Las cárceles sin guardias que buscan cambiar el sistema de justicia tradicional

Se trata de un modelo creado en 1972 que trata de humanizar a las personas que cometieron delitos para que paguen sus condenas de una forma diferente, ofreciéndoles beneficios que en otras cárceles no existen. Se ha implementado en países como Brasil, Ecuador, Chile, Costa Rica y Colombia.

-Redacción Internacional
03 de abril de 2018 - 12:00 p. m.
El sistema pretende ofrecer confianza a los 'recuperandos' para que cumplan sus condenas.  / Andrés Torres - El Espectador
El sistema pretende ofrecer confianza a los 'recuperandos' para que cumplan sus condenas. / Andrés Torres - El Espectador

En los centros de reclusión que hacen parte de la Asociación para la Protección y Asistencia al Condenado (APAC) se vive una situación radicalmente diferente a la que se vive en una cárcel común y corriente. En pocas palabras: cada uno se prepara su propia comida, usa su propia ropa y no está vigilado por guardias, porque en ese tipo de centros el sistema de vigilancia no existe. La asociación está basada en la justicia restaurativa y, por lo tanto, busca demostrar que existen métodos más efectivos para cumplir penas diferentes a pasar periodos de tiempo excesivos en prisiones donde muchas veces se violan derechos humanos.   

Un detalle importante es el hecho de que a las personas que viven allí no se les dice ‘presos’ o ‘reclusos’ sino ‘recuperandos’. Uno de los países que ha comenzado a implementar el sistema es Brasil, el cual tiene uno de los centros más importantes en el estado de Minas Gerais. The Guardian visitó el centro y confirmó la diferencia con una cárcel tradicional, en las que muchas veces se presentan condiciones de hacinamiento y violencia. 

"No he pensado en escapar". Estoy cerca del final y casi pago por mi crimen. Confían en mí y es mi responsabilidad proteger este lugar", dice David Rodrigues Da Oliveira, uno de los recuperando del lugar que se encarga de abrir y cerrar la puerta principal.

(Le puede interesar: La justicia restaurativa, una alternativa distinta a castigar a menores de edad)

La confianza que les dan a los que ingresas a un centro APAC es enorme, sin embargo, existen condiciones para poder quedarse. Una de ellas es que, en caso dado de presentarse un intento de fuga, la persona volverá al sistema tradicional a cumplir el resto de su pena. Este escenario es inusual, teniendo en cuenta los beneficios que les dan, como, por ejemplo, cubiertos de metal a la hora de comer o la posibilidad de permanecer en una habitación relativamente cómoda.

Uno de los testimonios citados por The Guardian es el de Ana Paula Pellegrino, del Instituto Igarape, en Río de Janeiro, quien señaló: "Al cometer un crimen, los prisioneros rompen el pacto social. Una prisión de APAC restaura esto al permitir que los reclusos trabajen para la comunidad. Algunos presos pueden salir a barrer las calles, por ejemplo, lo que les da un sentido de responsabilidad y pertenencia ".

Otro de los testimonios del reportaje es el del juez, Paulo Antonio de Carvalho, quien aseguró que este sistema permite salvaguardar los derechos humanos de las personas que cometen delitos sin llegar a exponerlas a la violencia que se puede llegar a vivir en el sistema tradicional de justicia. “No tengo dudas de que se respeta la individualidad de los presos y los derechos fundamentales garantizados por la constitución. Un prisionero debe perder su libertad, pero debe mantener sus derechos fundamentales".

(Lea también: ¿Nos estamos alejando de la justicia restaurativa?)

Esta modalidad de justicia restaurativa llegó a Brasil en el año de 1972, por comunidades cristianas. Ahora, en ese país existen 49 centros en Brasil y otros tantos en Costa Rica, Chile, Ecuador.

Desde 2011, la APAC también llegó a Colombia, con el complejo carcelario y penitenciario COPED Pedregal y con la Cárcel Nacional de Bellavista, en las cuales hay más de 600 recuperandos. En su página oficial de internet, afirman que lo que buscan es "transformar a los reclusos en personas productivas para sus familias y comunidad. Tiene un carácter holístico y orgánico, porque se basa en valores fundamentales y elementos programáticos específicos".

 

Por -Redacción Internacional

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar