Cauca imperdible: rutas y planes para conocer la magia del Sur colombiano
Explore el Cauca a través de cinco planes turísticos que combinan naturaleza, historia y cultura. Desde sus montañas, hasta la herencia ancestral de sus pueblos indígenas, este destino lo sorprenderá con su riqueza y diversidad.
Diego Suárez
El Cauca, ubicado en el suroeste de Colombia, es un departamento que alberga a aproximadamente 1,5 millones de habitantes y recibe anualmente a cuatro millones de turistas, según la Secretaria de Desarrollo Económico del departamento, atraídos por su diversidad cultural, histórica y natural. La geografía de la región incluye montañas, valles y ríos, lo que la convierte en un destino ideal para quienes buscan experiencias en la naturaleza y la cultura.
La Gobernación de Cauca compartió con El Espectador cinco planes turísticos imperdibles en ese territorio, teniendo en cuenta la accesibilidad de los destinos, la calidad de las experiencias ofrecidas y el impacto positivo en las comunidades locales. Estos planes se exponen en el marco de la promoción del turismo en Cauca, que busca destacar el potencial de municipios menos explorados, al tiempo que se fomenta el desarrollo económico y la conservación ambiental. Desde la exploración de paisajes naturales hasta la inmersión en tradiciones ancestrales, el Cauca se presenta como un destino turístico que promete dejar una huella en la memoria de sus visitantes.
Plazoleta Regional de la Paz
Ubicada en el municipio de Miranda, Cauca, es un proyecto cultural y turístico diseñado para impulsar el desarrollo local, a través de la promoción de la interculturalidad y el emprendimiento. Este espacio, cuya construcción está valorada en $13.310 millones según la Secretaria de Desarrollo Económico del departamento, se encuentra a unos 50 kilómetros al norte de Popayán y es parte de las iniciativas del gobierno colombiano para dinamizar el turismo en zonas históricamente afectadas por el conflicto armado.
La plazoleta abarca más de 8.000 metros cuadrados y está equipada con áreas para actividades deportivas y culturales, un bulevar para paseos tranquilos, zonas verdes, y un teatrino para espectáculos al aire libre. En sus áreas comerciales se exhibe lo mejor de la oferta culinaria local, que incluye platos típicos como el sancocho de gallina, la arepa de maíz pelao y dulces tradicionales de la región. Además, se destacan los productos artesanales, especialmente tejidos y alfarería, que representan el trabajo de las comunidades locales.
Una de las principales atracciones es la posibilidad de participar en eventos culturales, como presentaciones de música y danza tradicional, ferias de emprendimiento local y actividades deportivas que incluyen fútbol y ciclismo. Para los visitantes que desean un recorrido más tranquilo, la plazoleta cuenta con jardines de estar, perfectos para descansar y disfrutar del paisaje.
En cuanto a recomendaciones para los turistas, es ideal visitar la plazoleta durante las épocas de festivales o eventos comunitarios, cuando se concentra la mayor actividad cultural. La entrada a la plazoleta es gratuita, y las actividades dentro del espacio, como presentaciones y eventos comunitarios, también suelen ser accesibles al público sin costo adicional. No obstante, la compra de productos artesanales y gastronómicos sí tiene un costo, con precios que varían entre $10.000 y $30.000, dependiendo de los productos.
Es importante ir preparado para el clima cálido y variado de la región, por lo que se recomienda llevar ropa ligera, protector solar, y un sombrero. Es aconsejable planificar el transporte con anticipación. El acceso es posible por carretera desde Popayán o Cali, y existen opciones de transporte público y taxis privados para llegar al municipio. En cuanto al alojamiento, Miranda cuenta con varias opciones de hospedaje, desde hostales económicos hasta hoteles rurales más cómodos, con precios que oscilan entre $50.000 y $150.000 por noche.
