¿Parapente en el cañón del Chicamocha?: lo que necesita saber
El Cañón del Chicamocha ofrece una aventura a través de diferentes tipos de vuelos en parapente adaptados a los deseos y nivel de experiencia de cada persona.
El turismo ha experimentado una evolución significativa en las preferencias y comportamientos de los viajeros a lo largo del tiempo. Anteriormente, los turistas solían centrarse en la exploración del patrimonio cultural e histórico de los destinos, lo que los llevaba a ser principalmente observadores y conocedores de otras culturas. Sin embargo, en los últimos años, ha surgido una nueva tendencia que implica un cambio en este punto de vista.
Actualmente, un número creciente de viajeros está buscando vivencias más activas y participativas que les permitan desarrollar sus habilidades y experimentar emociones intensas. Este cambio de preferencia ha generado un notable aumento en el turismo alternativo, donde los visitantes se involucran en actividades como el turismo de aventura y los deportes extremos llevados a cabo en destinos con geografías y paisajes específicos, y vinculado con actividades físicas, intercambio cultural, interacción directa con el entorno natural y experiencias enriquecedoras. Tanto es así que, según las estimaciones de The Brainy Insights, una empresa de investigación de mercados que realiza analisis de datos exhaustivos, la industria del turismo de aventura, alcanzó los 295.37 mil millones de dólares en 2022 y se proyecta que alcance los 1,489.23 mil millones de dólares para el año 2032.
Le podría interesar: ¿Cuáles son los destinos no tradicionales que debería visitar en Colombia en 2024?
En Colombia, según ANATO y ProColombia, solo el año pasado la naturaleza y la aventura representaron el nicho más destacado para los turistas, con un 79% de las Agencias de Viajes ofreciendo este tipo de experiencias. Y uno de los destinos más populares para este tipo de turismo es Santander, que ofrece varios deportes populares como el rafting en sus ríos con niveles de dificultad IV (la clasificación más alta para ríos con turbulencias), espeleísmo (visitar cavidades subterráneas), torrentismo, cuatrimotos, salto en bungee y, por supuesto, parapente en el extraordinario Cañón de Chicamocha. Este cañón se encuentra en Aratoca, a solo 54 kilómetros de Bucaramanga. Se destaca por su impresionante belleza natural y sus dimensiones imponentes, ya que es reconocido como el segundo cañón más grande del mundo, abarcando más de 108,000 hectáreas y con una profundidad de aproximadamente 2,000 metros.
“El Cañón del Chicamocha cuenta con tres características importantes para la práctica del parapente. Primero, tenemos un desnivel de 1200 metros. Segundo, tenemos condiciones climáticas excelentes. Podríamos decir que esto es único en la región, ya que volamos aproximadamente 360 días de los 365 del año. Tercero, el paisaje. Tenemos uno lleno de contrastes y colores en el Cañón del Chicamocha, con montañas grises y verdes que ofrecen una vista única. Además, contamos con condiciones térmicas ideales para el parapente. Podemos volar en dos tipos de condiciones: térmicas y dinámicas” dice Sergio Gutiérrez, piloto de parapente y gerente, administrador, vendedor y conductor de Parapente Chicamocha. Una compañía fundada en 2009, quienes, aunque son un operador independiente, trabajan dentro del Parque Nacional del Chicamocha, el cual es administrado por la Corporación Parque Nacional del Chicamocha.
En este deporte, los pilotos se deslizan en el aire utilizando un planeador ligero llamado parapente, compuesto por una vela flexible y resistente hecha generalmente de tela de nylon o poliéster. Esta vela se sostiene por cuerdas y se infla con el viento para generar sustentación. Los pilotos buscan pendientes naturales o corrientes ascendentes de aire caliente para elevarse y realizar vuelos planificados, pudiendo despegar desde laderas de montañas, acantilados o zonas habilitadas. Aunque ofrece una experiencia única, el equipo puede resultar costoso.
