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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ironizó el martes sobre las concesiones hechas por su homólogo francés, Emmanuel Macron, a los "chalecos amarillos" sobre las tasas a los carburantes, y estimó que demuestran que el acuerdo de París sobre el clima es "erróneo".
"Estoy contento de que mi amigo Emmanuel Macron y los manifestantes de París hayan llegado a un acuerdo con la conclusión a la que yo llegué hace dos años. El Acuerdo de París es fatalmente erróneo porque aumenta el precio de la energía para los países responsables mientras que encubre a los que más contaminan", escribió Trump en Twitter.
Sin embargo, aunque se deja claro que EE. UU, "reitera su decisión de retirarse del Acuerdo de París", se remarca que "reafirma su fuerte compromiso con el crecimiento económico y el acceso y la seguridad energética, utilizando todas las fuentes de energía y tecnologías, a la vez que protege el medio ambiente".
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Durante su campaña presidencial, Trump prometió proteger a los trabajadores del carbón del país e incluso reabrir minas que habían sido clausuradas.
La cumbre de la COP se está llevando a cabo en la ciudad polaca de Katowice, y el gobierno polaco está promoviendo una "transición justa" que reduzca progresivamente el uso del carbón al tiempo que proteja a los mineros, cuyo sustento depende de esa actividad.
Ambición sin precedentes
Justo horas antes, el secretario general de la ONU, António Gutérres, instó hoy a los países a acordar en la Cumbre del Clima (COP24) de Katowice (Polonia) la letra pequeña del Acuerdo de París y mostrar a continuación una "ambición sin precedentes" para afrontar el "reto climático".En un discurso en la COP24, en la que participan 30.000 personas de 197 países desde el domingo y hasta el 14 de diciembre, Guterres explicó que el próximo septiembre organizará una cumbre de líderes en Nueva York para avanzar en este sentido.
Guterres insistió en "la enorme escala" del "reto climático" y subrayó que los compromisos adquiridos hasta el momento para atajar las emisiones contaminantes no son suficientes para contener la subida de las temperaturas en los límites acordados, de 1,5 grados centígrados o claramente por debajo de 2 grados.
"Los países deben cumplir sus compromisos. Pero también elevar su ambición. Necesitamos movimientos claros no sólo de los gobiernos nacionales, sino también de otros actores como los gobiernos subnacionales, las empresas y los inversores", indicó.
El secretario general de la ONU instó a los líderes a que acudan a la cumbre del año que viene "no sólo para informar de sus progresos, sino también para apuntar sus planes y progresos para elevar su ambición".
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La cita de Nueva York se centrará también en la "transformación de la economía real", explicó Guterres, que habló de las transiciones necesarias a nivel energético e industrial, las soluciones basadas en la naturaleza, la acción a nivel local, la mejora de las condiciones para afrontar el cambio climático y la financiación, escollo habitual en estas cumbres.
Guterres señaló que ha encomendado al presidente francés, Emmanuel Macron, y al primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, la tarea de movilizar a los sectores público y privado de la comunidad internacional para recaudar fondos para la lucha contra el cambio climático.
En concreto, indicó que aspira a que se reúnan los 100.000 millones de euros anuales a partir de 2020 para mitigación y adaptación en los países en vías de desarrollo.
Ésta es la cantidad que se acordó para el denominado fondo verde, un instrumento que debían financiar los países industrializados y que ha tenido infinidad de problemas en los últimos años, entre ellos la salida de EEUU del Acuerdo de París (y su negativa a aportar fondos).
"Mi cumbre no es un fin en sí misma. Es una herramienta para apalancar una ambición, una transformación y una movilización sin precedentes", concluyó.
Con información de Agencias