Didier Luna, a imputación de cargos por supuesto acoso sexual en la selección femenina
El entrenador enfrentará los señalamientos en la Fiscalía el próximo 22 de abril a las 8:00 a.m en Bogotá.
Redacción deportes
Este lunes la Fiscalía solicitó una audiencia para formular la imputación de cargos de Didier Luna, extécnico de la selección colombiana sub-17 femenina de fútbol, luego de las acusaciones por presunto acoso sexual que denunció la exfisioterapeuta del equipo, Carolina Rozo.
“Llegué al cargo en diciembre de 2017 y a medida que fue pasando el tiempo el señor Luna se puso más cariñoso conmigo. En las cenas y en los desayunos me saludaba de manera morbosa. Incluso, una vez me dijo al oído que yo le gustaba, que estaba muy linda y que me iba a robar un beso”, apuntó Rozo en entrevista con Blu Radio.
Además añadió que, en un microciclo, en pleno almuerzo, Luna sacó una foto de ella y le comentó que esa era la mujer que él quería en su vida. “Ese día nos encontramos en el pasillo de las habitaciones y me confesó que quería tener algo conmigo, que fuéramos amigos especiales y que le regalara un pedacito de mi corazón. Yo le respondí que no estaba interesada y que me respetara. Se puso de mal genio y se fue”.
Rozo cuenta que desde ese momento las cosas se tornaron inmanejables, pues el DT empezó a dificultar su trabajo, a criticar lo que hacía, a no dejarla acceder al terreno de juego, en otras palabras, a hacerle la vida imposible.
No obstante, Luna, a través de un comunicado, se defendió de las acusaciones. “Las denuncias realizadas por la señora Carolina Rozo, no tienen fundamento y son mediáticas y sensacionalistas. Con ellas solo pretende manchar mi imagen como profesional dedicado al fútbol, vulnerando mi dignidad, la de mi familia y generando en los colombianos una imagen negativa sobre mí”, dijo el extécnico del combinado femenino.
Luna sigue sin aparecer ante las cámaras o los micrófonos. Sin embargo, intenta dejar claro en la carta la clase de persona que es. “Mi actuar personal, como profesional siempre ha estado revestida de respeto por las personas que me rodean y más por las mujeres”, dice. “Tengo esposa e hijas y he dedicado mi gestión como entrenador de selecciones femeninas a la defensa de sus derechos y su reconocimiento como iguales en una sociedad que se quedar corta al exaltar las grandes capacidades de quienes se dedican a este deporte”.
Este caso está lejos de terminarse. A los señalamientos de la fisioterapeuta, la Defensoría le envió una carta a la Federación Colombiana de Fútbol expresando su preocupación por las denuncias de varias jugadoras del balompié nacional. “Sorprende las reacciones de algunos directivos como es el caso de Álvaro González Alzate”.
El presidente de la Difutbol, hace unos días, defendió a Luna. “Estamos muy conmovidos por los temas de moda. Por las informaciones que salieron por ex integrantes de la Selección Colombia. Ningún miembro tiene que dar explicaciones de supuestos hechos. Vengo únicamente a decir la verdad”, señaló.
Este lunes la Fiscalía solicitó una audiencia para formular la imputación de cargos de Didier Luna, extécnico de la selección colombiana sub-17 femenina de fútbol, luego de las acusaciones por presunto acoso sexual que denunció la exfisioterapeuta del equipo, Carolina Rozo.
“Llegué al cargo en diciembre de 2017 y a medida que fue pasando el tiempo el señor Luna se puso más cariñoso conmigo. En las cenas y en los desayunos me saludaba de manera morbosa. Incluso, una vez me dijo al oído que yo le gustaba, que estaba muy linda y que me iba a robar un beso”, apuntó Rozo en entrevista con Blu Radio.
Además añadió que, en un microciclo, en pleno almuerzo, Luna sacó una foto de ella y le comentó que esa era la mujer que él quería en su vida. “Ese día nos encontramos en el pasillo de las habitaciones y me confesó que quería tener algo conmigo, que fuéramos amigos especiales y que le regalara un pedacito de mi corazón. Yo le respondí que no estaba interesada y que me respetara. Se puso de mal genio y se fue”.
Rozo cuenta que desde ese momento las cosas se tornaron inmanejables, pues el DT empezó a dificultar su trabajo, a criticar lo que hacía, a no dejarla acceder al terreno de juego, en otras palabras, a hacerle la vida imposible.
No obstante, Luna, a través de un comunicado, se defendió de las acusaciones. “Las denuncias realizadas por la señora Carolina Rozo, no tienen fundamento y son mediáticas y sensacionalistas. Con ellas solo pretende manchar mi imagen como profesional dedicado al fútbol, vulnerando mi dignidad, la de mi familia y generando en los colombianos una imagen negativa sobre mí”, dijo el extécnico del combinado femenino.
Luna sigue sin aparecer ante las cámaras o los micrófonos. Sin embargo, intenta dejar claro en la carta la clase de persona que es. “Mi actuar personal, como profesional siempre ha estado revestida de respeto por las personas que me rodean y más por las mujeres”, dice. “Tengo esposa e hijas y he dedicado mi gestión como entrenador de selecciones femeninas a la defensa de sus derechos y su reconocimiento como iguales en una sociedad que se quedar corta al exaltar las grandes capacidades de quienes se dedican a este deporte”.
Este caso está lejos de terminarse. A los señalamientos de la fisioterapeuta, la Defensoría le envió una carta a la Federación Colombiana de Fútbol expresando su preocupación por las denuncias de varias jugadoras del balompié nacional. “Sorprende las reacciones de algunos directivos como es el caso de Álvaro González Alzate”.
El presidente de la Difutbol, hace unos días, defendió a Luna. “Estamos muy conmovidos por los temas de moda. Por las informaciones que salieron por ex integrantes de la Selección Colombia. Ningún miembro tiene que dar explicaciones de supuestos hechos. Vengo únicamente a decir la verdad”, señaló.