Gutiérrez explica que si bien este tipo de turismo ha ganado muchos adeptos, los desafíos siguen siendo importantes: “Hasta el año pasado, los precios del parapente apenas habían aumentado desde que comenzamos en 2009. Un vuelo en el cañón del Chicamocha costaba 170.000 pesos, y un equipo completo de parapente alrededor de 8 millones de pesos. Sin embargo, el año pasado logramos realizar algunos aumentos en los precios. Actualmente, un vuelo cuesta 250.000 pesos, y un equipo completo de parapente 34 millones de pesos. se nota la dispariedad de precios para mantenernos y para lo que podemos recuperar para seguir comprando implementos, pues son costosos y se dañan fácil”.
A pesar de eso, las empresas locales le siguen apostando al turismo impulsando, además, proyectos comunitarios de sostenibilidad. En el caso de Parapente Chicamocha, se ha trabajado en la implementación de baños ecológicos en respuesta a la escasez de agua en el Cañón, y en el uso de material reciclado de canchas sintéticas de fútbol para la pista de vuelo, reduciendo así el consumo innecesario de recursos naturales en la gravilla.
¿Cómo hacer parapente?
Hay varias cosas que se deben tener en cuenta antes de realizar está actividad, aunque es muy fácil y no requiere experiencia.
Antes del vuelo:
- Elegir una empresa calificada: Empresas con buena reputación, pilotos con licencia y oficina física. Esto se puede verificar la información en Google, redes sociales, TripAdvisor y FEDEAEREOS.
- Prepararse físicamente: Es fundamental dormir bien en la noche anterior, comer ligero antes del vuelo y llevar ropa adecuada (zapatos cerrados, ropa cómoda, protector solar y repelente de mosquitos) no llegar en estado de alicoramiento ni haberlo hecho el día anterior.
- Llegar temprano: Hay que hacer un registro antes de la entrada, para luego esperar el turno correspondiente. Debido a que esto depende de las condiciones climáticas además del peso de la persona, por lo que la organización asignará turnos de acuerdo a eso.
“Dentro de nuestra organización, tenemos un límite mínimo de 7 años y un requisito de peso mínimo de 30 o 35 kilos, preferiblemente 35 kilos. Cualquier menor de edad debe ir acompañado por su padre o madre, quien debe firmar una autorización. En el caso de personas con ese peso (35 kilos), tanto adultos como niños, lo mejor es acordar una cita para llegar un poco más temprano y así ser los primeros en volar. Pues por lo general, comenzamos con los más livianos al principio del día, ya que el viento es más tranquilo y las condiciones son más suaves. A medida que avanza el día, las condiciones se vuelven más fuertes, lo que es más adecuado para personas más pesadas. Por eso seguimos este procedimiento diariamente”, explica Gutiérrez.
Durante el vuelo:
- Siga las indicaciones del piloto: No se siente, salte o pare durante el despegue. Manténgase en comunicación con el piloto y, si se siente mal, avísele para aterrizar.
- Disfrute del paisaje: No se enfoque solo en fotos y videos, tome pausas para disfrutar del paisaje, mirar lejos y respirar profundamente.
- Para el aterrizaje: Siga las indicaciones del piloto, no se póngase de pie, no camine o no corra si no se lo indica.
Consejos para fotos y videos:
- No tome fotos y videos todo el tiempo: Es mejor hacer pausas para evitar mareos.
- Pida ayuda al piloto: El piloto puede ayudarle a tomar fotos y videos en diferentes ángulos y posiciones.
- Utilice un selfie stick: Es recomendable usar un selfie stick corto para despegar y aterrizar.
Después del vuelo:
Si experimentó mareos: Tome líquido poco a poco, quédese en reposo y coma algo suave. No se preocupe, es algo natural que le puede pasar a cualquiera.
Información adicional
1. Vuelos
Hay una variedad de vuelos en parapente para todos los gustos y niveles de experiencia. Los vuelos tándem son una excelente manera de experimentar la emoción del parapente por primera vez, mientras que los cursos de parapente enseñarán todo lo necesario para volar por cuenta propia.
