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Ha quedado claro a estas alturas que ningún sector social ni económico es ajeno a la emergencia sanitaria que atraviesa Colombia (y el mundo) por cuenta de la expansión del nuevo coronavirus COVID-19. Si bien la mayoría de los casos confirmados de este virus en el país se han registrado en grandes ciudades (Bogotá, Medellín, Barranquilla), a nivel rural también se han empezado a tomar medidas de prevención. Dentro del mundo rural, una población en específico está acogiendo todas las estrategias necesarias para evitar la llegada del virus a sus territorios: los excombatientes de las Farc que avanzan en su tránsito a la legalidad en los 24 espacios de reincorporación y en los nuevos puntos de agrupamiento.
(Lea: El futuro de la reincorporación de los excombatientes de las Farc)
De forma conjunta, el Gobierno Nacional y las directivas del partido FARC han estado trabajando desde el fin de semana en la definición de estrategias para contener el avance del coronavirus. Andrés Stapper, director nacional de la Agencia para la Reincorporación y la Normailización (ARN), y Pastor Alape, delegado de FARC en el Consejo Nacional de Reincorporación (CNR), encabezaron distintos encuentros donde se definió limitar considerablemente las visitas a los espacios territoriales e impulsar al máximo posible un aislamiento preventivo de dichos espacios.
“Definimos limitar las visitas a los espacios territoriales de embajadas de otros países, de organismos de cooperación internacional, del mismo Gobierno Nacional. Todo lo estamos suspendiendo por estas dos semanas mientras vemos cómo avanzan las medidas de la Presidencia y los gobiernos locales. Estamos en la fase de contención donde la mejor barrera es el aislamiento preventivo”, explicó Andrés Stapper.
Ello de entrada reduce considerablemente la actividad en los espacios de reincorporación donde buena parte de la vida transcurre entre visitas de organismos y agencias de cooperación que le hacen seguimiento a los proyectos productivos colectivos que apoyan en dichos espacios. “Solo se van a realizar en los espacios las actividades que sean estrictamente necesarias”, enfatizó Stapper, en particular aquellas referidas a la prevención de la enfermedad y la articulación con alcaldías o gobernaciones. En ese sentido, los Consejos Territoriales de Reincorporación (CTR), que a nivel local orientan a los excombatientes, se reunirán esta semana para gestionar esas medidas de prevención.
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Adicionalmente, desde la ARN se está gestionando un presupuesto para enviar a dichos espacios insumos sanitarios como jabones, desinfectantes, antibacteriales y tapabocas. Asimismo, avanza en las gestiones propias con los proveedores de alimentación, combustible, entre otros contratos que existen para la población excombatiente para que esos suministros no se suspendan.
La emergencia sanitaria llega en un momento en que para los excombatientes que habitan estos espacios, cerca de 2.900 según la información más actualizada, es fundamental el contacto con las comunidades aledañas pues están en una fase de adaptación al ordenamiento territorial de los municipios donde están. Con ese fin, por ejemplo, este miércoles había una reunión entre Andrés Stapper, el gobernador de Arauca y los alcaldes de los municipios de ese departamento, que ya fue cancelada. Igualmente, estaba programada una visita del director de la ARN al espacio de reincorporación de Filipinas, en Arauquita.
En el espacio de reincorporación de Santa Lucía, en Ituango (Antioquia), se estaba avanzando en las gestiones para su traslado a otro territorio ante la situación de inseguridad que atraviesa ese municipio, pero esa labor quedó suspendida y el espacio entra en un momento de aislamiento. En el caso de Agua Bonita (La Montañita, Caquetá), uno de los espacios más visitados a nivel nacional por su fácil acceso desde Florencia, ya cancelaron todas las visitas que tenían programadas, entre ellas una de periodistas españoles, pues en este espacio viven unas 300 personas entre excombatientes, sus familias y miembros de la comunidad.
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“Las reuniones y asambleas deberán ser reprogramadas a menos de considerarse de carácter urgente. En tal caso, no deberán asistir personas de la tercera edad (…) y deben tener una asistencia máxima de 10 personas en lugares abiertos y de 5 personas en lugares cerrados”, se lee en una circular interna del partido FARC en el CNR.
También se tomaron medidas para los excombatientes que habitan fuera de los espacios de reincorporación, que según información de la ARN son 9.400 dispersos en 563 municipios del país. Por ejemplo, dijo Pastor Alape, la Asamblea de Ecomun (Economías sociales del común), la sombrilla que a nivel nacional articula las iniciativas productivas de los excombatientes, a realizarse los próximos 28 y 29 de marzo, fue cancelada.
A su vez, desde la ARN suspendieron para quienes viven por fuera los espacios territoriales “todo tipo de actividad presencial que implique visitas domiciliarias o visitas colectivas. Vamos a usar, en los casos en los que sea posible, herramientas tecnológicas o si no a través de llamadas para estar en permanente contacto con las necesidades de la población”.
* Estamos cubriendo de manera responsable esta pandemia, parte de eso es dejar sin restricción todos los contenidos sobre el tema que puedes consultar en el especial sobre Coronavirus.