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El año pasado, una misión de expertos evaluó el estado de conservación de la Ciénaga Grande de Santa Marta. El resultado fue preocupante: pese a ser considerada una reserva mundial de la biosfera, parque nacional declarado ecosistema estratégico y un sitio Ramsar, la laguna costera más grande del Caribe está bajo amenaza debido a la degradación ambiental. De allí surgieron nueve recomendaciones que el ministro Luis Gilberto Murillo decidió acatar, dejando una por fuera: la petición de incluirla dentro del Registro Montreux. (Lea: Ciénaga Grande, a cuidados intensivos)
El registro se trata de un listado de entornos bajo amenaza grave, los cuales requieren atención prioritaria. Ambientalistas habían favorecido la medida en tanto que era una oportunidad para priorizar la cuenca, recibir fondos económicos internacionales, además de apoyo y asesoría técnica.
Pero el Ministerio de Ambiente decidió desatenderla, una acción que compromete al Gobierno frente a la conservación de las 500.000 hectáreas que abarca la Ciénaga. Según Murillo, “con el plan que se tiene vamos a poder reversar la tendencia y, en cinco años, el humedal estará en condiciones distintas. Por eso, consideramos que no es conveniente en este momento incluirla en el Registro de Montreux”, aseguró el funcionario al periódico El Colombiano.
La Ciénaga Grande hace parte desde 1998 de la lista de humedales Ramsar, un acuerdo intergubernamental para proteger los cuerpos de agua. El Gobierno ha tenido la responsabilidad de vigilar y conservar la cuenca, reportando la salud y las acciones que se aplican en el territorio. Y aunque esta inclusión ha resultado beneficiosa, las autoridades nacionales no han querido inscribir la Ciénaga en el registro de Montreux a fin de garantizar una vigilancia especial sobre este cuerpo hídrico.
En 2015, cuando empezaron las conversación para entrar a la lista, los representantes del Gobierno colombiano argumentaron que esto no era necesario, mientras que las fotos que salieron a la luz pública en ese momento, insinuaba una realidad muy distinta del estado de este ecosistema.