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En una época convulsa para el fútbol, en la que los cambios afanosos llegan por los malos resultados, en Equidad, el tercer equipo de Bogotá, sigue imperando la paciencia, como principio de cualquier proceso, y la calma como mecanismo de blindaje. Ese camino que comenzó en 2005 con una llamada el 23 de diciembre, con un sí al día siguiente y con Alexis García tomando el mando del club, con el objetivo de ascenderlo a la primera división, sigue siendo el mismo. “Recuerdo que hicimos unas proyecciones y acordamos que serían necesarios dos años para lograr la meta. A él le tomó uno hacerlo y en el otro llegó a la final, perdiendo con Nacional”, dice Carlos Mario Zuluaga, el hombre que ha estado detrás del crecimiento del conjunto capitalino.
Pero, ¿de dónde salen los recursos para mantener la infraestructura de uno de los clubes más organizados en Colombia, si las taquillas son mínimas? “Por fortuna no dependemos de ese rubro, aunque la asistencia al estadio ha mejorado. El club es el vehículo publicitario de la aseguradora y por eso hay un presupuesto fijo cada año que sirve para suplir las necesidades”, apunta Zuluaga. A lo anterior hay que sumarle la escuela deportiva que cuenta con 1.600 alumnos, los ingresos de televisión que llegan de Dimayor y la ganancia de vender o ceder jugadores. De hecho, según el presidente, gracias al equipo profesional Equidad Seguros subió 11 puestos en la tabla de las mejores empresas en ese rubro, sin contar que en Colombia el “Top of mind” (lo que primero viene a la mente de un consumidor) es muy alto, pues se ocupa una de las tres primeras casillas cuando a un ciudadano se le habla de seguros.
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Adicional a los canales por los cuales llega el dinero hay que resaltar que no ha habido despilfarro alguno, tampoco “inversiones locas”, como las llama Zuluaga, además de unas proyecciones realistas. “Cuando subimos no teníamos nada. Ahora ya hay una sede que pocos clubes en nuestro país tienen. Ya terminamos la construcción de una casa donde vivirán jóvenes de las categorías menores, traídos de todas las regiones de Colombia, y un nuevo gimnasio. Es parte de lo que queremos consolidar, de lo que significa para nosotros la palabra club”.
En efecto, lo que son las categorías base tienen tanta prioridad para la institución que Zuluaga reconoce que el 60 % de su tiempo se va en mirar cómo mejorar las condiciones de los que llegan, y de ampliar la oferta para que la transición hacia el profesionalismo sea más provechosa para ambas partes. En la actualidad, cuatro futbolistas que han pasado por todas las divisiones hacen parte del primer equipo: Esteban Ruiz, Amaury Torralvo, Néider Barona y David Camacho, sin contar al portero titular Diego Novoa. Y el próximo año subirán cuatro o cinco más. En otras palabras, un trabajo para fomentar el talento propio por convicción y por necesidad de tener jugadores cada vez mejores en sus filas.
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“Nuestra escuela es formativa, mas no recreativa. A nosotros nos importa ir más allá de patear un balón. Creo que nuestro concepto es claro: formadores. Y ahí está el éxito”. Sabiendo eso no fue tan complicado convencer a Luis Fernando Suárez para que asumiera el reto del título, pues el entrenador entendió que si bien Equidad no es el que más paga, sí es el que mejor paga. “Los demás tienen salarios altos y puede que se demoren con las mensualidades o quincenas, o hasta terminen cancelando menos de lo acordado. Acá el que llega abre una cuenta de ahorros y solo debe preocuparse por jugar. El resto es nuestro trabajo y si lo hacemos bien, ellos también irán por ese camino. Nunca se ha incumplido con sueldos y creo que tampoco dejaría que eso pase”, apunta el presidente.
Y el futbolista lo sabe, y con el paso de los años son más los que quieren llegar a la institución, dejando de lado el precepto y el colectivo de que es un equipo pequeño y con la intención de propulsar sus carreras y sacarles provecho a los beneficios que brinda Equidad, sobre todo la estabilidad. “En cada pretemporada hacemos un trabajo de coaching, para que sepan manejar sus emociones y reaccionar en la cancha a situaciones adversas. Además, contamos con un equipo de psicólogos que trabaja la parte de neurociencia, porque siempre ha sido prioridad formar personas antes que atletas”.
Con 29 puntos, Equidad es el líder del fútbol colombiano, tiene un pie en la siguiente fase y piensa de nuevo en lograr su primera estrella, esquiva en tres ocasiones ( fue finalista en 2007-II, 2008-II y 2011-I). Suárez se adaptó al modelo que ya es una filosofía, rechazó cuatro ofertas, ya siendo entrenador en propiedad, y solo tiene la mente puesta en una cosa: clasificar. “Cuando lo buscamos nadie lo quería y después de unos meses le aparecieron varias ofertas. Él sabe que se puede ir cuando quiera, pues tiene contrato a término indefinido, pero su seriedad y respeto lo tendrán acá un buen tiempo”.
La ingenuidad de años anteriores se ha transformado en aprendizaje, en saber que un club nuevo no queda campeón en menos de dos décadas y en creer que la suma de buenos momentos tendrá recompensa tarde que temprano. “El título llegará. Mientras tanto, mi misión es tener pilares más sólidos para que lo que antes era un sueño ahora sea una realidad”.