Reseña de "Star Wars Battlefront II": otra promesa sin cumplir

Si bien el juego da una experiencia inmersiva y divertida en el mundo de “Star Wars”, tanto por su ambiente, música y jugabilidad, se queda corto en otros aspectos.

Ruben Barboza
04 de enero de 2018 - 02:08 a. m.
Cortesía Electronic Arts
Cortesía Electronic Arts
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

Star Wars: Battlefront II llegó a los estantes de todo el mundo continuando la tradición iniciada por la primera entrega: estar rodeado de controversia. Esta vez, particularmente por el tema de las microtransacciones, que incluso ha iniciado discusión a nivel gubernamental en Estados Unidos y Bélgica sobre si este tipo de mecanismos constituyen o no juegos de azar.

Sin embargo, poco tiempo después del lanzamiento se modificaron algunos elementos controversiales del juego, por lo menos temporalmente. Es esta última la versión que tuvimos la oportunidad de probar para esta reseña. (Lea "Reseña de Star Wars: Battlefront, una guerra a medias")

Desde el anuncio del juego, los gamers del mundo se vieron entusiasmados y cautelosos por Battlefront II, que prometía enmendar muchos errores de la primera entrega y darles a los fans lo que pedían a gritos desde un buen tiempo. ¿Logró su cometido? En parte. Si bien el juego nos da una experiencia inmersiva y divertida en el mundo de Star Wars, tanto por su ambiente, música y jugabilidad, mejorando algunos elementos de la versión pasada y dándonos contenido nuevo, como el modo historia, el juego se queda algo corto cumpliendo en esas promesas.

La campaña se centra principalmente en la comandante Iden Versio, del escuadrón imperial de fuerzas especiales Inferno Squad, interpretada por la actriz Janina Gavankar. Versio, luego de presenciar junto con su escuadrón la destrucción de la segunda estrella de la muerte en la batalla de Endor, decide vengar al emperador y acabar con los rebeldes de una vez por todas.

La historia cobija un período de 30 años, empezando en Endor y terminando poco después del desenlace de The Force Awakens. La trama, si bien empieza fuerte, mostrándonos una perspectiva poco vista en el universo de Star Wars, va alejándose repentinamente de esta premisa a terrenos más familiares de forma un poco apresurada, dejando mucho que desear en el desarrollo de sus personajes y la ejecución de la trama.

Para no dañarla, les contaremos solamente que es una campaña que esencialmente consta de dos actos y se puede completar en alrededor de cinco horas, triste fenómeno que se hace más común en los juegos de disparos de la actualidad que incluyen un modo historia, pero donde indudablemente el factor multijugador es predominante, abandonando así a una gran parte de una audiencia que quiere ver una buena historia de Star Wars en un videojuego, que ya hace buen rato no se ha visto.

Debido a su corta duración, sufre lógicamente el desarrollo, dando a veces poco contexto a la dirección que toma la historia y principalmente lo que motiva a Iden Versio. Muchas veces ocurren cosas en la trama porque es lo que usualmente se espera de este tipo de narración y no porque se haya construido un buen trasfondo que las sustente.

Sin embargo, la campaña, en términos generales, es muy divertida y dinámica, salvo algunos segmentos. No se enfoca siempre en la comandante, sino que nos da la oportunidad de jugar como otros icónicos personajes de la saga. Al concluir quedan ganas de repetir un par de misiones.

Aparte del modo historia hay también un modo Arcade, que viene a reemplazar el modelo de misiones y skirmish de la anterior entrega, donde puedes jugar solo o con un amigo de manera local para eliminar enemigos controlados por la computadora. Lastimosamente, sigue siendo tratado como un segmento pequeño en el que los jugadores sólo deben jugar un período corto con el propósito de calentar para el multijugador, y no uno robusto que se soporte por sí solo.

A primera vista incluye un modelo similar a las viejas misiones del primero, en donde prácticamente siempre estaremos haciendo diferentes variaciones de los dos únicos modos de juegos que contiene el Arcade. Uno es un Team Deathmatch y el otro es una especie de juego contra el reloj, matando a un determinado número de enemigos antes de que se acabe el tiempo.

