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El soldado profesional Miguel Ángel Pinto Cuprita del Ejército Nacional murió este jueves luego que integrantes de la guerrilla del ELN lo atacaran en la vereda Raudal Viejo, zona rural de Valdivia, Antioquia. El uniformado hacía parte de las tropas que están en la zona aledaña a Hidroituango para superar la emergencia.
En un comunicado, la Séptima División del Ejército Nacional, señaló que el soldado recibió los primeros auxilios por parte de enfermeros de combate, pero que falleció debido a la gravedad de las heridas. Ya las tropas se encuentran realizando operativos para dar con los responsables del hecho y se anunció que la situación será denunciada ante organismos internacionales.
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El Ejército agregó que este hecho “se convierte es una clara muestra de cobardía por parte del ELN, quienes atacaron a los uniformados cuando estos brindaban apoyo y ayuda humanitaria a la comunidad afectada por la emergencia del río Cauca”. El solado Pinto Cuprita, de 24 años, era oriundo del departamento del Tolima y tenía una bebé de dos meses de nacida. En su carrera, había recibido varias felicitaciones por su labor en la zona del departamento de Antioquia.
Este jueves, Jorge Londoño, gerente de Empresas Públicas de Medellín (EPM), anunció que estima que unos 130.000 metros cúbicos de tierra y capa vegetal se desprenderán de la montaña en donde se ubica el proyecto de Hidroituango. El funcionario afirmó que este deslizamiento no representa un peligro grave para el proyecto ni para las comunidades río abajo, sino que afectaría una zona conocida como pozo de compuertas, en donde se realizan trabajos en las compuertas de la casa de máquinas, que es por donde está fluyendo el agua actualmente.
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El deslizamiento afectaría, principalmente, uLos escenarios más graves que involucran un deslizamiento de tierra supondrían el sobrepaso del agua por encima de la presa o el taponamiento del canal del vertedero. Londoño fue enfático en afirmar que, con la información que disponen, nada indica que esto va a pasar.