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Daneidy Barrera, conocida como Epa Colombia, es una especie de celebridad en las redes sociales. En Instagram tiene una cuenta de más de 857.000 seguidores. Por eso fue tan fácil que se regara como pólvora el video en que aparece destruyendo las puertas y taquillas de una estación de Transmilenio e invitando a sus seguidores a cometer este tipo de conductas, en medio del desarrollo de la jornada del paro nacional del pasado 21 de noviembre. Por cuenta de ese video y otras evidencias, este jueves 28 de noviembre, la Fiscalía le abrió investigación formal.
Después de dos intentos fallidos para que se emitiera una orden de captura, el ente acusador logró que la youtuber se presentara de forma voluntaria ante los tribunales de Paloquemao para imputarle los cargos de perturbación de transporte público, daño en bien ajeno e instigación para delinquir con fines terroristas, señalamientos que la youtuber no aceptó.
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Contrario a su tendencia de ser el centro de atención en redes sociales, Epa Colombia entró a las dependencias judiciales esquivando las cámaras y micrófonos de los periodistas. Al comienzo de la audiencia, La Fiscalía proyectó varios de los actos de violencia ocurridos durante las jornadas de protesta. Noticias, videos y otro tipo de material audiovisual fue usado por el representante del ente acusador para señalar que Barrera aprovechó la efervescencia del momento “para sembrar terror en la población y doblegar la voluntad de un Estado democrático”.
Luego de la breve reflexión, el fiscal mostró el video que tiene a la youtuber ante los estrados judiciales. "Sé que me van a criticar, porque siempre miran lo malo mío, nunca miran lo bueno": así inicia el video publicado por redes sociales en el que se ve a Barrera pintando grafitis en una pared y rompiendo varias puertas y taquillas de la estación Molinos de Transmilenio. La Fiscalía aseguró que esas acciones cometidas por Daneidy Barrera le costaron al país cerca de $1.200 millones.
Para la Fiscalía, Epa Colombia sería responsable del delito de perturbación al transporte público, ya que sus acciones impidieron el correcto funcionamiento del sistema de Transmilenio el pasado 21 de noviembre. Además, el ente acusador aseguró que la youtuber cometió el delito de instigación para delinquir con fines terroristas, ya que la mujer se grabó invitando a sus seguidores a cometer los mismos actos vandálicos que ella estaba haciendo.
La entidad investigadora también le imputó el cargo de daño en bien ajeno, tanto por los destrozos que cometió en el sistema Transmilenio como por los grafitis que realizó en una propiedad que no era de ella. Para la Fiscalía, este delito tiene dos agravantes: que se realizó en bien público y que fue difundido a través de redes sociales, teniendo un alcance incluso mayor al del círculo de seguidores de sus cuentas.
Además del controvertido video publicado por la propia Daneidy Barrera en redes sociales, la Fiscalía presentó como pruebas varios testimonios de personas que la vieron cometiendo los actos vandálicos y un video de seguridad en el que se observa a la youtuber vandalizando la URI de Tunjuelito. Un acto del que la opinión pública no tenía conocimiento.
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Cuando el representante de la Procuraduría intervino, este pidió que se agregara el cargo de terrorismo en contra de la joven. Para el Ministerio Público, al fin y al cabo, las acciones de Daneidy Barrera atentaron directamente en contra de la paz de la ciudad, además de incitar a otros a realizar el mismo tipo de acciones. Sin embargo, el ente acusador no tomó las recomendaciones de la Procuraduría
Durante varios momentos de la audiencia, Barrera fue regañada por el juez por intervenir más allá de lo preguntado. Ya en el momento en el que fue cuestionada sobre si aceptaba cargos o no, la joven respondió: "No acepto, yo también tengo derechos". Una respuesta que fue reprochada por el togado: "Por favor, responda solo lo que se le pregunta". Las actitudes de Barrera despertaron algunas risas en el auditorio, que estaba conformado en su gran mayoría por policías que custodiaban la audiencia.
Ya en su turno, la defensa recalcó que una "bachiller" no podía ser un peligro para la sociedad. Además, señaló que la joven no había salido con un cuchillo o un arma de fuego en sus videos, sino con un martillo, una muestra más de que no implicaba un peligro en contra de la sociedad.
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En medio de la defensa, la abogada de Barrera ofreció como alternativa a una medida de aseguramiento en prisión que la joven abandonara sus redes sociales. Idea que no fue del todo descartada por el juez, que determinó que la influencer tiene prohíbido usar redes sociales o hablar con medios de comunicación hasta que la medida no privativa de la libertad no tenga efectos. Además, el togado determinó que Daneidy Barrera tendrá que presentarse una vez al mes ante un juez de conocimiento, como forma de garantizar que la youtuber estará presente en su proceso judicial.
Con esta medida, Barrera Rojas estará por un largo rato alejada de las redes sociales que la hicieron tan conocida. Fue allí que en 2014 se hizo famosa por su grito "Epa Colombia" y después llamó la atención de seguidores y detractores por hechos como bañarse en las fuentes del Louvre, en París, y romper a martillazos una estación de Transmilenio.