Parque Nacional Natural Puracé
Ubicado a 45 kilómetros al sureste de la ciudad de Popayán es conocido por su paisaje andino, que incluye volcanes, páramos, bosques nubosos, termales, ríos cristalinos, y una biodiversidad que lo convierte en un destino imperdible para los amantes de la naturaleza y el ecoturismo. El parque alberga el Volcán Puracé cuya cima de 4.646 metros sobre el nivel del mar ofrece vistas panorámicas de los valles y montañas.
El senderismo es una de las principales actividades turísticas en Puracé, y las rutas de caminatas varían en dificultad, desde recorridos por los alrededores de las fuentes termales hasta ascensos al volcán.
Durante estas actividades, los visitantes pueden observar paisajes de páramo y avistar especies emblemáticas de fauna, como el cóndor de los Andes, que encuentra refugio en las escarpadas montañas del parque. Otra actividad popular es el avistamiento de aves, ya que el parque es hogar de más de 200 especies. También se pueden visitar las Aguas Termales de San Juan, conocidas por sus propiedades curativas, donde los turistas pueden disfrutar de un baño relajante en piscinas naturales a temperaturas que oscilan entre los 30 y 45°C.
Los precios de entrada para turistas nacionales son de alrededor de $20.000, mientras que los turistas extranjeros pagan $50.000. Los servicios de guías locales, especialmente para las caminatas más largas o el ascenso al volcán, tienen un costo adicional, que puede oscilar entre $50.000 y $100.000 dependiendo de la duración y dificultad del recorrido.
En términos de recomendaciones, es fundamental llevar ropa adecuada para el clima de montaña, que puede ser frío y húmedo, con temperaturas que pueden bajar considerablemente, especialmente en la madrugada o en la cumbre del volcán. También se sugiere llevar calzado especializado, protector solar, y suficiente agua y alimentos energéticos para las caminatas. Dado que la altitud puede afectar a algunas personas, es importante estar preparado para posibles síntomas de mal de altura. Para aquellos que planean escalar el volcán, la aclimatación es clave.
El acceso al parque se puede realizar por carretera desde Popayán, un trayecto que toma aproximadamente dos horas en automóvil. Existen opciones de transporte público que conectan con las comunidades cercanas al parque, aunque se recomienda, para mayor comodidad y flexibilidad, alquilar un vehículo o contratar un servicio de transporte privado. En cuanto al alojamiento, los turistas pueden optar por acampar dentro del parque en áreas designadas o quedarse en las cabañas ecológicas que ofrecen una experiencia más cómoda y cercana a la naturaleza, con precios que rondan los $80.000 a $150.000 por noche.
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Río Páez y la zona arqueológica de Tierradentro
Este destino ofrece a los turistas una experiencia de inmersión en el pasado, con sus tumbas subterráneas y monumentos arqueológicos prehispánicos. Tierradentro, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es famoso por sus hipogeos, cámaras funerarias excavadas bajo tierra, decoradas con motivos geométricos y figuras que representan las creencias y cosmovisión de los pueblos antiguos que habitaron esta zona.
El sitio arqueológico se encuentra cerca del pueblo de San Andrés de Pisimbalá, y es ideal para los amantes de la historia, la arqueología, y el senderismo. Los visitantes pueden recorrer las colinas que rodean Tierradentro y visitar varias tumbas, las más destacadas siendo las ubicadas en los sitios de Segovia, El Duende y El Tablón, a través de un circuito que lleva entre tres y cuatro horas de caminata. Este recorrido ofrece además vistas del paisaje montañoso y del Cañón del Río Páez, que añade un elemento natural de gran belleza al viaje.
El Río Páez, conocido por sus paisajes dramáticos y la fuerza de sus corrientes, es también un sitio importante para deportes de aventura como el rafting y el kayak, aunque estas actividades requieren experiencia debido a las aguas rápidas y los desniveles. También es un lugar de interés cultural, ya que la región es habitada por comunidades indígenas nasa que mantienen vivas sus tradiciones y están dispuestas a compartir su cultura con los visitantes a través de guías locales o visitas a centros culturales.
