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Lucena Ibarra, víctima de la masacre de Rivera (Huila), le preguntó a Ronald Rojas, conocido en la guerra como Ramiro Durán, excomandante de la guerrilla de las Farc, cuáles eran los intereses detrás de este hecho violento en el que fueron asesinados nueve concejales de este municipio. Rojas, quien no comandaba la zona, pero es el encargado del partido FARC para esta región, no tiene una respuesta precisa para esta duda. Sin embargo, dijo que gran parte de la verdad volvió a la clandestinidad.
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"Las víctimas tienen el derecho a sentir lo que están sintiendo, por eso no voy a venir mecánicamente a pedir perdón. Yo comparto de una u otra manera esa falta de credibilidad que la señora Lucena siente. Voy a ser muy sincero con ustedes: yo siento que en los compañeros que tienen verdad hay hermetismo frente a la masacre de Rivera. Tenemos una gran dificultad para el Huila hoy y es que gran parte, quizás el 100% de la verdad, se fue con quien fue el comandante de la Columna Móvil Teófilo Forero, el “Paisa Óscar” se llevó a la clandestinidad muchas verdades", dijo.
Se refería a Hernán Darío Velásquez Saldarriaga, conocido como el "Paisa" u "Óscar Montero". Él fue el comandante de esta estructura que cometió crímenes como la toma al Edificio Miraflores en Neiva, los secuestros de Gloria Polanco, Jorge Gechem Turbay y otras decenas de secuestros. También es la responsable de la masacre de los concejales de Rivera. Y fue ahí donde Lucena Ibarra perdió a su padre. Velásquez Saldarriaga retomó las armas y el pasado mes de agosto apareció junto a Iván Márquez en un video, precisamente haciendo el anuncio del retorno a la guerra.
Rojas, en el encuentro Hablemos de Verdad realizado en Neiva, organizado por Colombia2020 y apoyado por la Embajada de Alemania en Colombia, dijo que quería "aportar a una verdad pura y limpia como exmiembro, incluso en los últimos años, del Estado Mayor”.
Entonces, le respondió a Lucena. "¿Qué intereses hubo? Sí, nosotros íbamos con prendas militares y armas, éramos una organización militar. ¿Quién suministró la información? Hay hipótesis de investigación que no puedo traer a colación. Incluso hubo intereses económicos", y continuó refiriéndose a los secuestros que tanto afectaron a la población Huilense.
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"Las unidades militares de las otroras Farc-EP se dirigían bajo estructuras de dirección colectiva. Eso significa que como en una empresa: no está el gerente, pero está el subgerente. No está el comandante, pero está el reemplazante. Hoy están otros comandantes que fueron del Estado Mayor de la Columna Móvil Teófilo Forero. Quien fuera el reemplazante de la Teófilo, Rodolfo Corcho, hoy tiene riesgo de seguridad. Ojalá no nos empujen nuevas circunstancias a que otras personas se tengan que apartar del proceso con sus verdades", dijo.
Además, recalcó que a veces la verdad no se encuentra en los comandantes. "Por nuestra idiosincrasia, nuestro modus operandi, yo deduzco que incluso hay guerrilleros de base que pueden ayudarnos a reconstruir, a aportar a esa verdad. Incluso habrá gente que no fueron combatientes, sino civiles, que se vieron afectados “de refilón”, que pueden saber, porque de pronto dieron información".
Finalmente, Rojas terminó diciendo que uno de los obstáculos para encontrar la verdad en el Huila es que no hay voluntad desde varios sectores. "Nosotros desarmamos las manos, pero yo siento que en el Huila hay gente, líderes políticos que no han desarmado la palabra, el espíritu"