Ospina, del dolor de la eliminación en el Mundial a la ilusión de jugar en Boca Juniors
El arquero de la selección colombiana, quien tiene contrato con el Arsenal inglés, es la primera opción para ocupar el arco del equipo más popular de Argentina.
Daniel Avellaneda - Buenos Aires
El arco de Boca Juniors siempre estuvo custodiado por expertos. Desde Américo Tesoriere, gloria en los primeros tiempos xeneizes, pasando por Julio Musimessi, el portero cantor de la década del 50. Desde Antonio Roma a Hugo Gatti, el notable Loco. Todos, figuras y campeones bajo los tres palos más difíciles de la Argentina. Y hubo dos colombianos que dejaron su huella en el puesto más ingrato y en la valla más pesada: Carlos Fernando Navarro Montoya y Óscar Córdoba. El Mono nació en Medellín y se naturalizó argentino, pero disputó con la selección tricolor las Eliminatorias para el Mundial de México 1986. Córdoba tapó en Estados Unidos 94. Ambos son el antecedente más cercano a esta nueva posibilidad de un guardameta de Colombia en el gigante azul y oro. De David Ospina se trata. (Vea aquí nuestro especial del Mundial de Rusia 2018)
A un mes de cumplir 30 años, Ospina está en un gran momento. Muy a pesar de llegar cuestionado por el amistoso ante Francia en la previa del Mundial, bajo el cielo ruso mostró las aptitudes que llevaron a José Pékerman a elegirlo como titular y uno de los capitanes ante la ausencia de James Rodríguez. Y el arquero de Itagüí fue importante en los cuatro partidos que la selección jugó en la Copa del Mundo. También, en la definición por penaltis. A pesar del tiro que le tapó a Jordan Henderson, no alcanzó para superar a Inglaterra. De cualquier modo, su actuación fue muy valorada en Argentina. Especialmente, por los dirigentes de Boca y el técnico, Guillermo Barros Schelotto.
Ospina es un nombre que seduce para hacerse cargo de un arco que trajo problemas desde la salida de Roberto Abbondanzieri. Agustín Orion tuvo su momento, pero cumplió un ciclo y desde entonces el puesto se lo disputaron Guillermo Sara (30 años), Axel Werner (22) y Agustín Rossi (22). Sara se lesionó el hombro hace un año y medio. Cuando se recuperó ya había perdido el lugar. Werner no convenció y volvió al Atlético de Madrid para ser suplente de Jan Oblak y ahora fue prestado al Huesca. Y Rossi se puso los guantes calientes, pero tuvo más errores que aciertos. Por eso Boca está ante la imperiosa necesidad de reforzar la meta. (Lea: David Ospina y lo que es celebrar siempre en solitario)
Hay un principio de acuerdo con Arsenal, que no tiene problemas en prestar al jugador. En Inglaterra tapó mucho menos de lo que esperaba producto del buen desempeño de Peter Cech, un histórico. La falta de competencia, incluso, hizo dudar a Pékerman que en algún momento pensó en citar a Franco Armani, luego convocado para atajar en la selección de Argentina por Jorge Sampaoli.
Ospina quiere jugar. Y aunque preferiría continuar en Europa, lo seduce competir en uno de los clubes más grandes del continente. En Boca se encontraría con sus compatriotas Wilmar Barrios, Frank Fabra, Sebastián Pérez, Edwin Cardona y Sebastián Villa. ¿Y el cupo de extranjeros, teniendo en cuenta que también integra el plantel el uruguayo Nahitan Nandez y hay negociaciones con el paraguayo Gustavo Gómez? En el caso de que se allane el camino para incorporar al arquero antioqueño, los dirigentes podrían prestar a Pérez y a Villa. Los equipos argentinos solo pueden registrar seis contratos de extranjeros en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y cinco pueden firmar la planilla para un partido de Primera División.
Como Tigres de Monterrey no quiere desprenderse de Nahuel Guzmán, al punto de tasarlo en 10 millones de dólares, y Gerónimo Rulli, de Real Sociedad, no convence. Ospina tomó fuerza en las últimas horas. (Puede leer: David Ospina: "Es una lástima que esto se acabe, pero hay que levantar cabeza")
No obstante, hay una situación que traba el pase: el alto costo del contrato del jugador. Ospina gana en la Premier League más que los futbolistas mejor pagados de Boca, que son Fernando Gago y Carlos Tevez. La inversión debería ser muy importante y Boca ya sacudió el mercado de invierno con las incorporaciones de Mauro Zárate, Sebastián Villa (del Deportes Tolima) y Carlos Izquierdoz (Santos Laguna). Además, está terminando de cerrar detalles por la transferencia de Gómez, que llegaría del Milan en 6,5 millones de euros.
