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El turismo ha experimentado un cambio profundo en los últimos años, impulsado por el deseo de los viajeros de vivir experiencias más auténticas y cercanas a la naturaleza y la cultura local. Y es que en la actualidad, el visitante no solo busca ver, sino que busca conectar: participar en actividades en contacto con la naturaleza, explorar prácticas culturales y descubrir las raíces y tradiciones de cada destino al que va.
Esto se ve reflejado en la investigación anual Travel Predictions de Booking.com, según la cual para 2025 los viajeros están “reescribiendo el manual” del turismo, pues están cambiando las escapadas tradicionales para priorizar conexiones más significativas, tanto consigo mismos como con las personas y lugares que encuentran en su camino.
Para llevar a cabo esta investigación, encuestaron a más de 27,000 viajeros en 33 países y territorios, en donde encontraron que los viajeros ya no se conforman con experiencias tradicionales y estandarizadas. En cambio, buscan viajes que desafíen las convenciones y se alineen con sus valores personales, ya sea la sostenibilidad, el bienestar o la inmersión cultural. Esto representa un cambio significativo en la forma en que las personas planean y experimentan los viajes, alejándose de las escapadas convencionales para crear conexiones más profundas consigo mismos, con los demás y con los destinos que visitan.
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Por ejemplo, para 2025, el turismo nocturno se perfila como una tendencia en ascenso, impulsada por el interés de los viajeros en establecer una conexión más profunda con el universo. Y es que a medida que el turismo espacial se vuelve una posibilidad real, muchos optan por actividades astronómicas accesibles. Entre estas se destacan los baños de estrellas, recorridos guiados por expertos en observación estelar, la asistencia a eventos cósmicos únicos y el seguimiento de constelaciones, lo que permite una exploración cercana y auténtica del cosmos desde la Tierra.
Esta tendencia también responde a una creciente conciencia ambiental y a las preocupaciones sobre el cambio climático. Más de la mitad de los viajeros prefiere realizar actividades nocturnas para evitar el calor diurno, optando por destinos más frescos que les permitan reducir la exposición a los rayos UV. De hecho, el 54% de los viajeros se muestra dispuesto a alojarse en lugares con baja contaminación lumínica, para así favorecer la preservación de la flora y fauna locales y promoviendo un turismo más sostenible y respetuoso con el entorno natural.
Por otra parte, los viajes están dejando de concebirse como solo momentos breves de descanso para convertirse en experiencias de bienestar a largo plazo y es que un 60% de los viajeros encuestados muestra interés en los llamados “retiros de longevidad,” una evolución de los paquetes de bienestar tradicionales que ahora se centran en soluciones integrales para una vida más saludable y duradera. Estos retiros, diseñados para ofrecer una revitalización profunda, incluyen actividades como terapias de vibración corporal, exposición a luz roja, crioterapia, entre otros tratamientos regenerativos.
Además, 67% de los viajeros buscan integrar prácticas de equilibrio en su rutina diaria, y el 58% está dispuesto a invertir en vacaciones cuyo objetivo principal sea extender su esperanza de vida y bienestar.
¿Cómo está influyendo la IA en la forma de viajar?
No es ningún secreto que la inteligencia artificial está transformando todos los sectores, y el turismo no es la excepción. Según el informe, esta tecnología está impulsando los llamados “itinerarios alternativos,” que permiten a los viajeros tomar decisiones más informadas y auténticas. Esto se ve reflejado en las cifras, pues el 41% de los viajeros manifiesta interés en usar la IA para organizar sus viajes, pero desde una perspectiva más consciente y responsable, por ejemplo, cerca del 44% de los encuestados evitará etiquetar en redes sociales las ubicaciones de destinos menos conocidos, en un esfuerzo por proteger estos lugares de la masificación. Asimismo, la tecnología les ofrecerá la posibilidad de descubrir destinos menos concurridos, los cuales estén alejados del turismo masivo y sean poco conocidos.
