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Durante varias semanas probamos el Huawei Sound X, la primera apuesta del fabricante chino en el sonido premium. Las sorpresas fueron muchas, tanto buenas, como regulares. Pero, si hay que resumir todo en una frase, podemos decir que es un gran producto, que resulta afectado por temas políticos que deberían ser ajenos a este tipo de productos. Y, ¿por qué decimos eso? Sencillo, porque este parlante no cuenta con ningún tipo de tecnología estadounidense, debido al veto de EE.UU. contra ciertas compañías chinas. Esta medida ha puesto en aprietos a Huawei en sus procesos de fabricación, cosa que la compañía ha admitido abiertamente.
Se supone que el Sound X es un equipo diseñado para el High Resolution Audio, pero algunas de estas funciones se ven limitadas por dicha restricción. La mayoría de los códecs de Bluetooth de alta resolución son de origen estadounidense, por lo que este equipo solo tiene AAC Y SBC. Ambos son códecs que cumplen con su función y la diferencia es casi imperceptible para el oído. Pero para algunos usuarios especializados puede ser notorio, pues otros códecs como aptX y LDAC son los que manejan la parada en la industria de la música. Vale recordar que los códecs son el medio por el que el archivo de audio se codifica del dispositivo emisor para enviarlo al receptor, en este caso el parlante.
Otro problema es que por la imposibilidad de acceder a tecnología estadounidense, este equipo no dispone de un asistente de voz como otros parlantes similares, cuyo agregado ha sido la vinculación con servicios como Alexa o Google Assistant. Es curioso, porque se nota que el equipo fue diseñado para esto , y hasta en el mercado chino cumple con esta función, pero en los mercados occidentales no se le puede sacar el jugo hasta esta funcionalidad y se llega sentir cojo en este tema.
A pesar de estos limitantes, el Huawei Sound X no deja de ser un tremendo parlante, con una calidad de sonido que se destaca y le da pelea a equipos de marcas con mayor tradición en el sector del audio de calidad. Fue una buena jugada de la multinacional china incursionar en el audio premium de la mano de Devialet, la empresa francesa que ha venido marcando la pauta del sector audio con equipos de gran calidad sonora y diseños atrevidos.
Estas dos influencias se sienten en el Sound X. Con tan solo sacarlo de la caja uno se da cuenta de que no es un equipo común y corriente. El diseño es minimalista, tanto que ha llegado a ser comparado con los computadores Mac Pro, de Apple. La parte superior viene con una cubierta plástica de color negro brillante, que de ninguna manera lo hace ver como un equipo del montón.
Aun así, las huellas se marcan con facilidad y es necesario limpiarlo con frecuencia. Esto es más problemático si se tiene en cuenta que tiene un panel táctil para controlar el equipo. De hecho. Este panel es uno de los puntos más fuertes del equipo. Es sencillo y atractivo a la vista. Dota de elegancia la habitación en la que esté.
El tipo de plástico usado también hace que se vea el polvo que se acumula. La respuesta de Huawei fue diseñar una funda para cubrir la parte superior, pero oculta la belleza del equipo y es molesto tener que quitarla y ponerla. Otro apartado del diseño que no cuadra tanto es la ubicación del cable de poder. Este se encuentra en la parte inferior y necesita ser ubicado de una manera especial con una pestaña. De lo contrario, el equipo queda cojo y puede caerse.
Además de estos aspectos de mera apariencia, el Sound X cuenta con dos aperturas para los dos subwoofers que tiene el equipo y la parte de abajo viene recubierta por una tela entretejida para proteger los seis altavoces puestos de una manera especial para que logre un sonido 360° en el dispositivo. Precisamente esta cantidad de altavoces en un solo parlante hacen que este equipo se escuche fuerte. Pero, contrario a lo que sucede con la mayoría de equipos que alcanza volúmenes muy altos, la calidad del audio se mantiene en casi todas las condiciones en las que fue probado, casi nunca hubo distorsión en la música que se estaba escuchando.
Vale aclarar que las pruebas las realizamos en todo momento con un servicio premium de música cuyos archivos son formato FLAC -sin pérdida-, por lo que no está tan claro si esta misma condición se mantenga cuando la calidad del audio no sea la más alta. Sin embargo, hay que decir que para tener un equipo que cuesta más de un millón de pesos vale la pena tener una suscripción a un servicio como Tidal o Spotify y Deezer HIFI o que se compre la música en formatos sin pérdidas.