Tipos de vuelos:
- Vuelo de descubrimiento: Este vuelo de 20 minutos es perfecto para quienes desean disfrutar del paisaje y la tranquilidad del parapente. Se aterriza en el mismo lugar de despegue.
- Vuelo de aventura: Con una duración de 30 minutos, este vuelo lleva a la persona más lejos por el cañón del Chicamocha, solo que se aterriza en un lugar diferente al de despegue, lo que permite explorar el cañón y disfrutar de las vistas con una bajada para conocer el río.
- Vuelo de adrenalina: Diseñado para quienes buscan emociones fuertes, este vuelo de 25 minutos incluye una maniobra acrobática al final para experimentar la verdadera emoción del parapente.
- Vuelo de sensación: Durante 25 minutos, este vuelo permite tomar el control del parapente por unos minutos para sentir la emoción de volar y aprender cómo funciona la aeronave.
- Vuelo de prestigio: Esta opción completa de 30 minutos incluye tiempo de vuelo, distancia, maniobras acrobáticas y la oportunidad de tomar el control del parapente.
Los precios de los vuelos en parapente oscilan entre 250.000 y 400.000 pesos colombianos.
2. Cursos de parapente:
También se ofrecen cursos de parapente para aquellos que deseen aprender a volar por su cuenta y duran de 10 a 12 días, enseñando desde el control del parapente en tierra hasta los vuelos de altura. Con este curso se puede solicitar el certificado de idoneidad como piloto Novato ante FEDEAEREOS de manera individual, o con ayuda de la compañía con un costo adicional.
Su costo oscila alrededor de US $1.200 ($4,702,368 COP)
3. Homologación y talla:
Los parapentes deben pasar por un proceso de homologación para determinar su nivel o categoría, que va desde A para principiantes hasta CCC para competición. Además, existen otras homologaciones para parapentes especializados, como los de freestyle, acro, tándem y paramotor. Es importante destacar que volar un parapente más avanzado no garantiza ser un mejor piloto. La elección del tamaño del ala debe basarse en el peso corporal del piloto y en el rango de peso indicado por el fabricante.
Le podría interesar: Los mejores países para viajar como mochilero en 2024
El turismo ha experimentado una evolución significativa en las preferencias y comportamientos de los viajeros a lo largo del tiempo. Anteriormente, los turistas solían centrarse en la exploración del patrimonio cultural e histórico de los destinos, lo que los llevaba a ser principalmente observadores y conocedores de otras culturas. Sin embargo, en los últimos años, ha surgido una nueva tendencia que implica un cambio en este punto de vista.
Actualmente, un número creciente de viajeros está buscando vivencias más activas y participativas que les permitan desarrollar sus habilidades y experimentar emociones intensas. Este cambio de preferencia ha generado un notable aumento en el turismo alternativo, donde los visitantes se involucran en actividades como el turismo de aventura y los deportes extremos llevados a cabo en destinos con geografías y paisajes específicos, y vinculado con actividades físicas, intercambio cultural, interacción directa con el entorno natural y experiencias enriquecedoras. Tanto es así que, según las estimaciones de The Brainy Insights, una empresa de investigación de mercados que realiza analisis de datos exhaustivos, la industria del turismo de aventura, alcanzó los 295.37 mil millones de dólares en 2022 y se proyecta que alcance los 1,489.23 mil millones de dólares para el año 2032.
Le podría interesar: ¿Cuáles son los destinos no tradicionales que debería visitar en Colombia en 2024?
En Colombia, según ANATO y ProColombia, solo el año pasado la naturaleza y la aventura representaron el nicho más destacado para los turistas, con un 79% de las Agencias de Viajes ofreciendo este tipo de experiencias. Y uno de los destinos más populares para este tipo de turismo es Santander, que ofrece varios deportes populares como el rafting en sus ríos con niveles de dificultad IV (la clasificación más alta para ríos con turbulencias), espeleísmo (visitar cavidades subterráneas), torrentismo, cuatrimotos, salto en bungee y, por supuesto, parapente en el extraordinario Cañón de Chicamocha. Este cañón se encuentra en Aratoca, a solo 54 kilómetros de Bucaramanga. Se destaca por su impresionante belleza natural y sus dimensiones imponentes, ya que es reconocido como el segundo cañón más grande del mundo, abarcando más de 108,000 hectáreas y con una profundidad de aproximadamente 2,000 metros.
