Trump: “Los muros funcionan y salvan vidas”
El presidente estadounidense no sorprendió con su discurso del estado de la Unión: migración, economía y la promesa de construir el muro fueron los temas principales. Y habló de la situación en Venezuela. “Condenamos la brutalidad del régimen de Maduro”, dijo.
- Redacción Internacional
El presidente estadounidense, Donald Trump, dio ayer en la noche el discurso del estado de la Unión, en el que presentó el resumen de lo que fue el año pasado para su país. La Casa Blanca había anunciado que el discurso del mandatario, quien se encamina a su tercer año de gobierno, sería optimista y unificador. Trump, que enfrenta retos importantes en temas migratorios y de política exterior, aseguró que los republicanos y los demócratas tendrán la oportunidad de acabar con décadas de bloqueo político.
“Estoy listo para trabajar con ustedes para algunos logros históricos”, dijo. Luego habló del precio de los medicamentos, la migración y una política exterior que “tenga primero los intereses estadounidenses (…). La victoria es ganar poniendo en primer lugar a nuestro país”.
Trump mencionó dos aniversarios importantes: la liberación de Europa en la Segunda Guerra Mundial y los 50 años de la llegada a la Luna. Luego hizo un llamado a la unidad, algo que hizo también en sus discursos anteriores ante el Congreso. Sin embargo, este año tuvo una connotación especial por el enfrentamiento con el Partido Demócrata.
La mayoría de la Cámara de Representantes, liderada por Nancy Pelosi, se rehusó a incluir en el presupuesto nacional los US$5.000 millones necesarios para construir el muro en la frontera con México, lo que provocó el cierre de la administración más largo y costoso de la historia.
“La agenda que estableceré esta noche no es una agenda republicana o demócrata. Es la agenda del pueblo estadounidense”, dijo Trump.
El mandatario hizo un repaso de sus logros económicos, habló del boom económico durante su gobierno y mencionó que la tasa de desempleo es “la más baja de los últimos 50 años”. Pero si bien su carta fuerte es la economía, hay otros frentes en los que tiene cuentas pendientes. Como la investigación por la interferencia rusa en las elecciones de 2016, en las que resultó ganador. “No puede haber ridículas investigaciones partidistas”, aseguró. Le puede interesar: Las frases clave del discurso del estado de la Unión de Donald Trump
Venezuela, en la agenda
Trump aumentó la presión para que Nicolás Maduro deje el poder de Venezuela. Habló del reconocimiento que hace dos semanas le dieron a Juan Guaidó. “Estamos con el pueblo venezolano en su noble búsqueda de libertad. Condenamos la brutalidad del régimen de Maduro, cuyas políticas socialistas han convertido a esa nación, la más rica de Suramérica, en un Estado de pobreza extrema y desesperación”, dijo.
Carlos Vecchio, enviado a Washington del autodesignado presidente Guaidó, estuvo entre los asistentes al discurso, invitado por el senador republicano Marco Rubio. “Aquí en Estados Unidos estamos alarmados por los nuevos llamados a adoptar el socialismo en nuestro país (…). Esta noche renovamos nuestra determinación de que Estados Unidos nunca será un país socialista”. También habló de cómo llevó la paz a la península de Corea: “Si no me hubieran elegido presidente estaríamos en una guerra con Corea del Norte, pero mi relación con Kim Jong-un es buena y nos reuniremos el 27 y 28 de febrero”.
Asimismo resaltó el retiro de tropas de Afganistán y Siria: “Estados Unidos no pelea guerras sin fin”.
Le recomendamos: ¿Qué dijo Trump en el discurso del Estado de la Unión?
Inmigración y mujeres
El pulso por el muro es intenso y no parece que Trump ni los demócratas vayan a ceder. El tema migratorio ha sido una de las banderas de su programa político, en el que vende constantemente la situación como una crisis de seguridad fronteriza. Eso hizo anoche. Se refirió a las caravanas de migrantes que salen de Centroamérica, alertó sobre las pandillas y dijo que eso era una “amenaza” para su país.
Según la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, en inglés), hasta noviembre habían sido detenidos 396.579 migrantes por la patrulla fronteriza, la quinta cifra más baja desde 1973. “El estado sin ley de nuestra frontera del sur es una amenaza para la seguridad y el bienestar financiero de todos los estadounidenses”, señaló Trump.
Michael Shifter, director de la organización Diálogo Interamericano, con sede en Washington, aseguró: “Era difícil imaginar que Trump no insistiría más en el muro. Esta promesa de campaña es muy importante para su base política, y el presidente está obsesionado con satisfacer a su base y mantenerla feliz”. Lea también: El estado de la (des)Unión de Trump
“Yo haré que se construya el muro”, aseguró. “Los muros funcionan y salvan vidas”, agregó al pintar una frontera fuera de control y a merced de los criminales. Mencionó el aumento de mujeres en el mercado laboral, con lo obtuvo el aplauso de las 113 representantes y senadoras que hay en el Congreso. “Tenemos más mujeres en el Congreso que nunca antes”, reconoció el presidente.
