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Puede que los milenials hayan cambiado sus planes de cable por Netflix y otros servicios de streaming, pero los proveedores de cable aún cuentan con la fe de Wall Street.
Gracias a su función de brindar conexiones de banda ancha a los estadounidenses, las perspectivas de la industria seguirán siendo buenas en 2019, dice la analista de Macquarie Capital Amy Yong. El cable se "reinventó como proveedor de conectividad impulsado por una creciente oferta inalámbrica", detalló en una nota a clientes esta semana.
El precio de la banda ancha y las ofertas de productos han sido suficientes para resistir la competencia de tecnologías como la inalámbrica fija. Como resultado, Yong anticipa dos o tres años de envión continuo para el sector.
El servicio de streaming, con Netflix como líder del mercado, se ha convertido rápidamente en el método preferido para ver películas y programas de televisión de los consumidores que prefieren ver lo que quieren, cuando quieren. Las plataformas compiten para atraer a la mayor cantidad posible de espectadores mientras los ejecutivos de medios se enfrentan a nivel global, región por región.
A medida que aumenta la competencia, como las nuevas plataformas de AT&T y Disney que se lanzarán el próximo año, los analistas han bajado un poco su perspectiva alcista sobre el dominio de Netflix.
Netflix aún reina con sus más de 137 millones de suscriptores en todo el mundo. Pese al aumento de la oferta de servicios de streaming, Yong espera que “solo unos pocos salgan ganando”. La mayoría de las plataformas sufrieron por bajos márgenes y depositaron sus esperanzas en anuncios específicos que aumenten la rentabilidad.
No obstante, el cable ha cobrado nueva vida al integrar las aplicaciones de los servicios de streaming, una táctica que Yong considera esencial para mantener y atraer clientes.