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El 8 de febrero de 2009 el mundo de la música se escandalizó al conocer que Rihanna había suspendido su asistencia a la gala de los Premios Grammy tras haber sido golpeada por su novio de entonces, el rapero Chris Brown.
El músico, que en ese entonces tenía 20 años, fue condenado a seis meses de labores comunitarias (eliminar grafitis y recoger basura), a cinco años de libertad condicional y a asistir a sesiones de orientación sobre violencia doméstica.
Durante todo este tiempo, Brown sostuvo que le costaba recordar exactamente lo que sucedió la noche de la gala de los Grammy de 2009. Sin embargo, el rapero habló ahora de ese momento para explicar que la discusión que generó el "peor momento" de su existencia comenzó después de que él admitiera ante Rihanna -tras negarlo varias veces- que había mantenido una relación sexual en el pasado con una conocida, una revelación ante la que la cantante reaccionó de forma violenta, siendo ella, siempre según su versión de los hechos, quien le propinó el primer golpe.
A pesar de que hace hincapié sutilmente en que su entonces pareja fue quien perdió los nervios inicialmente, Chris Brown es consciente de que no hay ninguna excusa o manera de justificar la terrible manera en que reaccionó y que ni siquiera él mismo fue capaz de asimilar.
"Recuerdo que ella intentó golpearme, pero solo golpearme, y de repente yo le pegué de verdad. Con el puño cerrado. Le pegué un puño en la cara y le partí el labio. Cuando lo vi me quedé en estado de shock, no podía creer que le hubiese hecho algo así. Entonces ella empezó a escupirme a la cara, escupía sangre, y eso me enfureció aún más. Estábamos teniendo una pelea de verdad en un carro, íbamos conduciendo. Ella intentó coger mi teléfono, pero yo no estaba dispuesto a dárselo para que lo tirara por la ventana", admite el rapero en un nuevo documental sobre su vida, 'Chris Brown: Welcome To My Life'.
"Ella quitó las llaves del contacto e hizo como que las tiraba por la ventana, así que yo me bajé del carro y empecé a buscarlas y entonces alguien gritó. Y ella empezó a gritar por la ventanilla: 'Ayuda, está intentando matarme'", agrega el músico acerca de aquella velada.
Aunque posteriormente Rihanna y Chris Brown se reconciliaron, incluso después de que él fuera condenado a cinco años de libertad condicional por asalto y agresión y se le impusiera una orden de alejamiento contra la artista, él reconoce que nunca pudo recuperar la confianza de ella, motivo por el cual se distanciaron definitivamente.
"Me odiaba. Tras lo que ocurrió, lo intenté todo. Pero para ella daba igual, no confiaba en mí. Desde ese momento no hicimos más que pelearnos, teníamos discusiones verbales y peleas físicas. Por ambas partes. Esta es la primera vez que puedo decir algo al respecto", dice el intérprete, dando a entender una vez más que él no era el único de la relación con problemas para contener su agresividad.
"Todavía la quiero, pero debo ser honesto: no parábamos de pelear, nos pegábamos, ella me golpeaba y yo a ella... Nunca estuvimos bien. Llegados a un punto, incluso hablamos del tema para preguntarnos qué nos estaba pasando", admite.
Ahora, Chris Brown se enfrenta a un nuevo escándalo por violencia doméstica después de que su exnovia Karrueche Tran le demandara por maltratos físicos y psicológicos tras concluir su relación.