Se recomienda que los turistas lleven calzado adecuado para caminar, ya que las rutas de senderismo son exigentes y el terreno puede ser irregular. Además, es esencial contar con ropa ligera pero de protección contra el sol, y suficiente agua y provisiones, ya que las tiendas y servicios en la zona son limitados. La entrada al parque arqueológico tiene un costo de $35.000 para extranjeros y $20.000 para colombianos, lo que permite el acceso a todas las áreas del complejo arqueológico por varios días.
Para llegar, lo más conveniente es viajar primero a la ciudad de Popayán y luego tomar un transporte terrestre a San Andrés de Pisimbalá, un viaje que puede durar entre cinco y seis horas debido a las condiciones de las carreteras.
Termales de Coconuco
Es un atractivo turístico situado en el municipio de Coconuco, a unos 20 kilómetros de Popayán, conocido por sus aguas termales que salen de las profundidades de la tierra, ofreciendo una experiencia de relajación en medio de un entorno montañoso. Las termales están rodeadas de paisaje, con vistas a los volcanes de la región, lo que las convierte en un lugar ideal para los amantes de la naturaleza y el bienestar. Las temperaturas de las aguas oscilan entre 38 y 60 grados centígrados, lo que permite disfrutar de diferentes piscinas adaptadas a las preferencias de cada visitante.
Entre las actividades que se pueden realizar en los Termales de Coconuco destacan el baño en las diversas piscinas de agua caliente, ideales para aliviar el estrés y disfrutar de los beneficios terapéuticos del agua mineral. Además, los turistas pueden explorar los senderos cercanos, que ofrecen rutas de caminatas para descubrir la flora y fauna de la región, así como vistas panorámicas que mejoran la visita. Los turistas también tienen la oportunidad de disfrutar de la gastronomía local en los restaurantes que se encuentran en las cercanías, en donde pueden degustar platos típicos de la región, como la trucha y las empanadas.
Se recomienda a los visitantes llevar ropa de baño, toallas, protector solar y, si es posible, sandalias antideslizantes para mayor comodidad al caminar en el área de las termales. Además, es esencial hidratarse adecuadamente, ya que las temperaturas pueden ser elevadas. La entrada a los termales tiene un costo de $20.000 a $40.000, dependiendo de las instalaciones que elija. Para llegar, se puede tomar un transporte desde Popayán hacia Coconuco, un trayecto que dura aproximadamente 45 minutos.
Reserva Natural La Chorrera
Ubicada en el municipio de Inzá, a aproximadamente 90 kilómetros de Popayán, la reserva es famosa por su cascada, considerada una de las más altas de Colombia, con 300 metros de caída. Este lugar es un paraíso para los amantes del ecoturismo, donde pueden disfrutar de actividades como senderismo en sus diversos senderos, avistamiento de aves y exploración de la flora y fauna autóctona.
Para visitar La Chorrera, se recomienda llevar ropa cómoda y adecuada para caminatas, así como calzado resistente, ya que el camino puede ser exigente y resbaladizo en algunas partes. Es fundamental también llevar suficiente agua y alimento, ya que no hay servicios de alimentación en la reserva. La entrada a La Chorrera es generalmente asequible, con un costo aproximado de $10.000 por persona, y los horarios de atención suelen ser de 8:00 a.m. a 5:00 p.m. Se aconseja planificar la visita en la temporada seca, entre diciembre y marzo, para disfrutar de un mejor clima y condiciones más agradables para el senderismo.
Los visitantes también deben tener en cuenta que la reserva promueve el turismo sostenible, por lo que es importante respetar el entorno natural, no dejar basura y seguir las indicaciones de conservación. Con sus impresionantes paisajes y la oportunidad de conectarse con la naturaleza, La Chorrera ofrece una experiencia inolvidable para quienes buscan escapar del bullicio de la ciudad y disfrutar de la tranquilidad del campo colombiano.
