Ante el llamado de los trabajadores de la salud y de congresistas, incluso del Centro Democrático, el Gobierno Nacional cedió y modificará la norma que obligaba al personal y talento humano en salud –abarcando a quienes están en formación–, estar disponible, prestar sus servicios y acudir obligatoriamente a la atención de la emergencia sanitaria causada por el coronavirus.
Así lo confirmó Roberto Baquero, presidente del Colegio Médico Colombiano, quien ofreció una rueda de prensa conjunta con el ministro de Salud, Fernando Ruiz, en la que se acordó que el llamado obligatorio solo se efectuará en caso de que haya escasez de trabajadores de la salud.
“El Ministerio adquirió el compromiso de hacer una reglamentación en la que quede claro que ese llamado se hará solo en caso de que la crisis lleve a la falta de personal de salud y se hará de manera escalonada de acuerdo con la evolución de la pandemia”, explicó Baquero.
Según el presidente del Colegio Médico, se acordó también que el personal que sea llamado será previamente entrenado y contará con la dotación de bioseguridad necesaria. En esa línea, informó además que, ante las denuncias por las condiciones de bioseguridad de los trabajadores, quedó claro que el primer responsable de entregarlos son los empleadores, con apoyo de los administradores de riesgos laborales.
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“El Gobierno hará una compra de insumos a gran escala que serán utilizados a modo de reserva cuando lleguemos al pico de la epidemia. Estos implementos deben ser entregados según los lineamientos establecidos por el Ministerio de Salud, de acuerdo con el riesgo que tenga cada nivel de atención”, agregó Baquero, precisando que el personal accederá a pruebas diagnósticas rápidas.
Frente a la norma que obligaba a personal médico a estar disponible por el coronavirus, la controversia fue desatada por el artículo 9 del Decreto 938, que indica que durante el término la emergencia, todo el talento humano en salud en ejercicio o formación, “estará preparado y disponible y podrá ser llamado a prestar sus servicios, reforzar y apoyar a los prestadores de servicios salud del país. El acatamiento a este llamado será obligatorio”.
Ante ello, en desarrollo de la sesión virtual de este lunes en el Congreso, el senador Santiago Valencia (Centro Democrático) pidió retirar dicho artículo y alegó que, además de generar un malestar innecesario entre el personal médico, se presta para confrontaciones con un sector que se ha mostrado comprometido en primera línea contra el coronavirus, pese a tener dificultades incluso, en materia de bioseguridad.
“Los médicos han actuado de buena voluntad, igual el talento humano en salud, que están acudiendo a atender y lo único que están pidiendo son los elementos de bioseguridad para atender a la gente. Creo que este artículo no solo genera un malestar innecesario, sino que no vale la pena entrar en confrontaciones”, declaró el senador.
Valencia advirtió que el artículo iría en contra de la legalidad, pues comprometería la objeción de conciencia “al encontrarse en riesgo la salud y la integridad de quienes se encuentran en primera línea de atención”.
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A su turno, la senadora Nadia Blel, del partido Conservador, hizo lo propio e instó al Gobierno a eliminar el artículo, alertando que el llamado va en contra de derechos fundamentales y señalando que no hay garantías para los trabajadores. “Estaríamos poniendo en riesgo a todo el personal de salud”, dijo.