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El Ministerio de Comercio, Industria y Turismo apoya a la industria turística a través del Plan Sectorial de Turismo, por lo tanto, en importantes encuentros como el Congreso Nacional de la Hotelería, celebrado en los últimos días en Cartagena, el viceministro de Turismo, Arturo Bravo, ha compartido con representantes del sector público y privado, y organizaciones no gubernamentales de la industria de los viajes, algunos puntos importantes del plan.
“Quisiera compartir con ustedes la propuesta de este Gobierno de cómo vamos a incluir nuevos aspectos para el desarrollo sostenible del sector, dentro del Plan Sectorial de Turismo. Esta iniciativa que estamos construyendo la hemos denominado: Turismo en armonía con la vida”, dijo en su presentación el viceministro, quien también aseguró que “la propuesta del presidente Gustavo Petro está desarrollada en torno a cinco ejes estratégicos, bajo unos insumos que se han venido elaborado con distintos actores del sector”.
Estas fueron algunas de los puntos clave que el viceministro Bravo compartió con los asistentes al Congreso Nacional de la Hotelería para el Plan Sectorial de Turismo que se está construyendo:
“El primer eje es la democratización del turismo, que tiene que ver con hacer un sector mucho más inclusivo y accesible donde se busque la garantía del derecho al turismo. Eso tiene que ver con la superación de barreras tradicionales que tiene el sector tanto en oferta, con el objetivo de llegar a nuevos territorios; como en demanda, facilitando el acceso al turismo social, generando incentivos para que los colombianos viajemos más por el país, entre otros.
La construcción del turismo para una cultura de la paz está enfocada hacia los territorios turísticos y las regiones que fueron afectadas por el conflicto armado y que deben ser vinculadas a una nueva forma de relacionamiento, de reconciliación y no violencia, allí, el turismo contribuirá de una forma efectiva. Por eso, entre muchas otras iniciativas, estamos trabajando en la creación del Sello de Turismo y Paz, que busca que sobresalgan esos productos y servicios que tienen un trabajo específico orientado hacia el reconocimiento de los procesos de reconciliación.
El eje dos tiene que ver con la sostenibilidad, es una apuesta por hacer un turismo mucho más consiente de la conservación y de la protección de la biodiversidad, y como lograr de una manera efectiva constituirse en una alternativa para la transición económica frente a lo que son, por ejemplo, economías extractivas e ilícitas en ciertas regiones del país.
Las buenas prácticas de sostenibilidad deben estar alineadas en tres aspectos: economía circular, medidas de adaptación y mitigación del cambio climático.
Una de las tareas es generar una misión que hemos llamado Misión Turismo 2030, en la cuál buscamos contribuir de una manera mucho más eficiente a los Objetivos de Desarrollo Sostenible y fortalecer los contenidos de turismo responsable con los nuevos mensajes que tiene la administración y hacia nuevas miradas que tradicionalmente no se veían.
El tercer eje tiene que ver con la consolidación de destinos turísticos y de territorios orientados hacía la equidad y al bienestar. La idea es potenciar todos los procesos de desarrollo turístico en los territorios con un eje particular en la gobernanza e institucionalidad, apoyando la formalización, la mejora de las condiciones de la informalidad y buscando condiciones óptimas para la atracción de infraestructura, seguridad e inversión para la consolidación de los destinos.
(Lea también: ¿Cómo repensar el turismo para las personas y el planeta?)
En este sentido se está trabajando en la creación del Sistema Nacional de Turismo, la mejora de la conectividad digital, la adaptación de los instrumentos de política pública, entre muchas otras iniciativas que permitan facilitar la articulación. Asimismo, hay que fortalecer la conectividad aérea, terrestre, férrea y fluvial, para hacer un transporte mucho más eficiente y efectivo, para llegar a las cifras que queremos.
El cuarto eje tiene que ver con el desarrollo empresarial, buscando que el turismo sea dinamizador de una economía para la vida, donde se trabajará por mejorar las condiciones de competitividad, innovación e información de los procesos de desarrollo del sector, buscando elevar el desempeño de las empresas y la mejora de los factores de atracción de las actividades, servicios y productos turísticos. Adicionalmente, impulsar el reconocimiento del país a nivel mundial con mejores herramientas de promoción, mercadeo y comercialización.