En cuanto a las prioridades de los viajeros de distintas generaciones, los adultos mayores, por ejemplo, están inclinándose cada vez más a disfrutar de sus ahorros en experiencias memorables, dejando atrás la idea de reservarlos como herencia para sus hijos. Esta tendencia, conocida como “SKI” (Spending the Kids’ Inheritance), refleja el deseo de vivir momentos únicos y de hacer del presente un legado de recuerdos compartidos, en donde los adultos buscan destinar sus fondos al viaje de su vida para crear momentos inolvidables.
Algo interesante de esta tendencia es que estas generaciones son propensos a financiar vacaciones para sus hijos y nietos, pues el 80% de los encuestados mencionan que están dispuestos a pagar el próximo viaje de sus hijos. Este “Banco de Mamá y Papá”, como lo llama el informe, busca fomentar una mayor unión familiar y asegurar experiencias compartidas, permitiendo que abuelos, padres y nietos disfruten juntos de las mejores aventuras.
Por otro lado, para la generación Z, el concepto de las “vacaciones solo para hombres” se transforma, alejándose de los estereotipos tradicionales de ocio, pues ahora ellos buscan experiencias donde se priorice el bienestar, el desarrollo personal y la vulnerabilidad, alejándose de los conceptos de deportes de alto riesgo y fiestas. Estos viajes buscan reducir el estrés y fortalecer los lazos emocionales, con casi un tercio de los encuestados interesados en hacer nuevas amistades y mejorar su conexión con seres queridos.
De hecho, rompiendo con las expectativas tradicionales, los baby boomers (aquellos nacidos entre 1946 y 1964) se perfilan como los buscadores de aventuras extremas en 2025, pues lejos de querer una jubilación tranquila, optarán por experiencias llenas de adrenalina y desafíos. Desde cabalgar por paisajes salvajes y celebrar en viñedos, hasta navegar por ríos imponentes y explorar glaciares, esta generación busca reescribir su espíritu aventurero. Algunos incluso expresan deseos por practicar deportes extremos como el paracaidismo, el surf en arena o el buceo en cuevas.
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Tendencias de viaje para 2025
Según Booking, los viajeros neurodivergentes impulsarán cambios en la industria del turismo para hacerla más inclusiva, esto se debe a que alrededor del 49 % de estas personas ha enfrentado dificultades al viajar debido a su condición, mientras que un 50 % siente que sus opciones de viaje son limitadas por su neurodivergencia. Esta situación ha generado una creciente demanda de soluciones tecnológicas inclusivas, como herramientas de inteligencia artificial que proporcionen información de viaje en tiempo real, reportes de retrasos y recomendaciones de espacios tranquilos en aeropuertos y hoteles. Además, hay una fuerte preferencia por opciones que faciliten la experiencia de viaje, como salas sensoriales y alternativas de cancelación de ruido, que ayuden a reducir la ansiedad y ofrecer un entorno más cómodo y seguro.
De hecho, una de las predicciones para 2025 es que los aeropuertos se transformarán en centros de entretenimiento y experiencias exclusivas, redefiniendo el concepto de espera antes de un vuelo, haciendo que una proporción considerable de viajeros, especialmente entre la generación Z y los millennials, seleccionen destinos según las instalaciones de sus aeropuertos, buscando desde cápsulas para dormir y spas hasta restaurantes de alta cocina.
Por último, el estilo de viaje sustentable tomará protagonismo con el auge de la moda vintage. Muchos viajeros, especialmente de la generación Z, optarán por comprar ropa de segunda mano durante sus vacaciones, reflejando un compromiso tanto con el medio ambiente como con el ahorro, convirtiendo la ropa vintage en un nuevo tipo de souvenir.
Booking finaliza el informe con un mensaje de vicepresidente sénior y director de marketing Arjan Dijk, quien comentó que “En 2025, los viajeros utilizarán sus viajes para transformarse a sí mismos, sus relaciones y, en última instancia, el mundo que los rodea. Todo esto se trata de romper las normas de viaje para fomentar un sentido más profundo de conexión. La tecnología y la imaginación se están uniendo para crear una nueva era de tradiciones y, en última instancia, hacer que sea más fácil para todos dar forma a sus propios viajes en 2025 y más allá”.
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