Turismo en tiempo de reinas
Cartagena está por estos días, encantada por la belleza femenina.
Redacción Buen Viaje
Visitar Cartagena en época de reinas es tan encantador como la belleza misma de las candidatas. Por eso La Heroica, en estos días de desfiles, caminatas y visitas sociales tiene una enorme lista de lugares abiertos para los turistas que más allá de seguir a las mujeres más lindas de Colombia, están buscando conocer la ciudad amurallada de cerca y en detalle.
San Basilio de Palenque
La amabilidad es la característica principal de los habitantes de la población natal de Kid Pambelé. Habitada por afro descendientes orgullosos de su raza, Palenque, más allá de los problemas sociales que la atraviesan, es un pueblo diverso, lleno de manifestaciones culturales tan bellas como las niñas que trenzan su cabello a diario en los antejardines de sus casas.
Si su objetivo es desentrañar la magia del Caribe colombiano, descubrir la esencia de esa raza dicharachera y acogedora debe visitar Palenque. En el parque central se encontrará con grupos de danza que bailan al ritmo de los mejores intérpretes del tambor. El mapalé se vuelve protagonista entre los niños que desde los seis años están moviendo su cadera de manera cadenciosa.
Por supuesto, la gastronomía lo hará amañarse en este lugar. Cocadas de todos los tipos, pescados en todas sus presentaciones y el original arroz con coco son algunos de los platos típicos que lo deleitarán.
Cartagena colonial, romántica y asequible
Callecitas empedradas enmarcadas por faroles a media luz, carrozas, tríos musicales, grupos vallenatos y una amplia oferta gastronómica resulta tentador y muy romántico para cualquier pareja que decida visitar el centro de la ciudad amurallada.
Los restaurantes del la ciudad colonial están a la orden del día. Para todos los gustos y especialmente, para todos los bolsillos. Si su presupuesto es reducido, acérquese a la Plaza de Santo Domingo y busque un restaurante de pasta que resulta económico y apetitoso.
Y para cerrar, puede terminar la noche escuchando buena salsa en Donde Fidel, un bar muy tradicional ubicado en la Plaza del reloj. Sitio acogedor que lo hará llevarse un buen recuerdo de la capital de Bolívar.
Islas del Rosario
Si su objetivo es disfrutar el mar del Caribe, la mejor elección es embarcarse hacia las Islas del Rosario. Barú es una buena opción. Playas cristalinas, arena blanca, comida típica y la tranquilidad para tomar el sol que sólo puede ofrecer este tipo de islas. Un buen lugar para el descanso y el contacto con el agua.
Allí, por medio de unas buenas horas de buceo, se puede conocer el fondo del Parque Nacional Natural Islas del Rosario, considerado el más grande del país bajo el mar, donde es necesario avistar el lecho marino con su flora y fauna para darse cuenta que es un lugar encantador.
Deportes extremos y ecoturismo
Los cartageneros dicen que hay cinco formas de disfrutar el mar que recubre los alrededores de la ciudad: kitesurfing, windsurfing, surf, kayak y sunfish. Todos ellos deportes extremos que hacen que la adrenalina suba al instante y se viva una experiencia única. El lugar ideal para hacerlo es la zona norte, en las Playas de Blas El Teso – Bocagrande.
Y si se trata de ecoturismo, el lugar ideal es el Ecoparque Luna Forest, que está 100 metros antes de llegar al peaje de Marahuacos, unos 15 kilómetros más adelante de La Boquilla. Allí el turista entra en uno de los mejores escenarios naturales que tiene algo más de 43 hectáreas para que niños y adultos puedan disfrutar de un ambiente cargado de flora y fauna.
No es raro toparse con animales silvestres merodeando por las instalaciones, pues en este sitio las distintas especies no están encerradas en jaulas o corrales, sino que permanecen deambulando libres en un ambiente similar a su hábitat natural.
Las especies que están en el lugar hacen parte del ecosistema de la región y existen pájaros de todos los colores, tamaños y especies que muy cerca de los caminantes , pasan volando de nido en nido, donde se reproducen para alimentar este ecosistema. Las iguanas, los tigrillos, chigüiros, boas, osos perezosos también hacen parte del lugar y sólo se pueden observar si ellos lo permiten, pues no tienen una hora ni sitio fijo para aparecerse.
De esta forma, quien visite Cartagena en tiempo de reinas podrá, además de observar de cerca la belleza de la mujer colombiana, disfrutar de la ciudad que ha sido cede de la cumbre más importante de la Organización Mundial del Turismo; que guarda los grandes secretos coloniales de la historia nacional y que además, está abierta con centenares de restuarantes y otros lugares de encuentro social, a todos aquellos que buscan en La Heroica, el mejor destino para disfrutar.