Tiene también un segmento de tutorial para entrenar nuestras habilidades y uno para diseñar las partidas de estos dos modos alterando diferentes factores, incluido el número de enemigos y en qué mapa podemos jugar.

Como ven, hay poca variedad y cosas por hacer. Hubiese sido genial si también tuviera la modalidad de héroes contra villanos o una de las nuevas modalidades de multijugador, como asalto de cazas estelares, dándole más variedad al Arcade.

Pero ahora sí hablemos del grueso de este juego: el multijugador. La buena noticia es que sigue siendo muy entretenido y fácil de jugar. Disparar a stormtroopers, clones, rebeldes y droides es una de las cosas más satisfactorias que puedan experimentar en un juego este año.

Ahora, por ejemplo, utilizar los ataques de los héroes se volvió más preciso. Las naves se manejan mucho mejor, al igual que destruir a los enemigos en las batallas aéreas y espaciales. Otra novedad es que ha cambiado la forma en que puedes ser un héroe en el campo de batalla o utilizar un vehículo; el sistema de power ups que anteriormente se encontraban regados por el mapa fue sustituido por power points que ganas durante el combate, dependiendo de qué tan bien te desenvuelvas en la partida, lo cual me parece mejor, ya que premian la habilidad y no la suerte.

Además de más héroes, hay un número mayor de locaciones y vehículos de las tres generaciones de Star Wars, a comparación del primero. Battlefront II trae, al igual que el primero, las modalidades de héroes contra villanos y estallido, además de modos nuevos, como “Asalto de cazas estelares”, que es la modalidad de batallas con naves, “Ataque y asalto galáctico”, que a mi parecer es el mejor modo de todos, al enfrentarte en batallas a gran escala en mapas más interesantes y con muchas más opciones para gastar los puntos de batalla en naves y personajes.

Con los nuevos cambios, Battlefront regresa a sus viejas andanzas utilizando un sistema de clases, en donde, a medida que juegas como cada una de estas, bien sea asalto, pesado, oficial y especialista, vas mejorándolas y volviéndote mejor con ellas. Sin embargo, este sistema de progresión tiene un aspecto preocupante que fue el detonante del justificado inconformismo en la comunidad gamer: el sistema de Star Cards, que ha sido reformado desde la primera entrega, y así mismo se ha modificado la forma de obtenerlas.

Estas Star Cards te proporcionan armas secundarias o habilidades a la hora del combate. Cada carta tiene un nivel de rareza, siendo las más raras las que ofrecen un mayor beneficio a los jugadores. Entre más raras sean tus cartas, mejor posicionado estás en las partidas en referencia a otros jugadores que no han obtenido cartas igual de eficaces como las tuyas, lo cual es frustrante. Estas cartas son obtenidas únicamente por medio de la compra de loot boxes, que te darán cartas de manera aleatoria y que además pueden contener gestos para tus personajes o incluso trajes, no sólo Star Cards.

Las loot boxes pueden ser compradas con créditos que ganas después de cada partida en el multijugador y por jugar secciones de los modos de un jugador, pero estos se encuentran muy limitados, ya que, por ejemplo, en el Arcade sólo puedes recibir una cantidad determinada día de por medio, desincentivando aún más a aquellos que quieren probar algo distinto al multijugador.

Hasta hace poco, y aquí es cuando uno entiende el porqué de una mecánica tan torpe, podían ser compradas con dinero real por los jugadores, estableciendo un sistema de pagar para ganar dentro del juego. Sin embargo, hay que aclarar que esta posibilidad de pagar con dinero real fue removida, al menos temporalmente, por las protestas de la comunidad gamer. Si bien fue eliminada del juego, la estructura alrededor sigue en pie, desgastando poco a poco a los jugadores con su lenta sensación de progresión y maquillando de diferentes formas la idea del pago con nuestro dinero real, haciéndola más atractiva.

Obtener suficientes créditos para comprar Star Cards que valgan la pena y las cuales se acomoden a nuestro estilo de juego es una tarea bastante ardua y prolongada, así que ármate de paciencia si quieres tener en algún punto una mano decente de cartas para entrar en combate, el cual definitivamente no tiene como prioridad la igualdad de condiciones. Una lástima, pues arruina toda la experiencia.

Por Ruben Barboza

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
Aceptar