Noticias

Últimas Noticias

    Política

    Judicial

      Economía

      Mundo

      Bogotá

        Entretenimiento

        Deportes

        Colombia

        El Magazín Cultural

        Salud

          Ambiente

          Investigación

            Educación

              Ciencia

                Género y Diversidad

                Tecnología

                Actualidad

                  Reportajes

                    Historias visuales

                      Colecciones

                        Podcast

                          Cromos

                          Vea

                          Opinión

                          Opinión

                            Editorial

                              Columnistas

                                Caricaturistas

                                  Lectores

                                  Blogs

                                    Suscriptores

                                    Suscriptores

                                      Beneficios

                                        Tus artículos guardados

                                          Somos El Espectador

                                            Estilo de vida

                                            La Red Zoocial

                                            Gastronomía y Recetas

                                              La Huerta

                                                Moda e Industria

                                                  Tarot de Mavé

                                                    Autos

                                                      Juegos

                                                        Pasatiempos

                                                          Horóscopo

                                                            Música

                                                              Turismo

                                                                Marcas EE

                                                                Colombia + 20

                                                                BIBO

                                                                  Responsabilidad Social

                                                                  Justicia Inclusiva

                                                                    Desaparecidos

                                                                      EE Play

                                                                      EE play

                                                                        En Vivo

                                                                          La Pulla

                                                                            Documentales

                                                                              Opinión

                                                                                Las igualadas

                                                                                  Redacción al Desnudo

                                                                                    Colombia +20

                                                                                      Destacados

                                                                                        BIBO

                                                                                          La Red Zoocial

                                                                                            ZonaZ

                                                                                              Centro de Ayuda

                                                                                                Newsletters
                                                                                                Servicios

                                                                                                Servicios

                                                                                                  Descuentos

                                                                                                    Idiomas

                                                                                                    EE ADS

                                                                                                      Cursos y programas

                                                                                                        Más

                                                                                                        Blogs

                                                                                                          Especiales

                                                                                                            Descarga la App

                                                                                                              Edición Impresa

                                                                                                                Suscripción

                                                                                                                  Eventos

                                                                                                                    Foros El Espectador

                                                                                                                      Pauta con nosotros en EE

                                                                                                                        Pauta con nosotros en Cromos

                                                                                                                          Pauta con nosotros en Vea

                                                                                                                            Avisos judiciales

                                                                                                                              Preguntas Frecuentes

                                                                                                                                Contenido Patrocinado
                                                                                                                                26 de febrero de 2018 - 09:00 p. m.

                                                                                                                                ¿Quién responde cuando el computador dice no?: inteligencia artificial con parámetros humanos

                                                                                                                                Esta tecnología debe contar con parámetros éticos y responsabilidades claras porque su mal uso puede generar serias afectaciones sociales a escala global.

                                                                                                                                Santiago La Rotta / @troskiller

                                                                                                                                iStock.
                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                En 1961, Stanley Milgram diseñó una serie de experimentos para, de cierta forma, medir la respuesta de la gente a las figuras de autoridad. La cosa era así: los voluntarios debían administrar pequeños electrochoques a una persona cada vez que cometiera errores. Esta última era un actor contratado por los investigadores y realmente no recibía corriente. Contra todo pronóstico, los voluntarios llegaron a administrar lo que ellos creían eran niveles peligrosos de corriente, sólo porque los científicos detrás del experimento lo indicaron.

                                                                                                                                “Nadie habría aceptado administrar una carga peligrosa de entrada, pero si los incrementos son graduales, bueno, eso parecía funcionar para los voluntarios del estudio de Milgram. Cuando las personas dudaban, el científico les decía, muy amablemente: ‘Tranquilos, es parte del experimento’. La gente seguía subiendo el nivel de corriente simulado”, dice la doctora Paula Boddington, investigadora sénior de la Escuela de Ciencias de la Computación de la Universidad de Oxford. Y añade: “Puede que con la tecnología pase algo similar: vamos cambiando y perdiendo cosas en el camino, pieza por pieza, entonces nos acostumbramos y seguimos y lo aceptamos porque hay hombres de ciencia que están diseñando el mundo del futuro. Hay que debatir esta idea”.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                Lea también: Los peligros de pensar que la tecnología hace milagros

                                                                                                                                Read more!

                                                                                                                                En el discurso de la doctora Boddington, la inteligencia artificial es una de las tecnologías que más pueden alterar el funcionamiento de la sociedad y por ello necesita un debate público para resolver preguntas de fondo, que sintetiza al decir: “¿Quién responde cuando la máquina dice que no?”.

                                                                                                                                Esta investigadora se refiere al rol creciente que técnicas como el aprendizaje de máquinas y redes neuronales (dos componentes de lo que comúnmente se conoce como inteligencia artificial o IA) están teniendo en la selección de maestros para sistemas públicos de educación o en la calificación crediticia de los usuarios de un banco. El concepto que más repite Boddington es el de responsabilidad: “Al final, hay personas detrás de estas decisiones. No es un asunto que deba quedar en manos de compañías o corporaciones. Hay responsabilidades individuales porque hay afectaciones individuales o sobre porciones enteras de la sociedad”.