“El Cañón del Chicamocha cuenta con tres características importantes para la práctica del parapente. Primero, tenemos un desnivel de 1200 metros. Segundo, tenemos condiciones climáticas excelentes. Podríamos decir que esto es único en la región, ya que volamos aproximadamente 360 días de los 365 del año. Tercero, el paisaje. Tenemos uno lleno de contrastes y colores en el Cañón del Chicamocha, con montañas grises y verdes que ofrecen una vista única. Además, contamos con condiciones térmicas ideales para el parapente. Podemos volar en dos tipos de condiciones: térmicas y dinámicas” dice Sergio Gutiérrez, piloto de parapente y gerente, administrador, vendedor y conductor de Parapente Chicamocha. Una compañía fundada en 2009, quienes, aunque son un operador independiente, trabajan dentro del Parque Nacional del Chicamocha, el cual es administrado por la Corporación Parque Nacional del Chicamocha.
En este deporte, los pilotos se deslizan en el aire utilizando un planeador ligero llamado parapente, compuesto por una vela flexible y resistente hecha generalmente de tela de nylon o poliéster. Esta vela se sostiene por cuerdas y se infla con el viento para generar sustentación. Los pilotos buscan pendientes naturales o corrientes ascendentes de aire caliente para elevarse y realizar vuelos planificados, pudiendo despegar desde laderas de montañas, acantilados o zonas habilitadas. Aunque ofrece una experiencia única, el equipo puede resultar costoso.
Gutiérrez explica que si bien este tipo de turismo ha ganado muchos adeptos, los desafíos siguen siendo importantes: “Hasta el año pasado, los precios del parapente apenas habían aumentado desde que comenzamos en 2009. Un vuelo en el cañón del Chicamocha costaba 170.000 pesos, y un equipo completo de parapente alrededor de 8 millones de pesos. Sin embargo, el año pasado logramos realizar algunos aumentos en los precios. Actualmente, un vuelo cuesta 250.000 pesos, y un equipo completo de parapente 34 millones de pesos. se nota la dispariedad de precios para mantenernos y para lo que podemos recuperar para seguir comprando implementos, pues son costosos y se dañan fácil”.
A pesar de eso, las empresas locales le siguen apostando al turismo impulsando, además, proyectos comunitarios de sostenibilidad. En el caso de Parapente Chicamocha, se ha trabajado en la implementación de baños ecológicos en respuesta a la escasez de agua en el Cañón, y en el uso de material reciclado de canchas sintéticas de fútbol para la pista de vuelo, reduciendo así el consumo innecesario de recursos naturales en la gravilla.
¿Cómo hacer parapente?
Hay varias cosas que se deben tener en cuenta antes de realizar está actividad, aunque es muy fácil y no requiere experiencia.
Antes del vuelo:
- Elegir una empresa calificada: Empresas con buena reputación, pilotos con licencia y oficina física. Esto se puede verificar la información en Google, redes sociales, TripAdvisor y FEDEAEREOS.
- Prepararse físicamente: Es fundamental dormir bien en la noche anterior, comer ligero antes del vuelo y llevar ropa adecuada (zapatos cerrados, ropa cómoda, protector solar y repelente de mosquitos) no llegar en estado de alicoramiento ni haberlo hecho el día anterior.
- Llegar temprano: Hay que hacer un registro antes de la entrada, para luego esperar el turno correspondiente. Debido a que esto depende de las condiciones climáticas además del peso de la persona, por lo que la organización asignará turnos de acuerdo a eso.
