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¿Cuál es el objetivo del cabildo?
Nosotros sabemos que el alcalde Enrique Peñalosa no va a cambiar su decisión, por eso nuestro objetivo es hacerle entender a la comunidad la importancia de la compañía y explicarles por qué no debe vender: son 132 años de historia y hemos invertido mucho dinero y esfuerzo para que siga en pie. Además, tenemos la mejor fibra óptica del país y generamos recursos que se destinan para la función social. Por ejemplo, subsidiamos a estudiantes de la Universidad Distrital. La ETB no son cables, postes, aparatos telefónicos y directorios. Bogotá en su poder tiene una empresa con una tecnología impresionante y con un enorme potencial. (LEA: A resolver las dudas sobre venta de la ETB)
¿Qué dudas esperan que se despejen en el cabildo?
Nosotros les hicimos 50 preguntas al alcalde y al presidente de la empresa. Por ley, ellos deben responderlas tres días antes del encuentro. Dentro de las dudas principales están: ¿Por qué vender la compañía por tan poco, si se ha realizado una inversión enorme en su tecnología e infraestructura en la última década? ¿Cuántos dividendos ha recibido Bogotá para su inversión social gracias a las utilidades obtenidas por la ETB ? ¿Qué se hizo con la plata que se recaudó con la venta del 11 % hace 17 años, en su primera administración? ¿En qué estudios se basan para venderla? (LEA:“La ETB ha generado pérdidas”: secretaria de Hacienda)
¿Qué pasará después del cabildo?
Si el alcalde no cambia su decisión, nosotros vamos a hacer una propuesta de una consulta popular en defensa de la ETB y de todo lo público en la ciudad: educación, salud, basuras, acueducto, reserva Van der Hammen.
Uno de los argumentos de la administración es que la ETB no es rentable.
Eso es mentira. La ETB es rentable, y bien administrada en cinco años podría generar el doble de recursos. No vale la pena venderla por tan poco, pues si lo hicieran sólo representa el 2 % del presupuesto del Plan de Desarrollo. Pero si la fortalecen, podría brindar más recursos y a largo plazo.
¿Qué pasa si se vende la ETB?
La ETB les inyecta presupuesto a otras instituciones públicas. Sólo a la Universidad Distrital le da $10.000 millones. ¿Cómo se financiarán si se vende? Además, la ETB es el único referente que queda en Colombia de operador público y ayuda a regular las tarifas en telecomunicaciones. Lo que podría pasar es que se disparen esos costos.
¿Cómo cree que podría crecer la ETB?
Queremos que la ETB a futuro sea un gran centro de informática en el que se preste telemedicina, teleeducación y televigilancia. Podemos hacer grandes proyectos con esta empresa.
¿Quiénes se perjudican con esta decisión?
En estos momentos no sólo los bogotanos, porque la empresa no es sólo capitalina. Actualmente hace presencia en las principales ciudades del país y los lugares más recónditos, como el Amazonas. Incluso, hace casi siete meses la empresa se ganó la licitación para prestar el servicio de internet satelital en Perú. Un directivo de un operador privado nos aseguró que esto es una mina de oro para el país, lo que pasa es que no tiene quién la administre bien.
¿Por qué cree que Peñalosa quiere venderla?
Él siempre ha querido vender esta compañía. No es porque le falte plata, sino por compromisos políticos y monetarios con quienes lo ayudaron a ser alcalde. Pero lo que más da tristeza es que los concejales, que nos representan, le aprueben su supuesto Plan de Desarrollo, que en realidad es un plan de negocios. Se dejaron permear y no estudiaron juiciosamente las consecuencias de venderla. Algunos son conscientes de las graves consecuencias, pero tienen que ser fiel a sus bancadas.
Luis Hernando Pulido, secretario de Sintrateléfonos