Además del alto volumen sin distorsiones, este equipo resalta por sus dos subwoofers. Esta combinación permite disfrutar de bajos más fuertes, que se llegan a sentir en el cuerpo. Además, como están ubicados de manera contraria, los dos se contrarrestan y no permiten que el equipo comience a vibrar como ocurre con otros dispositivos de bajos potentes.
En esta misma línea hay que decir que, a pesar de su fuerza, no se siente la distorsión que normalmente hay en algunos equipos que hacen un énfasis en los bajos. Incluso, algunas de las pruebas se hicieron de la mano de un ingeniero de sonido y este reconoció que había un intento por enfatizar en las frecuencias bajas, pero que no llegaba a ser molesto y hasta era uno de los atractivos del equipo.
Para probar esta parte reprodujimos diferentes géneros (música clásica, electrónica, rock, vallenato, salsa y rock -que fue uno de los pocos géneros en los que se escuchó menor desempeño-) y en todos tuvo un buen funcionamiento y los bajos no se sintieron intrusivos en esos géneros en los que no son tan necesarios. Aunque esta experiencia puede ser aún mejor si se modula aún más los bajos con el ecualizador, que actualmente viene en la mayoría de los equipos de celular o de reproducción.
La experiencia de sonido fue muy buena. La nitidez de la música se mantuvo en la mayoría de las condiciones. No obstante, para disfrutar de una mejor manera, por la disposición 360° de los parlantes, es preferible que el equipo esté en el centro de una habitación. De esta forma se puede disfrutar de sonido en todas las direcciones. Si se deja muy cerca de una pared, el sonido puede rebotar y crear una ligera interferencia. En este punto reside otro de los problemas de diseño pues el equipo es alámbrico y, para estar en el centro de una habitación, el cable puede llegar a entorpecer y hasta ser incómodo. Habría sido una buena idea dotarlo de una batería para hacerlo más portable, aunque con ese peso y la forma tampoco es que se hubiera podido hacer algo muy movible.
Otro aspecto que podría mejorar es que el equipo solo puede ser usado por bluetooth. Esto puede llegar a ser problemático en dos líneas. La primera es que en las casas todavía se cuenta con reproductores de audio que solo tienen conexión por jack 3,5mm, por lo que no podrían usarse con el Sound X. Por ejemplo, hay varios iPods Nano y Classic que siguen dando la pelea y que tienen una muy buena calidad de audio que no podrían ser usados con este equipo. Además, a pesar de contar con códecs para la música en alta calidad, es sabido que el cable 3,5mm sigue siendo la mejor opción para disfrutar el audio en alta calidad.
También podrían haber mejoras en la integración con otros equipos de sonido. Hay varias marcas que le apuestan a esta sincronía para lograr un sonido envolvente, pero este equipo no lo hace. A pesar de que la intención es que el sonido sea 360°, sigue siendo una sola fuente, por lo que solo está un paso por encima del sonido monofónico. Hubiese sido mejor que el software que dispuso Huawei para controlar el parlante desde el celular permitiera un emparejamiento con otros equipos y así tratar de que fuera envolvente la experiencia musical, haciendo énfasis en los tremendos subwoofers que tiene el Sound X.
Después de varias semanas de prueba, solo basta a decir que es un gran primer intento de Huawei por competir en el campo del sonido, sobre todo premium. Sin embargo, tiene algunos limitantes, sobre todo por la imposibilidad de acceder a las tecnologías de origen estadounidense. Si la intención es buscar un parlante que tenga Alexa o Google Assistant para controlar todos los equipos, esta opción no es para usted. Tampoco es recomendable si tiene equipos que solo tienen conexiones alámbricas o busca un parlante portable.
En cambio, esta es una opción muy recomendada si para usted es un tema importante escuchar música sin distorsiones, incluso a alto volumen. A pesar de las limitaciones por las tecnologías que no pueden ser usadas, el Huawei Sound X es un equipo de gran calidad de audio en su gama, que podría ser considerada como el punto de entrada a los equipos premium. Eso sí, hay que preparar a los vecinos, porque uno de los grandes placeres con este equipo es escuchar música a todo volumen.
Características básicas:
Color: Negro
Material principal: Plástico
Peso: 3,5 kilogramos
Altavoces: 6 altavoces ubicados en una distribución 360° y 2 subwoofers
Rango: 40hz-40Khz
Precio: $1.600.000
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