                                                                                                                                ¿Se ha preguntado qué pasará cuando un algoritmo decida que no es elegible para un plan de salud prepagada o para cierta cobertura de seguro médico? ¿Cómo se apela la decisión que toma una máquina, que actúa bajo parámetros que suelen ser secretos o al menos no públicos? La voz de Boddington se suma a la de un grupo nutrido, y creciente, de investigadores, empresarios y (más escasos) diseñadores de políticas públicas que piden pautas y estándares humanos para diseñar una tecnología que puede tener profundas implicaciones en campos como el trabajo, la educación y la salud.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                “La tecnología, al igual que la economía, no es un asunto que surge de la nada, una entidad que se da por sentada. Son procesos y evoluciones que a la larga son la suma de elecciones humanas. No se puede olvidar esto”, dice Clara Neppel, directora para Europa del Instituto Europeo de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos, una organización, que, entre otras tareas, se dedica a crear estándares para el diseño de tecnología.

                                                                                                                                Read more!

                                                                                                                                El foco sobre la IA se debe, en buena parte, al rápido desarrollo de una serie de técnicas e ideas que durante décadas tuvieron un desarrollo más bien lento. El cambio llegó con la experimentación con redes neuronales (una especie de imitación digital de cómo funciona un cerebro humano) y la utilización de tarjetas de video para manejar las vastas cantidades de datos y el procesamiento necesarios para “educar” a una máquina.

                                                                                                                                Su utilidad ha sido probada a escala industrial en, por ejemplo, el manejo de consumo de electricidad en servidores de Google: la misma tecnología capaz de jugar go (juego de mesa más complejo que el ajedrez) optimiza el almacenamiento en los centros de datos de la compañía y mejora la eficiencia energética de estas instalaciones en un 15 %.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                Asimismo, se estima que más de 15 % de las nuevas preguntas que los usuarios le hacen al buscador de esta empresa son respondidas utilizando inteligencia artificial.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                “No soy una pesimista de la tecnología. De hecho, me considero en el lado totalmente opuesto, pero creo que nos hace falta preguntar más cosas. La inteligencia artificial puede reemplazar el razonamiento en algunos lugares y, francamente, a veces puede ser incluso más seguro que lo haga, como en un carro. Pero hay muchos aspectos que deben ser gobernados por los humanos. La utilización indiscriminada de IA puede erosionar la cadena de toma de decisiones y aislarnos de la responsabilidad detrás de una elección. Nadie quiere esto”, dice Boddington.

                                                                                                                                Cathy O’Neil, doctora en matemáticas, argumenta algo similar en su libro Weapons of Math Destruction, al relatar cómo el contacto humano, la posibilidad de interpelar a una persona, puede convertirse en un lujo, un servicio extra, a medida que la tecnología automatiza funciones que solían ser realizadas por una persona.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                De acuerdo con el Banco Mundial, una tajada amplia de la población global que depende de lo que define como trabajos rutinarios, como call centers o la organización de archivos, podría estar en riesgo inminente ante la automatización que estas posiciones podrían sufrir en pocos años.

                                                                                                                                Neppel asegura que la rápida evolución de ciertas tecnologías obliga a “rediseñar nuestro esquema de valores. Cómo medimos el éxito: hoy es un asunto casi exclusivamente económico, pero no tiene en cuenta las consecuencias de ciertas decisiones”.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                Y Boddington añade: “Hay que entender cómo funciona y cómo se diseña la IA porque, si no, cómo explicamos los resultados. No se trata de aspirar al control total y global de esta tecnología. Pero sí hay que entender el marco general y crear los estándares bajo los cuales opera. Si no, repito, ¿quién responde cuando el PC diga no?”.

                                                                                                                                iStock.
                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                En 1961, Stanley Milgram diseñó una serie de experimentos para, de cierta forma, medir la respuesta de la gente a las figuras de autoridad. La cosa era así: los voluntarios debían administrar pequeños electrochoques a una persona cada vez que cometiera errores. Esta última era un actor contratado por los investigadores y realmente no recibía corriente. Contra todo pronóstico, los voluntarios llegaron a administrar lo que ellos creían eran niveles peligrosos de corriente, sólo porque los científicos detrás del experimento lo indicaron.

                                                                                                                                “Nadie habría aceptado administrar una carga peligrosa de entrada, pero si los incrementos son graduales, bueno, eso parecía funcionar para los voluntarios del estudio de Milgram. Cuando las personas dudaban, el científico les decía, muy amablemente: ‘Tranquilos, es parte del experimento’. La gente seguía subiendo el nivel de corriente simulado”, dice la doctora Paula Boddington, investigadora sénior de la Escuela de Ciencias de la Computación de la Universidad de Oxford. Y añade: “Puede que con la tecnología pase algo similar: vamos cambiando y perdiendo cosas en el camino, pieza por pieza, entonces nos acostumbramos y seguimos y lo aceptamos porque hay hombres de ciencia que están diseñando el mundo del futuro. Hay que debatir esta idea”.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                Lea también: Los peligros de pensar que la tecnología hace milagros

                                                                                                                                Read more!