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El Cauca, ubicado en el suroeste de Colombia, es un departamento que alberga a aproximadamente 1,5 millones de habitantes y recibe anualmente a cuatro millones de turistas, según la Secretaria de Desarrollo Económico del departamento, atraídos por su diversidad cultural, histórica y natural. La geografía de la región incluye montañas, valles y ríos, lo que la convierte en un destino ideal para quienes buscan experiencias en la naturaleza y la cultura.
La Gobernación de Cauca compartió con El Espectador cinco planes turísticos imperdibles en ese territorio, teniendo en cuenta la accesibilidad de los destinos, la calidad de las experiencias ofrecidas y el impacto positivo en las comunidades locales. Estos planes se exponen en el marco de la promoción del turismo en Cauca, que busca destacar el potencial de municipios menos explorados, al tiempo que se fomenta el desarrollo económico y la conservación ambiental. Desde la exploración de paisajes naturales hasta la inmersión en tradiciones ancestrales, el Cauca se presenta como un destino turístico que promete dejar una huella en la memoria de sus visitantes.
Plazoleta Regional de la Paz
Ubicada en el municipio de Miranda, Cauca, es un proyecto cultural y turístico diseñado para impulsar el desarrollo local, a través de la promoción de la interculturalidad y el emprendimiento. Este espacio, cuya construcción está valorada en $13.310 millones según la Secretaria de Desarrollo Económico del departamento, se encuentra a unos 50 kilómetros al norte de Popayán y es parte de las iniciativas del gobierno colombiano para dinamizar el turismo en zonas históricamente afectadas por el conflicto armado.
La plazoleta abarca más de 8.000 metros cuadrados y está equipada con áreas para actividades deportivas y culturales, un bulevar para paseos tranquilos, zonas verdes, y un teatrino para espectáculos al aire libre. En sus áreas comerciales se exhibe lo mejor de la oferta culinaria local, que incluye platos típicos como el sancocho de gallina, la arepa de maíz pelao y dulces tradicionales de la región. Además, se destacan los productos artesanales, especialmente tejidos y alfarería, que representan el trabajo de las comunidades locales.
Una de las principales atracciones es la posibilidad de participar en eventos culturales, como presentaciones de música y danza tradicional, ferias de emprendimiento local y actividades deportivas que incluyen fútbol y ciclismo. Para los visitantes que desean un recorrido más tranquilo, la plazoleta cuenta con jardines de estar, perfectos para descansar y disfrutar del paisaje.
En cuanto a recomendaciones para los turistas, es ideal visitar la plazoleta durante las épocas de festivales o eventos comunitarios, cuando se concentra la mayor actividad cultural. La entrada a la plazoleta es gratuita, y las actividades dentro del espacio, como presentaciones y eventos comunitarios, también suelen ser accesibles al público sin costo adicional. No obstante, la compra de productos artesanales y gastronómicos sí tiene un costo, con precios que varían entre $10.000 y $30.000, dependiendo de los productos.
Es importante ir preparado para el clima cálido y variado de la región, por lo que se recomienda llevar ropa ligera, protector solar, y un sombrero. Es aconsejable planificar el transporte con anticipación. El acceso es posible por carretera desde Popayán o Cali, y existen opciones de transporte público y taxis privados para llegar al municipio. En cuanto al alojamiento, Miranda cuenta con varias opciones de hospedaje, desde hostales económicos hasta hoteles rurales más cómodos, con precios que oscilan entre $50.000 y $150.000 por noche.