“Está difícil porque su prima es muy elevada, pero no podemos descartar nada. Ospina es un excelente arquero”, le dijo Rodolfo Ferrari, vicepresidente xeneize, a El Espectador. Será cuestión de afinar el lápiz, entonces, para saber en definitiva, si Ospina podrá cumplir con esa vieja ilusión que ya lleva una década: tapar en Boca, como su ídolo Córdoba. Cuando tenía 20 años y ya había mostrado sus condiciones en Atlético Nacional, Mauricio Serna trajo a la Argentina los videos del Rey David. Chicho, multicampeón con Carlos Bianchi, lo recomendó. Entonces, el técnico era Carlos Ischia, ex jugador de Júnior y exayudante del Virrey. El antioqueño era muy joven, prefirió quedarse con los arqueros del club y Ospina partió rumbo a Niza. Hoy, los caminos se vuelven a cruzar. ¿Podrán encontrarse en la Bombonera? (Le puede interesar: Jorge Luis Pinto y su análisis de Rusia 2018)
El arco de Boca Juniors siempre estuvo custodiado por expertos. Desde Américo Tesoriere, gloria en los primeros tiempos xeneizes, pasando por Julio Musimessi, el portero cantor de la década del 50. Desde Antonio Roma a Hugo Gatti, el notable Loco. Todos, figuras y campeones bajo los tres palos más difíciles de la Argentina. Y hubo dos colombianos que dejaron su huella en el puesto más ingrato y en la valla más pesada: Carlos Fernando Navarro Montoya y Óscar Córdoba. El Mono nació en Medellín y se naturalizó argentino, pero disputó con la selección tricolor las Eliminatorias para el Mundial de México 1986. Córdoba tapó en Estados Unidos 94. Ambos son el antecedente más cercano a esta nueva posibilidad de un guardameta de Colombia en el gigante azul y oro. De David Ospina se trata. (Vea aquí nuestro especial del Mundial de Rusia 2018)
A un mes de cumplir 30 años, Ospina está en un gran momento. Muy a pesar de llegar cuestionado por el amistoso ante Francia en la previa del Mundial, bajo el cielo ruso mostró las aptitudes que llevaron a José Pékerman a elegirlo como titular y uno de los capitanes ante la ausencia de James Rodríguez. Y el arquero de Itagüí fue importante en los cuatro partidos que la selección jugó en la Copa del Mundo. También, en la definición por penaltis. A pesar del tiro que le tapó a Jordan Henderson, no alcanzó para superar a Inglaterra. De cualquier modo, su actuación fue muy valorada en Argentina. Especialmente, por los dirigentes de Boca y el técnico, Guillermo Barros Schelotto.
Ospina es un nombre que seduce para hacerse cargo de un arco que trajo problemas desde la salida de Roberto Abbondanzieri. Agustín Orion tuvo su momento, pero cumplió un ciclo y desde entonces el puesto se lo disputaron Guillermo Sara (30 años), Axel Werner (22) y Agustín Rossi (22). Sara se lesionó el hombro hace un año y medio. Cuando se recuperó ya había perdido el lugar. Werner no convenció y volvió al Atlético de Madrid para ser suplente de Jan Oblak y ahora fue prestado al Huesca. Y Rossi se puso los guantes calientes, pero tuvo más errores que aciertos. Por eso Boca está ante la imperiosa necesidad de reforzar la meta. (Lea: David Ospina y lo que es celebrar siempre en solitario)
Hay un principio de acuerdo con Arsenal, que no tiene problemas en prestar al jugador. En Inglaterra tapó mucho menos de lo que esperaba producto del buen desempeño de Peter Cech, un histórico. La falta de competencia, incluso, hizo dudar a Pékerman que en algún momento pensó en citar a Franco Armani, luego convocado para atajar en la selección de Argentina por Jorge Sampaoli.
Ospina quiere jugar. Y aunque preferiría continuar en Europa, lo seduce competir en uno de los clubes más grandes del continente. En Boca se encontraría con sus compatriotas Wilmar Barrios, Frank Fabra, Sebastián Pérez, Edwin Cardona y Sebastián Villa. ¿Y el cupo de extranjeros, teniendo en cuenta que también integra el plantel el uruguayo Nahitan Nandez y hay negociaciones con el paraguayo Gustavo Gómez? En el caso de que se allane el camino para incorporar al arquero antioqueño, los dirigentes podrían prestar a Pérez y a Villa. Los equipos argentinos solo pueden registrar seis contratos de extranjeros en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y cinco pueden firmar la planilla para un partido de Primera División.
Como Tigres de Monterrey no quiere desprenderse de Nahuel Guzmán, al punto de tasarlo en 10 millones de dólares, y Gerónimo Rulli, de Real Sociedad, no convence. Ospina tomó fuerza en las últimas horas. (Puede leer: David Ospina: "Es una lástima que esto se acabe, pero hay que levantar cabeza")
No obstante, hay una situación que traba el pase: el alto costo del contrato del jugador. Ospina gana en la Premier League más que los futbolistas mejor pagados de Boca, que son Fernando Gago y Carlos Tevez. La inversión debería ser muy importante y Boca ya sacudió el mercado de invierno con las incorporaciones de Mauro Zárate, Sebastián Villa (del Deportes Tolima) y Carlos Izquierdoz (Santos Laguna). Además, está terminando de cerrar detalles por la transferencia de Gómez, que llegaría del Milan en 6,5 millones de euros.
“Está difícil porque su prima es muy elevada, pero no podemos descartar nada. Ospina es un excelente arquero”, le dijo Rodolfo Ferrari, vicepresidente xeneize, a El Espectador. Será cuestión de afinar el lápiz, entonces, para saber en definitiva, si Ospina podrá cumplir con esa vieja ilusión que ya lleva una década: tapar en Boca, como su ídolo Córdoba. Cuando tenía 20 años y ya había mostrado sus condiciones en Atlético Nacional, Mauricio Serna trajo a la Argentina los videos del Rey David. Chicho, multicampeón con Carlos Bianchi, lo recomendó. Entonces, el técnico era Carlos Ischia, ex jugador de Júnior y exayudante del Virrey. El antioqueño era muy joven, prefirió quedarse con los arqueros del club y Ospina partió rumbo a Niza. Hoy, los caminos se vuelven a cruzar. ¿Podrán encontrarse en la Bombonera? (Le puede interesar: Jorge Luis Pinto y su análisis de Rusia 2018)