                                                                                                                                En el discurso de la doctora Boddington, la inteligencia artificial es una de las tecnologías que más pueden alterar el funcionamiento de la sociedad y por ello necesita un debate público para resolver preguntas de fondo, que sintetiza al decir: “¿Quién responde cuando la máquina dice que no?”.

                                                                                                                                Esta investigadora se refiere al rol creciente que técnicas como el aprendizaje de máquinas y redes neuronales (dos componentes de lo que comúnmente se conoce como inteligencia artificial o IA) están teniendo en la selección de maestros para sistemas públicos de educación o en la calificación crediticia de los usuarios de un banco. El concepto que más repite Boddington es el de responsabilidad: “Al final, hay personas detrás de estas decisiones. No es un asunto que deba quedar en manos de compañías o corporaciones. Hay responsabilidades individuales porque hay afectaciones individuales o sobre porciones enteras de la sociedad”.

                                                                                                                                ¿Se ha preguntado qué pasará cuando un algoritmo decida que no es elegible para un plan de salud prepagada o para cierta cobertura de seguro médico? ¿Cómo se apela la decisión que toma una máquina, que actúa bajo parámetros que suelen ser secretos o al menos no públicos? La voz de Boddington se suma a la de un grupo nutrido, y creciente, de investigadores, empresarios y (más escasos) diseñadores de políticas públicas que piden pautas y estándares humanos para diseñar una tecnología que puede tener profundas implicaciones en campos como el trabajo, la educación y la salud.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

                                                                                                                                “La tecnología, al igual que la economía, no es un asunto que surge de la nada, una entidad que se da por sentada. Son procesos y evoluciones que a la larga son la suma de elecciones humanas. No se puede olvidar esto”, dice Clara Neppel, directora para Europa del Instituto Europeo de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos, una organización, que, entre otras tareas, se dedica a crear estándares para el diseño de tecnología.

                                                                                                                                Read more!

                                                                                                                                El foco sobre la IA se debe, en buena parte, al rápido desarrollo de una serie de técnicas e ideas que durante décadas tuvieron un desarrollo más bien lento. El cambio llegó con la experimentación con redes neuronales (una especie de imitación digital de cómo funciona un cerebro humano) y la utilización de tarjetas de video para manejar las vastas cantidades de datos y el procesamiento necesarios para “educar” a una máquina.

                                                                                                                                Su utilidad ha sido probada a escala industrial en, por ejemplo, el manejo de consumo de electricidad en servidores de Google: la misma tecnología capaz de jugar go (juego de mesa más complejo que el ajedrez) optimiza el almacenamiento en los centros de datos de la compañía y mejora la eficiencia energética de estas instalaciones en un 15 %.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                Asimismo, se estima que más de 15 % de las nuevas preguntas que los usuarios le hacen al buscador de esta empresa son respondidas utilizando inteligencia artificial.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                “No soy una pesimista de la tecnología. De hecho, me considero en el lado totalmente opuesto, pero creo que nos hace falta preguntar más cosas. La inteligencia artificial puede reemplazar el razonamiento en algunos lugares y, francamente, a veces puede ser incluso más seguro que lo haga, como en un carro. Pero hay muchos aspectos que deben ser gobernados por los humanos. La utilización indiscriminada de IA puede erosionar la cadena de toma de decisiones y aislarnos de la responsabilidad detrás de una elección. Nadie quiere esto”, dice Boddington.

                                                                                                                                Cathy O’Neil, doctora en matemáticas, argumenta algo similar en su libro Weapons of Math Destruction, al relatar cómo el contacto humano, la posibilidad de interpelar a una persona, puede convertirse en un lujo, un servicio extra, a medida que la tecnología automatiza funciones que solían ser realizadas por una persona.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                De acuerdo con el Banco Mundial, una tajada amplia de la población global que depende de lo que define como trabajos rutinarios, como call centers o la organización de archivos, podría estar en riesgo inminente ante la automatización que estas posiciones podrían sufrir en pocos años.

                                                                                                                                Neppel asegura que la rápida evolución de ciertas tecnologías obliga a “rediseñar nuestro esquema de valores. Cómo medimos el éxito: hoy es un asunto casi exclusivamente económico, pero no tiene en cuenta las consecuencias de ciertas decisiones”.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                Y Boddington añade: “Hay que entender cómo funciona y cómo se diseña la IA porque, si no, cómo explicamos los resultados. No se trata de aspirar al control total y global de esta tecnología. Pero sí hay que entender el marco general y crear los estándares bajo los cuales opera. Si no, repito, ¿quién responde cuando el PC diga no?”.

                                                                                                                                Por Santiago La Rotta / @troskiller

                                                                                                                                Ver todas las noticias
                                                                                                                                Read more!
                                                                                                                                Read more!
                                                                                                                                Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
                                                                                                                                Aceptar