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Gilberto Rodríguez Orejuela, el exjefe del Cartel de Cali, pidió formalmente ante la Corte del Distrito Sur de la Florida en Estados Unidos, acceder al beneficio de libertad anticipada por “compasión”, como contó este diario. La defensa del colombiano, condenado a 360 meses de prisión en 2006 por delitos de narcotráfico, adujo en la carta enviada al juzgado que ya tiene 80 años, se encuentra en un grave estado de salud, ya ha cumplido más del 60% de su condena y en el país norteamericano nunca le contaron el tiempo que estuvo preso en Colombia antes de ser extraditado (10 años).
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En la misiva, conocida por este diario, el abogado David Oscar Markus, que representa a Rodríguez Orejuela, asegura que las graves condiciones de salud del excapo cumplen con los criterios para pedir la libertad anticipada por compasión. Además, continúa, “en su estado actual, Gilberto Rodríguez Orejuela tiene todo con lo que puede lidiar solo tratando de vivir día a día. Además, ha tenido cero infracciones en la cárcel. En su condición actual, no podría ser una amenaza real para nadie ni nada”.
El abogado detalla la historia clínica de Rodríguez Orejuela, que incluye un cáncer y otras afecciones de las que, al parecer, no podrá curarse. Aunque le habían hecho pedidos similares a la cárcel de Carolina del Norte donde el excapo se encuentra recluido, nunca recibieron respuesta. Por eso y por la gravedad de su condición, le cuenta a la corte que ya el exjefe del cartel de Cali tiene hasta un plan para su libertad: vivir en Bogotá con su esposa y su hija, quienes se harán cargo de sus necesidades médicas.
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En el proceso solo falta la aprobación de un juez, pero para este tipo de trámites no hay términos máximos establecidos. Sin embargo, ya se surtió una primera audiencia en la que la defensa pudo explicar sus argumentos. En diálogo con El Espectador, el abogado Markus señaló: “Gilberto es un hombre viejo y enfermo. Le pedimos a los Estados Unidos que sean compasivos y le dejen pasar su tiempo restante con su familia en su país de origen, ya que ama mucho a ambos. Nada se gana forzando a un anciano a morir en prisión”.
Contra Rodríguez Orejuela pesa también una orden del servicio migratorio de Estados Unidos (ICE) para que, en caso de ser dejado en libertad, sea deportado inmediatamente a Colombia. No obstante, su defensa ya ha adelantado trámites con el cónsul colombiano en Atlanta (Georgia) para que este escenario no se presente. Según la defensa del excapo, si le conceden el beneficio de libertad por compasión prefieren que él tome un vuelo privado, en lugar de tener que someterse al proceso de deportación que puede llegar a tomar meses.
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Las autoridades colombianas capturaron o forzaron a entregarse en 1995 a los siete principales jefes del Cartel de Cali, entre ellos los dos hermanos. Aunque los Rodríguez Orejuela cumplían condenas en Colombia, fueron extraditados a EE.UU., donde tribunales de Florida y Nueva York los acusaron del envío de más de 50 toneladas de cocaína hacia ese país y en 2006 los sentenciaron a 30 años de prisión. Si al excapo no le dan este beneficio, su fecha de liberación está prevista para el 9 de febrero de 2030, a la edad de 90 años.