Parque Nacional Natural Puracé
Ubicado a 45 kilómetros al sureste de la ciudad de Popayán es conocido por su paisaje andino, que incluye volcanes, páramos, bosques nubosos, termales, ríos cristalinos, y una biodiversidad que lo convierte en un destino imperdible para los amantes de la naturaleza y el ecoturismo. El parque alberga el Volcán Puracé cuya cima de 4.646 metros sobre el nivel del mar ofrece vistas panorámicas de los valles y montañas.
El senderismo es una de las principales actividades turísticas en Puracé, y las rutas de caminatas varían en dificultad, desde recorridos por los alrededores de las fuentes termales hasta ascensos al volcán.
Durante estas actividades, los visitantes pueden observar paisajes de páramo y avistar especies emblemáticas de fauna, como el cóndor de los Andes, que encuentra refugio en las escarpadas montañas del parque. Otra actividad popular es el avistamiento de aves, ya que el parque es hogar de más de 200 especies. También se pueden visitar las Aguas Termales de San Juan, conocidas por sus propiedades curativas, donde los turistas pueden disfrutar de un baño relajante en piscinas naturales a temperaturas que oscilan entre los 30 y 45°C.
Los precios de entrada para turistas nacionales son de alrededor de $20.000, mientras que los turistas extranjeros pagan $50.000. Los servicios de guías locales, especialmente para las caminatas más largas o el ascenso al volcán, tienen un costo adicional, que puede oscilar entre $50.000 y $100.000 dependiendo de la duración y dificultad del recorrido.
En términos de recomendaciones, es fundamental llevar ropa adecuada para el clima de montaña, que puede ser frío y húmedo, con temperaturas que pueden bajar considerablemente, especialmente en la madrugada o en la cumbre del volcán. También se sugiere llevar calzado especializado, protector solar, y suficiente agua y alimentos energéticos para las caminatas. Dado que la altitud puede afectar a algunas personas, es importante estar preparado para posibles síntomas de mal de altura. Para aquellos que planean escalar el volcán, la aclimatación es clave.
El acceso al parque se puede realizar por carretera desde Popayán, un trayecto que toma aproximadamente dos horas en automóvil. Existen opciones de transporte público que conectan con las comunidades cercanas al parque, aunque se recomienda, para mayor comodidad y flexibilidad, alquilar un vehículo o contratar un servicio de transporte privado. En cuanto al alojamiento, los turistas pueden optar por acampar dentro del parque en áreas designadas o quedarse en las cabañas ecológicas que ofrecen una experiencia más cómoda y cercana a la naturaleza, con precios que rondan los $80.000 a $150.000 por noche.
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Río Páez y la zona arqueológica de Tierradentro
Este destino ofrece a los turistas una experiencia de inmersión en el pasado, con sus tumbas subterráneas y monumentos arqueológicos prehispánicos. Tierradentro, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es famoso por sus hipogeos, cámaras funerarias excavadas bajo tierra, decoradas con motivos geométricos y figuras que representan las creencias y cosmovisión de los pueblos antiguos que habitaron esta zona.
El sitio arqueológico se encuentra cerca del pueblo de San Andrés de Pisimbalá, y es ideal para los amantes de la historia, la arqueología, y el senderismo. Los visitantes pueden recorrer las colinas que rodean Tierradentro y visitar varias tumbas, las más destacadas siendo las ubicadas en los sitios de Segovia, El Duende y El Tablón, a través de un circuito que lleva entre tres y cuatro horas de caminata. Este recorrido ofrece además vistas del paisaje montañoso y del Cañón del Río Páez, que añade un elemento natural de gran belleza al viaje.
El Río Páez, conocido por sus paisajes dramáticos y la fuerza de sus corrientes, es también un sitio importante para deportes de aventura como el rafting y el kayak, aunque estas actividades requieren experiencia debido a las aguas rápidas y los desniveles. También es un lugar de interés cultural, ya que la región es habitada por comunidades indígenas nasa que mantienen vivas sus tradiciones y están dispuestas a compartir su cultura con los visitantes a través de guías locales o visitas a centros culturales.
