales ayuda muchísimo en este aspecto. Estas son aplicaciones que, bajo el resguardo de una contraseña maestra (una llave maestra), guardan todas las frases o formas de acceso de un usuario.
Su ventaja evidente es que solo toca recordar una contraseña; pero también almacenan la información de los usuarios de forma cifrada y en lugares seguros, y guardan preguntas de seguridad (como las de los bancos).
Si los usa es importante recordar que no debe compartir con nadie su llave maestra. No olvide su llave maestra, pues recuperarla es imposible. Dos de las “apps” de este tipo más populares son Keypass y 1Password.
Navegación segura
La era digital se corresponde, tristemente, con al auge de la interceptación masiva de las comunicaciones. Por eso es importante saber cómo se puede navegar de forma segura.
Uno de los caminos más recorridos en este campo es el uso de un protocolo de transmisión de datos conocido como Https.
Imagine que en internet la información viaja a través de sobres; un sobre Https es oscuro y evita que su contenido esté visible. Por el contrario, un sobre Http es transparente y deja visible el contenido que transporta.
Usar Https asegura que está conectado con el servidor que buscaba y no con una copia fraudulenta. Solo ese servidor puede leer lo que le envía y usted puede leer lo que él le envía. Con este protocolo, no será fácil dañar o alterar el contenido de sus comunicaciones.
Hay que recordar que Https cifra el canal, pero no los datos o contenidos que viajan a través de él. Entonces, si al inicio de la URL de la web en donde se encuentra aparecen las letras Https o el ícono de un candado cerrado, está navegando de manera segura.
Comunicaciones cifradas
El uso de aplicaciones o técnicas de cifrado permite que el contenido de un mensaje solo sea conocido por las partes involucradas en una comunicación (como un correo electrónico, por ejemplo), pues cada extremo del mensaje tiene una llave única para acceder a los datos que van protegidos.
Ahora, esto solo funciona cuando remitente y destinatario utilizan la misma herramienta de cifrado. Hay múltiples opciones para distintos dispositivos y sistemas operativos.
Para chat se recomienda descargar aplicaciones como Signal. En correo electrónico, existe un programa llamado PGP (Pretty GoodPrivacy). Si lo usa podrá ponerle una especie de candado (técnica conocida como llave pública) a tus mensajes y solo las personas que usted quiera podrán abrirlos. En computadores Mac lo encontrará como GPG.
La información de un teléfono móvil o un computador también se puede cifrar. Por ejemplo, para dispositivos Android puede ir a Ajustes (Settings) > Seguridad (Security) > Cifrar (Encrypt). En iOS (iPhone) vaya a Ajustes > Touch ID & Código.
Para computadores Windows puede descargar DiskCryptory y seguir las instrucciones. En Mac, vaya a Preferencias del sistema > Seguridad y privacidad > FileVault y desde allí siga las instrucciones.
Navegación anónima
Cada vez que va a un sitio de internet o usa una aplicación esto deja un rastro, lo que permite a las empresas, muchas de ellas de publicidad, conocer sus gustos y prácticas en la web. En otras palabras, lo rastrean o hacen “tracking”, como se suele conocer esta práctica.
¿Cómo lo hacen? Usan “cookies”, aunque no es lo único. Las “cookies” son un registro en su computador, vinculado con información de su navegación en internet, que los sitios que visita y las empresas de publicidad pueden revisar después.
¿Cómo se puede evitar este rastreo? Instale extensiones de protección de la privacidad como DoNotTrackMe, AdblockPlus y Privacy Badger. Configure la privacidad de su navegador. Tiene la opción de nunca recordar el historial o no aceptar las “cookies” de terceros. Evite dar el mismo correo cada vez que se registra en algún sitio (use alias u otros correos). Puede usar http://guerillamail.org y https://www.guerrillamail.com para este fin. Cuide las autorizaciones de las aplicaciones en celulares inteligentes y tabletas.
¿Con qué información lo rastrean? Una parte la entregó voluntariamente, por ejemplo, en formularios de registro, en su correo, en las redes sociales o cuando usa motores de búsqueda. Otra parte es recolectada por empresas de publicidad conectadas con los sitios que visita. Esa información puede ser desde el tiempo que permanece en una página o dónde hace clic. Incluso se le asigna un número para identificarlo a través de distintos sitios y mostrarle publicidad personalizada.