Visitar Cartagena en época de reinas es tan encantador como la belleza misma de las candidatas. Por eso La Heroica, en estos días de desfiles, caminatas y visitas sociales tiene una enorme lista de lugares abiertos para los turistas que más allá de seguir a las mujeres más lindas de Colombia, están buscando conocer la ciudad amurallada de cerca y en detalle.
San Basilio de Palenque
La amabilidad es la característica principal de los habitantes de la población natal de Kid Pambelé. Habitada por afro descendientes orgullosos de su raza, Palenque, más allá de los problemas sociales que la atraviesan, es un pueblo diverso, lleno de manifestaciones culturales tan bellas como las niñas que trenzan su cabello a diario en los antejardines de sus casas.
Si su objetivo es desentrañar la magia del Caribe colombiano, descubrir la esencia de esa raza dicharachera y acogedora debe visitar Palenque. En el parque central se encontrará con grupos de danza que bailan al ritmo de los mejores intérpretes del tambor. El mapalé se vuelve protagonista entre los niños que desde los seis años están moviendo su cadera de manera cadenciosa.
Por supuesto, la gastronomía lo hará amañarse en este lugar. Cocadas de todos los tipos, pescados en todas sus presentaciones y el original arroz con coco son algunos de los platos típicos que lo deleitarán.
Cartagena colonial, romántica y asequible
Callecitas empedradas enmarcadas por faroles a media luz, carrozas, tríos musicales, grupos vallenatos y una amplia oferta gastronómica resulta tentador y muy romántico para cualquier pareja que decida visitar el centro de la ciudad amurallada.
Los restaurantes del la ciudad colonial están a la orden del día. Para todos los gustos y especialmente, para todos los bolsillos. Si su presupuesto es reducido, acérquese a la Plaza de Santo Domingo y busque un restaurante de pasta que resulta económico y apetitoso.
Y para cerrar, puede terminar la noche escuchando buena salsa en Donde Fidel, un bar muy tradicional ubicado en la Plaza del reloj. Sitio acogedor que lo hará llevarse un buen recuerdo de la capital de Bolívar.
Islas del Rosario
Si su objetivo es disfrutar el mar del Caribe, la mejor elección es embarcarse hacia las Islas del Rosario. Barú es una buena opción. Playas cristalinas, arena blanca, comida típica y la tranquilidad para tomar el sol que sólo puede ofrecer este tipo de islas. Un buen lugar para el descanso y el contacto con el agua.
Allí, por medio de unas buenas horas de buceo, se puede conocer el fondo del Parque Nacional Natural Islas del Rosario, considerado el más grande del país bajo el mar, donde es necesario avistar el lecho marino con su flora y fauna para darse cuenta que es un lugar encantador.
Deportes extremos y ecoturismo
Los cartageneros dicen que hay cinco formas de disfrutar el mar que recubre los alrededores de la ciudad: kitesurfing, windsurfing, surf, kayak y sunfish. Todos ellos deportes extremos que hacen que la adrenalina suba al instante y se viva una experiencia única. El lugar ideal para hacerlo es la zona norte, en las Playas de Blas El Teso – Bocagrande.
Y si se trata de ecoturismo, el lugar ideal es el Ecoparque Luna Forest, que está 100 metros antes de llegar al peaje de Marahuacos, unos 15 kilómetros más adelante de La Boquilla. Allí el turista entra en uno de los mejores escenarios naturales que tiene algo más de 43 hectáreas para que niños y adultos puedan disfrutar de un ambiente cargado de flora y fauna.
No es raro toparse con animales silvestres merodeando por las instalaciones, pues en este sitio las distintas especies no están encerradas en jaulas o corrales, sino que permanecen deambulando libres en un ambiente similar a su hábitat natural.
Las especies que están en el lugar hacen parte del ecosistema de la región y existen pájaros de todos los colores, tamaños y especies que muy cerca de los caminantes , pasan volando de nido en nido, donde se reproducen para alimentar este ecosistema. Las iguanas, los tigrillos, chigüiros, boas, osos perezosos también hacen parte del lugar y sólo se pueden observar si ellos lo permiten, pues no tienen una hora ni sitio fijo para aparecerse.
De esta forma, quien visite Cartagena en tiempo de reinas podrá, además de observar de cerca la belleza de la mujer colombiana, disfrutar de la ciudad que ha sido cede de la cumbre más importante de la Organización Mundial del Turismo; que guarda los grandes secretos coloniales de la historia nacional y que además, está abierta con centenares de restuarantes y otros lugares de encuentro social, a todos aquellos que buscan en La Heroica, el mejor destino para disfrutar.