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Lo que vendieron los directivos de la Fundación Azul Bogotá (simpatizantes del alcalde Enrique Peñalosa) como un "experimento" para demostrar la poca rigurosidad de la Registraduría a la hora de avalar los comités que promueven procesos de revocatoria, les podría salir caro. Ellos, exponiendo razones absurdas, consiguieron el aval para crear un comité para revocar al alcalde de Bogotá, con el único propósito de exponer las falencias del trámite. Ante este hecho, el registrador nacional anunció que denunciará penalmente por fraude procesal a los responsables de burlar el mecanismo de participación ciudadana. (Lea: Defensores de Peñalosa inscriben comité para revocarlo)
La historia es la siguiente. El 18 de abril, José Fernando Flórez Ruiz, miembro de Azul Bogotá, radicó ante la Registraduría Distrital la solicitud de inscripción de un comité de revocatoria a la Alcaldía de Enrique Peñalosa, que estaba acompañada de una exposición de motivos insólita y burlesca. Por ejemplo, que querían revocarlo por ser responsable de que los humanos no hubieran colonizado Marte; del calentamiento global; de subirles el sueldo a los congresistas, o de reducir los recursos destinados a aliviar la situación de pobreza de los niños del Chocó, entre otros. El 28 de abril consiguieron el aval.
Ante lo paradójico del asunto, que defensores de Peñalosa crearan un comité para revocarlo, lo verdaderos opositores del mandatario expusieron el hecho en redes sociales. La respuesta de la Fundación Azul, en cabeza de Andrés Villamizar, fue decir que todo se trataba de un simple experimento para demostrar lo fácil que es inscribir un comité revocatorio sustentado en mentiras.
Este ejercicio, que para la Fundación era pedagógico, no cayó bien en la Registraduría y el propio registrador nacional, Juan Carlos Galindo, advirtió que esta actuación podría configurar el delito de fraude procesal contra la administración pública, razón por la cual puso estos hechos en conocimiento de la Fiscalía.
“Si bien existe un vacío legal en el sentido de que la Ley no le atribuye a la Registraduría la facultad de revisar o rechazar las solicitudes por los motivos que exponen los promotores, la del señor Flórez Ruiz nos generó inquietud y por esa razón la sometimos a estudio”, declaró Galindo, quien agregó que a pesar de que “Villamizar reconoce que fue un experimento, su deber jurídico era decir la verdad”.
Galindo llamó la atención por este tipo de conductas y expresó que estos hechos no pueden hacer carrera. “Se trataría de un grave precedente para la democracia en Colombia, pues pone en entredicho el propósito de un mecanismo de participación, expresión sagrada de la democracia, en un intento de usarlo para fines diferentes”.
El comité Salvemos a Bogotá, con su exposición de motivos falsos, se creó en medio del debate generado por la posible firma de una nueva resolución del Consejo Nacional Electoral (CNE), que fortalecería los requisitos que deben cumplir los promotores interesados en iniciar un proceso de revocatoria en el país.
Según conoció El Espectador, la sala plena del CNE avanza en la revisión de este proyecto que cobija los 101 procesos que se adelantan en el país. El borrador indica que los comités deben entregar pruebas que demuestren que el mandatario efectivamente está incumpliendo su programa de gobierno y argumentar las razones que sustenten la insatisfacción generalizada de la ciudadanía. (Lea aquí: El salvavidas a Peñalosa frente al proceso de revocatoria)
Así las cosas, la decisión del CNE, en teoría, podría impedir que los promotores logren el aval de la Registraduría apoyándose en motivos falsos o sin fundamento como los presentados por José Fernando Flórez como parte del experimento de la Fundación Azul Bogotá. La resolución será debatida durante los próximos días y, una vez se tome una determinación, la entidad iniciará la revisión de cada uno de los procesos que se realizan en el país.