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El quinto eje tiene que ver con la resiliencia: cómo consolidamos de una manera más fuerte la recuperación del sector pero haciendo un turismo más justo y adaptable a los cambios y retos globales, propendiendo al mismo tiempo a una justicia social donde aspectos como la innovación, la facilitación, la articulación sectorial, entre otros, serán parte de esos diálogos para contribuir con el desarrollo sostenible.
Allí apoyaremos programas de turismo y organizaciones comunitarias, también al emprendimiento con estímulos e incentivos para nuevas ideas de negocios. Asimismo se trabajará en fortalecer las capacidades y desarrollo humano, la internacionalización, entre otros”.
Entre tanto, esto dijo el vicepresidente Arturo Bravo, luego de su presentación en el Congreso Nacional de la Hotelería. Entrevista.
¿Cuál es la importancia de participar en el Congreso Nacional de la Hotelería?
Estuvimos acompañando la versión 28 del Congreso Nacional de la Hotelería de Cotelco y ExpoCotelco donde estuvieron más de 140 expositores de todo el país de la cadena productiva, con el objetivo de presentar las cinco líneas del Plan Sectorial de Turismo 2022 – 2026, particularmente orientadas hacia la construcción de la cultura del turismo para la paz y por supuesto nuestras propuestas de una transición de una economía para el turismo, también vinculando todos los aspectos de las comunidades, el desarrollo productivo, la economía popular, entre otros.
Asimismo, estuvimos acompañando a las distintas regiones, escuchando, porque este evento es representativo para la mirada nacional del turismo. Por eso la importancia de participar activamente en el evento.
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Principalmente, ¿qué pedían las regiones?
Hay muchas necesidades en materia turística. La mayoría de las regiones han manifestado su pertinencia y su concordancia con las propuestas del Gobierno Nacional, pero particularmente nos han comentado deficiencias en temas de gobernanza, necesidades en materia de infraestructura, propuestas de proyectos de promoción. Por lo tanto, también estuvimos con nuestros aliados Fontur y ProColombia, escuchando y atendiendo a las regiones en sus distintas necesidades.
¿Qué más falta para la construcción del Plan Sectorial de Turismo?
Estamos haciendo un trabajo interno en la nutrición de los cinco ejes que hemos propuesto para el desarrollo del turismo. En la construcción colectiva estamos participando en los distintos diálogos regionales también para que los temas aparezcan desde allí y seguimos trabajando con distintos actores, socializando la propuesta para poder tenerlo el 15 de noviembre, que es el plazo para poderlo incluir en el Plan Nacional de Desarrollo, así que estamos trabajando a contrarreloj para poder construir de una mejor manera esta propuesta ajustada a las necesidades de los empresarios, de las comunidades y de las regiones del país.
¿Cómo ve la meta de la llegada de 12 millones de turistas a Colombia?
Estamos en una negociación de cuántas son las posibilidades efectivas que el país debe tener en materia de turismo para el cuatrienio. Sabemos que la de 12 millones es una meta ambiciosa que requeriría inversiones fuertes en infraestructura, en promoción, en conectividad, así que estamos revisando a cuánto vamos efectivamente a llegar, sin embargo los horizontes, si no hiciéramos ningún tipo de acción, estaría en siete millones de turistas, entonces las propuestas y las señas de la reactivación en el sector nos marca que sí es posible llegar a una meta mucho más ambiciosa.
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Usted les envió un mensaje a los hoteleros de que apoyarán la paz...
Sí, definitivamente una Colombia en paz sería un destino turístico de clase mundial, entonces la invitación que le estamos haciendo a los hoteleros es a que extiendan sus buenas prácticas de responsabilidad social para que vinculen a la cadena productiva extensa del turismo, a las economías populares, para que juntos podamos trabajar también en un modelo de turismo más inclusivo y particularmente en la construcción de nuevos territorios turísticos de paz… aquellos territorios que tienen vocación turística pero que por temas de conflicto armado no han podido estar vinculados a esta dinámica del turismo, entonces es importante que podamos seguir construyendo entre todos nuevas posibilidades.
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