“Dentro de nuestra organización, tenemos un límite mínimo de 7 años y un requisito de peso mínimo de 30 o 35 kilos, preferiblemente 35 kilos. Cualquier menor de edad debe ir acompañado por su padre o madre, quien debe firmar una autorización. En el caso de personas con ese peso (35 kilos), tanto adultos como niños, lo mejor es acordar una cita para llegar un poco más temprano y así ser los primeros en volar. Pues por lo general, comenzamos con los más livianos al principio del día, ya que el viento es más tranquilo y las condiciones son más suaves. A medida que avanza el día, las condiciones se vuelven más fuertes, lo que es más adecuado para personas más pesadas. Por eso seguimos este procedimiento diariamente”, explica Gutiérrez.
Durante el vuelo:
- Siga las indicaciones del piloto: No se siente, salte o pare durante el despegue. Manténgase en comunicación con el piloto y, si se siente mal, avísele para aterrizar.
- Disfrute del paisaje: No se enfoque solo en fotos y videos, tome pausas para disfrutar del paisaje, mirar lejos y respirar profundamente.
- Para el aterrizaje: Siga las indicaciones del piloto, no se póngase de pie, no camine o no corra si no se lo indica.
Consejos para fotos y videos:
- No tome fotos y videos todo el tiempo: Es mejor hacer pausas para evitar mareos.
- Pida ayuda al piloto: El piloto puede ayudarle a tomar fotos y videos en diferentes ángulos y posiciones.
- Utilice un selfie stick: Es recomendable usar un selfie stick corto para despegar y aterrizar.
Después del vuelo:
Si experimentó mareos: Tome líquido poco a poco, quédese en reposo y coma algo suave. No se preocupe, es algo natural que le puede pasar a cualquiera.
Información adicional
1. Vuelos
Hay una variedad de vuelos en parapente para todos los gustos y niveles de experiencia. Los vuelos tándem son una excelente manera de experimentar la emoción del parapente por primera vez, mientras que los cursos de parapente enseñarán todo lo necesario para volar por cuenta propia.
Tipos de vuelos:
- Vuelo de descubrimiento: Este vuelo de 20 minutos es perfecto para quienes desean disfrutar del paisaje y la tranquilidad del parapente. Se aterriza en el mismo lugar de despegue.
- Vuelo de aventura: Con una duración de 30 minutos, este vuelo lleva a la persona más lejos por el cañón del Chicamocha, solo que se aterriza en un lugar diferente al de despegue, lo que permite explorar el cañón y disfrutar de las vistas con una bajada para conocer el río.
- Vuelo de adrenalina: Diseñado para quienes buscan emociones fuertes, este vuelo de 25 minutos incluye una maniobra acrobática al final para experimentar la verdadera emoción del parapente.
- Vuelo de sensación: Durante 25 minutos, este vuelo permite tomar el control del parapente por unos minutos para sentir la emoción de volar y aprender cómo funciona la aeronave.
- Vuelo de prestigio: Esta opción completa de 30 minutos incluye tiempo de vuelo, distancia, maniobras acrobáticas y la oportunidad de tomar el control del parapente.
Los precios de los vuelos en parapente oscilan entre 250.000 y 400.000 pesos colombianos.
2. Cursos de parapente:
También se ofrecen cursos de parapente para aquellos que deseen aprender a volar por su cuenta y duran de 10 a 12 días, enseñando desde el control del parapente en tierra hasta los vuelos de altura. Con este curso se puede solicitar el certificado de idoneidad como piloto Novato ante FEDEAEREOS de manera individual, o con ayuda de la compañía con un costo adicional.
Su costo oscila alrededor de US $1.200 ($4,702,368 COP)
3. Homologación y talla:
Los parapentes deben pasar por un proceso de homologación para determinar su nivel o categoría, que va desde A para principiantes hasta CCC para competición. Además, existen otras homologaciones para parapentes especializados, como los de freestyle, acro, tándem y paramotor. Es importante destacar que volar un parapente más avanzado no garantiza ser un mejor piloto. La elección del tamaño del ala debe basarse en el peso corporal del piloto y en el rango de peso indicado por el fabricante.
Le podría interesar: Los mejores países para viajar como mochilero en 2024