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La Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia confirmó que envió el caso contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez por manipulación de testigos a la Fiscalía. A través de un comunicado, esta instancia explicó que, “por tratarse de una investigación sin relación con su cargo de congresista”, el proceso por el que Uribe fue llamado a indagatoria y que ahora lo tiene en prisión domiciliaria, queda a disposición del fiscal general, Francisco Barbosa. A partir de este martes comienza el traslado del expediente.
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Y es que, apenas el pasado 18 de agosto, el senador Uribe renunció al Senado, a pesar de ser el congresista más votado en las elecciones legislativas de 2018. Al día siguiente, su abogado, Jaime Granados, radicó en la Corte Suprema una solicitud para que el caso fuera enviado a la Fiscalía, argumentando que, tras la renuncia de su defendido al Congreso, sumado a que los hechos investigados no tendrían relación con sus funciones como congresista, el alto tribunal perdía la competencia para investigarlo.
Luego de discutirlo en, por lo menos, dos sesiones, los magistrados le dieron la razón a la defensa de Uribe: “la Sala de Instrucción consideró que, respecto de las conductas imputadas, por tratarse de delitos comunes y, además, por no encontrarse vínculo alguno de los hechos con la actividad funcional de legislador, o que fueran su necesaria consecuencia, o el medio y oportunidad propicia para su ejecución o un desviado o abusivo ejercicio de funciones, resolvió remitir el proceso a la Fiscalía”, se lee en el comunicado de la corporación.
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Uribe, quien está privado de su libertad en su finca El Ubérrimo (en Córdoba) viene siendo investigado por los delitos de fraude procesal y soborno en actuación penal. La Corte lo escuchó en indagatoria en octubre de 2019 y, luego de casi un año, concluyó en agosto pasado que había méritos para concluir que estando en libertad podría obstruir a la justicia, con lo que le impuso una medida de aseguramiento, pero ordenó que fuera de casa por cárcel.
Ya queda en terreno de la Fiscalía, entonces, decidir si llamará a juicio a Uribe Vélez, que sería la siguiente fase en el proceso. En ese escenario, el juicio sería llevado ante un juez de conocimiento ordinario. No obstante, apenas este martes se inició el traslado del expediente al ente investigador, “compuesto por numerosos cuadernos, así como al copiado de múltiples medios magnéticos contenidos en el mismo”, según la propia Corte Suprema, que se extendió 1.554 páginas en explicar la decisión de enviar a casa por cárcel al expresidente.
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La Corte Suprema ha dicho que las pruebas contra Uribe permiten inferir que él indujo al abogado Diego Cadena y a su equipo a hacer entregas y prometer entregas de dinero y otras utilidades a cambio de obtener testimonios favorables para el expresidente en el proceso que le llevaba el alto tribunal por manipulación de testigos. Para la Corte, Uribe fue una especie de “determinador, inductor y beneficiario de la idea” de voltear las versiones de testigos como Juan Guillermo Monsalve, quien lo ha vinculado con el nacimiento del Bloque Metro de las Auc, y Carlos Enrique Vélez, alias Víctor.
El senador Iván Cepeda, quien funge como víctima en el proceso, anunció desde el pasado lunes 31 de agosto que recusaría al fiscal Francisco Barbosa y a la vicefiscal Martha Mancera en caso de que el proceso pasara a sus manos. “Vamos a estudiar los argumentos que llevaron a la Sala, si es el caso, de tomar esta determinación de transferencia de competencias. Sin embargo, queremos dejar señalado que acatamos la decisión a diferencia de lo que ha sucedido estos días”, dijo el congresista del Polo en una rueda de prensa.