Contraseñas más seguras
Las contraseñas son uno de los puntos más flacos de todo el panorama digital, pues cada vez han ido requiriendo mayor complejidad por parte del usuario, lo que termina por generar una especie de pereza en las personas, que suelen utilizar la misma para muchos servicios.
Y cuando una de estas plataformas se ve comprometida, la información de los usuarios queda expuesta, muchas veces incluyendo contraseñas, panorama que empeora drásticamente cuando son las mismas para varios servicios.
Es recomendable tener una contraseña fuerte: 12 caracteres está bien, pero 20 es mejor. Lo ideal es que sean complejas, o sea, que incluyan mayúsculas, minúsculas, números y caracteres especiales.
Es ideal cambiarlas con regularidad. Una buena idea para recordarlas es usar frases de canciones o poemas. Por ejemplo, en la canción “se va el caimán, se va el caimán”, la frase que podría usar es “se va para Barranquilla”. Aplicando un sencillo código en donde a=4 y e=€, una posible contraseña podría quedar así: $€_√∂_μ4∫4-ß44ΩquillA.
Llaveros digitales
Los problemas con el uso y la recordación de contraseñas, como ya vimos, generan líos que terminan por vulnerar la seguridad digital de los usuarios.
Crear contraseñas más complejas puede ayudar a que las personas no las recuerden y, al final, terminen por volver a sus viejas prácticas o incluso a cometer errores muy comunes, como poner 123456 y asumir que eso es seguro.
El uso de llaveros digitales ayuda muchísimo en este aspecto. Estas son aplicaciones que, bajo el resguardo de una contraseña maestra (una llave maestra), guardan todas las frases o formas de acceso de un usuario.
Su ventaja evidente es que solo toca recordar una contraseña; pero también almacenan la información de los usuarios de forma cifrada y en lugares seguros, y guardan preguntas de seguridad (como las de los bancos).
Si los usa es importante recordar que no debe compartir con nadie su llave maestra. No olvide su llave maestra, pues recuperarla es imposible. Dos de las “apps” de este tipo más populares son Keypass y 1Password.
Navegación segura
La era digital se corresponde, tristemente, con al auge de la interceptación masiva de las comunicaciones. Por eso es importante saber cómo se puede navegar de forma segura.
Uno de los caminos más recorridos en este campo es el uso de un protocolo de transmisión de datos conocido como Https.
Imagine que en internet la información viaja a través de sobres; un sobre Https es oscuro y evita que su contenido esté visible. Por el contrario, un sobre Http es transparente y deja visible el contenido que transporta.
Usar Https asegura que está conectado con el servidor que buscaba y no con una copia fraudulenta. Solo ese servidor puede leer lo que le envía y usted puede leer lo que él le envía. Con este protocolo, no será fácil dañar o alterar el contenido de sus comunicaciones.
Hay que recordar que Https cifra el canal, pero no los datos o contenidos que viajan a través de él. Entonces, si al inicio de la URL de la web en donde se encuentra aparecen las letras Https o el ícono de un candado cerrado, está navegando de manera segura.
Comunicaciones cifradas
El uso de aplicaciones o técnicas de cifrado permite que el contenido de un mensaje solo sea conocido por las partes involucradas en una comunicación (como un correo electrónico, por ejemplo), pues cada extremo del mensaje tiene una llave única para acceder a los datos que van protegidos.
Ahora, esto solo funciona cuando remitente y destinatario utilizan la misma herramienta de cifrado. Hay múltiples opciones para distintos dispositivos y sistemas operativos.
Para chat se recomienda descargar aplicaciones como Signal. En correo electrónico, existe un programa llamado PGP (Pretty GoodPrivacy). Si lo usa podrá ponerle una especie de candado (técnica conocida como llave pública) a tus mensajes y solo las personas que usted quiera podrán abrirlos. En computadores Mac lo encontrará como GPG.
La información de un teléfono móvil o un computador también se puede cifrar. Por ejemplo, para dispositivos Android puede ir a Ajustes (Settings) > Seguridad (Security) > Cifrar (Encrypt). En iOS (iPhone) vaya a Ajustes > Touch ID & Código.
Para computadores Windows puede descargar DiskCryptory y seguir las instrucciones. En Mac, vaya a Preferencias del sistema > Seguridad y privacidad > FileVault y desde allí siga las instrucciones.