Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Las cosas entre el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, y la oposición de Venezuela no estaban en su mejor momento, después de que se filtrara una conversación del funcionario de Donald Trump en la que confiesa las dificultades que tiene su país para mantener unidos a los líderes opositores.
Entonces el Secretario de Estado confesó que el grave problema que había tenido su país, en la estrategia para sacar a Nicolás Maduro del poder, era la misma oposición. Lo dio a conocer The Washington Post el pasado 5 de junio.
Ver más: Si Maduro cae, 40 opositores se sienten con el legítimo derecho de sucederlo, dijo Pompeo
Un mes después y tras la polémica muerte de un militar venezolano, preso por supuestamente haber participado en un complot para derrocar a Maduro, Pompeo retomó su diálogo con la oposición venezolana. Específicamente con el líder del Parlamento, Juan Guaidó, quien desde que se autoproclamó presidente interino del país, el pasado 23 de febrero, ha contado con el apoyo del gobierno de Donald Trump.
Pompeo telefoneó este martes al líder opositor venezolano Juan Guaidó para expresarle su apoyo "inquebrantable" y felicitarle por el día de la independencia de Venezuela, que se celebra el próximo viernes, día en que Guaidó convocó marchas en contra del Gobierno chavista por la muerte de Rafael Acosta Arévalo.
Ver más: La polémica muerte del militar Rafael Acosta Arévalo pone al gobierno de Maduro contra la pared
La portavoz del Departamento de Estado, Morgan Ortagus, informó en un breve comunicado de la conversación entre Pompeo y Guaidó, reconocido como presidente interino de Venezuela por 54 naciones.
"El secretario Michael R. Pompeo llamó al presidente interino de Venezuela Juan Guaidó para conmemorar el aniversario de la independencia de Venezuela el 5 de julio y expresar el inquebrantable apoyo de EE. UU. a Guaidó, la Asamblea Nacional y el pueblo venezolano en su búsqueda para recuperar la libertad y prosperidad de su país", dijo Ortagus.
Estados Unidos fue el primer país del mundo en reconocer a Guaidó como jefe de Estado interino de Venezuela y, desde entonces, ha tratado de presionar a Maduro con la revocación de visados a funcionarios venezolanos y sanciones financieras y contra la empresa Petróleos de Venezuela (Pdvsa), principal fuente de divisas para Caracas.
Además, la semana pasada, EE. UU. impuso sanciones al hijo del presidente venezolano, Nicolás "Nicolasito" Ernesto Maduro Guerra, a quien acusó de aprovecharse de la "corrupción" instaurada por el Gobierno dirigido por su padre.