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Este miércoles, Facebook aseguró que fueron 87 millones de usuarios los afectados por la recopilación de datos de Cambridge Analytica, la firma de consultoría política que asesoró la campaña presidencial de Donald Trump. Cuando el escándalo estalló, luego de las revelaciones publicadas por los diarios The New York Times y The Observer, la cifra que se manejó en ese momento era de 50 millones de usuarios.
El nuevo estimado llega como parte de los resultados de la auditoría interna que la compañía ha estado realizando para entender cómo sucedió fue que la consultora política pudo llegar a la información personal de los usuarios. En una entrevista con varios medios, Mark Zuckerberg explicó que la cifra corresponde al estimado del máximo número de personas que pudieron haber interactuado con la aplicación que diseño Cambridge Analytica para hacerse con información personal y utilizarla en la pasada campaña presidencial en Estados Unidos.
“No tenemos los registros exactos de lo que sucedió en ese entonces. Lo que hicimos fue reconstruir el escenario y estimar cuántas personas interactuaron con la aplicación diseñada por (Aleksandr) Kogan para capturar los datos personales de nuestros usuarios. De ahí proviene la cifra de 87 millones de personas”, dijo Zuckerberg.
De acuerdo con Facebook, la mayoría de las personas que se vieron involucradas en este asunto son usuarios norteamericanos de la plataforma. La red social dijo que, desde el 9 de abril, comenzaría a notificar a los afectados por las acciones de la consultora política.
Esta información fue revelada en una publicación de Mike Schroepfer, director de tecnología de la compañía, en la que actualiza las acciones que la red social está tomando para restringir el acceso a los datos personales de los usuarios por parte de terceros (como compañías y aplicaciones).
La publicación de Schroepfer se centra en nueve puntos, que van desde el manejo de las API para eventos y páginas de grupos, hasta los procedimientos de búsqueda y recuperación de una cuenta. Sobre el final del documento, el ejecutivo menciona la cifra de 87 millones de usuarios afectados por la recopilación de datos de Cambridge Analytica.
El ejecutivo reconoce que en seguridad digital no hay nunca una fórmula dorada para solucionar los problemas, una medida no será suficiente jamás. “Pero trabajamos para cambiar la economía detrás de estas acciones: estamos implementando cambios y construyendo herramientas para dificultar mucho más que este tipo de escenarios puedan repetirse. Lo que queremos es desestimular drásticamente a los malos actores para que calculen si el esfuerzo es suficiente para el tipo de recompensa que esperan”.
Según Zuckerberg, la compañía ha implementado herramientas de detección de trolls y cuentas falsas mediante el uso de inteligencia artificial. “Sabemos que este es un año importante en términos de elecciones en todo el mundo. Y en este punto estamos trabajando para desconectar la economía alrededor de la propagación de información dudosa con acciones concretas como el veto en la plataforma de publicidad en Facebook. También hay una labor muy importante en detectar cuáles son los actores gubernamentales que afectan estos procesos; acá no se trata tanto del contenido que pueden difundir, sino identificar quiénes son para hacer explícita la relación entre el contenido y quién lo pone a circular en la plataforma”, explicó el ejecutivo.
Durante la entrevista, Zuckerberg también hizo una especie de mea culpa al reconocer que bajarle el perfil al fenómeno de noticias falsas, que en su momento calificó como una locura, había sido un error. También reconoció que la plataforma debe hacer un mejor trabajo en explicar cómo funciona y cómo maneja la información que los usuarios aportan a ella. “No es algo en lo que, históricamente, hayamos sido muy buenos. Y esto ha creado varios conceptos errados sobre cómo operamos y lo que hacemos. Esto no beneficia a nadie”.
Zuckerberg aseguró que, hasta el momento, no ha visto un impacto significativo del escándalo en número de usuarios o en anunciantes. “Igual, esto no está bien. No es bueno, ni queremos que sea así, que la gente piense que no tomamos en serio su información”.
Cambridge Analytica es una consultora británica que, basándose en trabajo académico de las Universidades de Cambridge y Stanford, descubrió cómo recabar información personal de los usuarios en Facebook (como sus tendencias políticas, por ejemplo) mediante el análisis de sus interacciones en la plataforma: interacción entre perfiles y a qué o quién le da ‘like’, por ejemplo. Con esta información, la empresa buscó personalizar y mejorar los mensajes de la campaña Tump para manipular a los votantes en la pasada elección presidencial en Estados Unidos.
La recopilación de los datos personales de los usuarios se hizo sin el conocimiento de éstos y mediante la explotación de ciertos permisos de privacidad habilitados por Facebook, pero que fueron revocados
Las revelaciones hechas por el Times y el Observer, que se apoyaron en el testimonio de Christopher Wylie, un exempleado de la firma de consultoría, han despertado un movimiento global que oscila entre la indignación y la exigencia de respuestas y mayor responsabilidad con el cuidado de los datos personales de los más de 2.200 millones de usuarios que tiene la plataforma
Mark Zuckerberg, CEO y fundador de Facebook, ofrecerá testimonio ante la Cámara de Representantes de Estados Unidos el 11 de abril para responder por el rol de la compañía en el escándalo de Cambridge Analytica.