Le pidió al Congreso aprobar leyes que prohíban el aborto en estado avanzado de embarazo. Una de las principales promesas a su base cristiana, encabezada por su vicepresidente, Mike Pence.
El presidente estadounidense, Donald Trump, dio ayer en la noche el discurso del estado de la Unión, en el que presentó el resumen de lo que fue el año pasado para su país. La Casa Blanca había anunciado que el discurso del mandatario, quien se encamina a su tercer año de gobierno, sería optimista y unificador. Trump, que enfrenta retos importantes en temas migratorios y de política exterior, aseguró que los republicanos y los demócratas tendrán la oportunidad de acabar con décadas de bloqueo político.
“Estoy listo para trabajar con ustedes para algunos logros históricos”, dijo. Luego habló del precio de los medicamentos, la migración y una política exterior que “tenga primero los intereses estadounidenses (…). La victoria es ganar poniendo en primer lugar a nuestro país”.
Trump mencionó dos aniversarios importantes: la liberación de Europa en la Segunda Guerra Mundial y los 50 años de la llegada a la Luna. Luego hizo un llamado a la unidad, algo que hizo también en sus discursos anteriores ante el Congreso. Sin embargo, este año tuvo una connotación especial por el enfrentamiento con el Partido Demócrata.
La mayoría de la Cámara de Representantes, liderada por Nancy Pelosi, se rehusó a incluir en el presupuesto nacional los US$5.000 millones necesarios para construir el muro en la frontera con México, lo que provocó el cierre de la administración más largo y costoso de la historia.
“La agenda que estableceré esta noche no es una agenda republicana o demócrata. Es la agenda del pueblo estadounidense”, dijo Trump.
El mandatario hizo un repaso de sus logros económicos, habló del boom económico durante su gobierno y mencionó que la tasa de desempleo es “la más baja de los últimos 50 años”. Pero si bien su carta fuerte es la economía, hay otros frentes en los que tiene cuentas pendientes. Como la investigación por la interferencia rusa en las elecciones de 2016, en las que resultó ganador. “No puede haber ridículas investigaciones partidistas”, aseguró. Le puede interesar: Las frases clave del discurso del estado de la Unión de Donald Trump
Venezuela, en la agenda
Trump aumentó la presión para que Nicolás Maduro deje el poder de Venezuela. Habló del reconocimiento que hace dos semanas le dieron a Juan Guaidó. “Estamos con el pueblo venezolano en su noble búsqueda de libertad. Condenamos la brutalidad del régimen de Maduro, cuyas políticas socialistas han convertido a esa nación, la más rica de Suramérica, en un Estado de pobreza extrema y desesperación”, dijo.
Carlos Vecchio, enviado a Washington del autodesignado presidente Guaidó, estuvo entre los asistentes al discurso, invitado por el senador republicano Marco Rubio. “Aquí en Estados Unidos estamos alarmados por los nuevos llamados a adoptar el socialismo en nuestro país (…). Esta noche renovamos nuestra determinación de que Estados Unidos nunca será un país socialista”. También habló de cómo llevó la paz a la península de Corea: “Si no me hubieran elegido presidente estaríamos en una guerra con Corea del Norte, pero mi relación con Kim Jong-un es buena y nos reuniremos el 27 y 28 de febrero”.
Asimismo resaltó el retiro de tropas de Afganistán y Siria: “Estados Unidos no pelea guerras sin fin”.
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Inmigración y mujeres
El pulso por el muro es intenso y no parece que Trump ni los demócratas vayan a ceder. El tema migratorio ha sido una de las banderas de su programa político, en el que vende constantemente la situación como una crisis de seguridad fronteriza. Eso hizo anoche. Se refirió a las caravanas de migrantes que salen de Centroamérica, alertó sobre las pandillas y dijo que eso era una “amenaza” para su país.
Según la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA, en inglés), hasta noviembre habían sido detenidos 396.579 migrantes por la patrulla fronteriza, la quinta cifra más baja desde 1973. “El estado sin ley de nuestra frontera del sur es una amenaza para la seguridad y el bienestar financiero de todos los estadounidenses”, señaló Trump.
Michael Shifter, director de la organización Diálogo Interamericano, con sede en Washington, aseguró: “Era difícil imaginar que Trump no insistiría más en el muro. Esta promesa de campaña es muy importante para su base política, y el presidente está obsesionado con satisfacer a su base y mantenerla feliz”. Lea también: El estado de la (des)Unión de Trump
“Yo haré que se construya el muro”, aseguró. “Los muros funcionan y salvan vidas”, agregó al pintar una frontera fuera de control y a merced de los criminales. Mencionó el aumento de mujeres en el mercado laboral, con lo obtuvo el aplauso de las 113 representantes y senadoras que hay en el Congreso. “Tenemos más mujeres en el Congreso que nunca antes”, reconoció el presidente.
Le pidió al Congreso aprobar leyes que prohíban el aborto en estado avanzado de embarazo. Una de las principales promesas a su base cristiana, encabezada por su vicepresidente, Mike Pence.