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La industria cervecera, una tradición que ha logrado mantenerse con el pasar de los siglos, e incluso milenios si se revisan sus orígenes, renueva su perfil al abrirle la puerta a una de las tendencias tecnológicas más recientes: la Inteligencia Artificial (IA). El motivo que une la tradición con la innovación es lograr predecir el sabor de la cerveza, y así, llegar a presentar nuevas variedades que muchos podrían considerar mejores.
La cervecera Carlsberg, empresa danesa fundada en 1847, es la que está detrás de este proyecto apalancado por investigaciones adelantadas en universidades locales y con el apoyo tecnológico de Microsoft.
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El proyecto, que recibe el nombre de Beer Fingerprinting Project (Huellas de la Cerveza), utilizará tecnologías de sensores y análisis de datos para predecir, de una manera más eficiente, los sabores de las cervezas.
“A medida que vamos recopilando datos y procesando lo que estos sensores van acumulando , la inteligencia artificial va creando patrones con los que luego podremos ir haciendo análisis de cómo va a saber una cerveza sin tener que producirla”, explicó Edmundo Miralles, director del segmento Cloud de Microsoft, en su entrevista a El Espectador.
Jochen Förster, también conocido como “Dc. Beer” (Doctor Cerveza), quien se desempeña como director de levadura y fermentación para el Laboratorio de Investigación de Carlsberg, explica que en el proceso de producción de esta bebida alcohólica se producen cientos de pequeños microlitos de destilados y cervezas, cantidades tan pequeñas que humanamente sería imposible catarlas, no obstante, dicha posibilidad no se escapa a las capacidades de una máquina.
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“Así que descubrimos que, si teníamos sensores que nos pudieran decir, al inicio, si la levadura en verdad va a poder ser utilizada en la producción de cerveza a gran escala, y que pudiera reconocer los químicos y compuestos de sabor para predecir cómo sabrá una cerveza, eso ayudaría bastante a nuestra investigación”, precisó el Dr. Beer.
Dentro de las proyecciones que maneja este proyecto, se espera que pronto pueda presentar sus primeros resultados pues ya cumplió los seis meses de haber arrancado su operación.
¿Desaparecerán los catadores?
Si hay una máquina capaz de identificar los componentes químicos de una cerveza para aportar en la producción de la misma, eso quiere decir que ¿las personas encargadas en catar su sabor tienen los días contados? para Miralles la cosa no es así, ya que en todo proceso creativo el ser humano siempre jugará un rol; en este caso la máquina se encargará de reportar patrones, el trabajo de los catadores será crear las mejores mezclas y procesos, con la ventaja de que no tendrán que esperar 21 días, tiempo que demora en hacerse una de estas bebidas, ya que la IA predijo su sabor.
Este no ha sido el único ‘experimento loco’ que ha hecho Carlsberg
Motivada por una investigación que permitió ver cómo la luz y el sonido afectan a las plantas, la cervecera decidió instalar pantallas de televisión en uno de sus invernaderos para reproducir partidos del Liverpool las 24 horas del día. De esta manera los cultivos de lúpulo rojo constantemente estaban ‘bombardeados’ por los colores de este equipo y los cánticos de su fanaticada, todo esto para elaborar una cerveza especial para los hinchas de dicho seleccionado.