Se recomienda que los turistas lleven calzado adecuado para caminar, ya que las rutas de senderismo son exigentes y el terreno puede ser irregular. Además, es esencial contar con ropa ligera pero de protección contra el sol, y suficiente agua y provisiones, ya que las tiendas y servicios en la zona son limitados. La entrada al parque arqueológico tiene un costo de $35.000 para extranjeros y $20.000 para colombianos, lo que permite el acceso a todas las áreas del complejo arqueológico por varios días.
Para llegar, lo más conveniente es viajar primero a la ciudad de Popayán y luego tomar un transporte terrestre a San Andrés de Pisimbalá, un viaje que puede durar entre cinco y seis horas debido a las condiciones de las carreteras.
Termales de Coconuco
Es un atractivo turístico situado en el municipio de Coconuco, a unos 20 kilómetros de Popayán, conocido por sus aguas termales que salen de las profundidades de la tierra, ofreciendo una experiencia de relajación en medio de un entorno montañoso. Las termales están rodeadas de paisaje, con vistas a los volcanes de la región, lo que las convierte en un lugar ideal para los amantes de la naturaleza y el bienestar. Las temperaturas de las aguas oscilan entre 38 y 60 grados centígrados, lo que permite disfrutar de diferentes piscinas adaptadas a las preferencias de cada visitante.
Entre las actividades que se pueden realizar en los Termales de Coconuco destacan el baño en las diversas piscinas de agua caliente, ideales para aliviar el estrés y disfrutar de los beneficios terapéuticos del agua mineral. Además, los turistas pueden explorar los senderos cercanos, que ofrecen rutas de caminatas para descubrir la flora y fauna de la región, así como vistas panorámicas que mejoran la visita. Los turistas también tienen la oportunidad de disfrutar de la gastronomía local en los restaurantes que se encuentran en las cercanías, en donde pueden degustar platos típicos de la región, como la trucha y las empanadas.
Se recomienda a los visitantes llevar ropa de baño, toallas, protector solar y, si es posible, sandalias antideslizantes para mayor comodidad al caminar en el área de las termales. Además, es esencial hidratarse adecuadamente, ya que las temperaturas pueden ser elevadas. La entrada a los termales tiene un costo de $20.000 a $40.000, dependiendo de las instalaciones que elija. Para llegar, se puede tomar un transporte desde Popayán hacia Coconuco, un trayecto que dura aproximadamente 45 minutos.
Reserva Natural La Chorrera
Ubicada en el municipio de Inzá, a aproximadamente 90 kilómetros de Popayán, la reserva es famosa por su cascada, considerada una de las más altas de Colombia, con 300 metros de caída. Este lugar es un paraíso para los amantes del ecoturismo, donde pueden disfrutar de actividades como senderismo en sus diversos senderos, avistamiento de aves y exploración de la flora y fauna autóctona.
Para visitar La Chorrera, se recomienda llevar ropa cómoda y adecuada para caminatas, así como calzado resistente, ya que el camino puede ser exigente y resbaladizo en algunas partes. Es fundamental también llevar suficiente agua y alimento, ya que no hay servicios de alimentación en la reserva. La entrada a La Chorrera es generalmente asequible, con un costo aproximado de $10.000 por persona, y los horarios de atención suelen ser de 8:00 a.m. a 5:00 p.m. Se aconseja planificar la visita en la temporada seca, entre diciembre y marzo, para disfrutar de un mejor clima y condiciones más agradables para el senderismo.
Los visitantes también deben tener en cuenta que la reserva promueve el turismo sostenible, por lo que es importante respetar el entorno natural, no dejar basura y seguir las indicaciones de conservación. Con sus impresionantes paisajes y la oportunidad de conectarse con la naturaleza, La Chorrera ofrece una experiencia inolvidable para quienes buscan escapar del bullicio de la ciudad y disfrutar de la tranquilidad del campo colombiano.
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