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José Bayron Piedrahita, exmiembro del Cartel de Cali y quien estaría detrás de un complejo esquema de lavado de activos en Argentina, llegó a Colombia este lunes deportado desde Estados Unidos. La justicia estadounidense le seguía la pista a este hombre, también conocido como El Árabe o El Patrón de Caucasia, y en septiembre de este año fue condenado a dos años y tres meses de prisión en el país norteamericano por pagar un soborno a un funcionario de seguridad nacional.
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Según informó Migración Colombia, El Árabe “regresó a Colombia en el vuelo de deportados proveniente de los Estados Unidos, tras pagar una condena de seis meses en este país norteamericano”. Tras llegar al aeropuerto El Dorado, el hombre, quien ya fue pedido en extradición por la justicia argentina “fue conducido a una sala de verificación especial, en donde se estableció que, a la fecha, no existe ningún requerimiento judicial vigente en su contra, a quien, en medios abiertos de comunicación, relacionan con el Cartel de Cali y La Oficina de Envigado”, añadió la entidad.
Desde junio de este año, Argentina solicitó la extradición de Piedrahita, Según un juzgado del país austral, El Árabe habría puesto en circulación en el “sistema financiero argentino, bienes provenientes de maniobras de tráfico de estupefacientes” y, a través de diferentes maniobras, hizo pasar estas operaciones como lícitas, en asocio con el exfutbolista Mauricio Chicho Serna, Victoria Henao y Juan Pablo Escobar, la viuda y el hijo mayor del jefe del cartel de Medellín, Pablo Escobar.
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Entre las pruebas en contra de Piedrahita hay registros de pagos ficticios de bienes y documentos que lo vinculan con la familia de Escobar. Además, un testigo “arrepentido”, que dio información a cambio de beneficios judiciales y que hizo parte de la organización de lavado de dinero y a quien el ente investigador de ese país se refiere como “Colaborador A” —protegiendo su identidad— dijo que Piedrahita dirigía un laboratorio “con capacidad de producción de hasta 500 kilogramos diarios de cocaína. Circunstancia que se traduce en un ingreso de entre 50 y 60 millones de pesos colombianos, equivalentes a una ganancia por día de, aproximadamente, USD$ 50.000).
Para la Fiscalía colombiana Piedrahita también estaría vinculado a un esquema de lavado de dinero en este país. Al parecer entre 2010 y 2017 (aunque se presume que el delito se habría ejecutado desde la década de los noventa cuando empezó a crear su fortuna) el hombre pasó por lícito dinero de estructuras armadas y dedicasas al narcotráfico como La Oficina de Envigado. Por estos hechos, el ente investigador le imputó los delitos de lavado de activos, concierto para delinquir y cohecho por dar u ofrecer en noviembre del año pasado.
No obstante, El Árabe fue extraditado el 10 de mayo de 2019 a Estados Unidos. Allí era requerido por pagarle un soborno a Christopher Ciccione, un funcionario federal de Homeland Security (Seguridad Nacional), para tratar que la acusación (indictiment) que había en el país norteamericano en su contra desapareciera y así no tener que ir a la cárcel. A mediados de este años, Piedrahita finalmente reconoció que en 2010 le entregó al agente Ciccione dinero, cenas costosas, licores y prostitutas. A cambio, el agente falsificó registros e, incluso, mintió a sus supervisores para que el indictment no tuviera vigencia y, por ende, Piedrahíta pudiera ingresar libremente a los Estados Unidos.