Musa Besaile pierde su curul en el Senado

“Se emitió dictamen favorable sobre la suspensión de la condición congresional del senador Musa Besaile Fayad”. La decisión, tomada por la Comisión de Ética y Estatuto del Congresista, y leída por el secretario general del Congreso, Gregorio Eljach, confirmó que, a partir de este momento, el legislador del partido de la U, Musa Besaile, pierde su curul y, por ende, los derechos que tenía como senador, incluido el salario que venía devengando.

(Lea: Senador Musa Besaile es enviado a la cárcel La Picota)

La medida se da porque el recién suspendido senador se ajusta al artículo 4 de la reforma al Equilibrio de Poderes –con el que se modificó la Constitución Política- y que expresa claramente: “Los miembros de las Corporaciones Públicas de elección popular no tendrán suplentes. Solo podrán ser reemplazados en los casos de faltas absolutas o temporales que determine la ley. (…) En ningún caso podrán ser reemplazados (aquellos) contra quienes se profiera orden de captura dentro de los respectivos procesos”.

(Lea: Le presté $2.000 millones a Musa Besaile: José Miguel Ramírez Gómez)

Y es que en la discusión de dicha reforma, aprobada en 2015, fue incluida una nueva causal de pérdida de curul que se refería directamente a los delitos cometidos contra la administración pública. Un hecho que posa directamente sobre Besaile Fayad a quien la Corte Suprema de Justicia le emitió una orden de captura el pasado 26 de septiembre por presuntamente haberse beneficiado de la red de corrupción que, irónicamente, protagoniza el alto tribunal, también denominada el “cartel de la toga”.

Besaile ha confesado haber pagado $2.000 millones a exmagistrados de la Corte Suprema para frenar un proceso en su contra por parapolítica. Incluso, aseguró en su momento que la suma exigida por el expresidente del tribunal, Leonidas Bustos y por el exdirector de la Unidad Anticorrupción, Luis Gustavo Moreno era de $6.000 millones.

Con la decisión, que apenas se conoce hasta este martes, el senador Besaile no podrá regresar al recinto legislativo –además, físicamente está impedido dado que desde el 6 de octubre duerme en la cárcel La Picota- y tampoco tendrá derecho a ser reemplazado. Se le aplicará la figura de la ‘silla vacía’ cuyas repercusiones caerán directamente sobre su partido, la U.

Lo anterior, teniendo en cuenta que la colectividad del presidente Juan Manuel Santos deja de ser mayoría en el Senado (queda con 18 senadores de 21 senadores) y sólo es superado por el Centro Democrático (20 senadores), el principal partido opositor al Gobierno actual. Al caso de Besaile se suman los de Bernardo ‘Ñoño’ Elías, también de la U, y otro de los congresistas salpicados por corrupción, concretamente por el caso de la multinacional brasilera Odebrecht; y el de Martín Morales quien también perdió su curul luego de que se le abriera un proceso por narcotráfico, supuestos nexos con paramilitares y por el homicidio del exalcalde de San Antero Wílmer Pérez Padilla.

“Se emitió dictamen favorable sobre la suspensión de la condición congresional del senador Musa Besaile Fayad”. La decisión, tomada por la Comisión de Ética y Estatuto del Congresista, y leída por el secretario general del Congreso, Gregorio Eljach, confirmó que, a partir de este momento, el legislador del partido de la U, Musa Besaile, pierde su curul y, por ende, los derechos que tenía como senador, incluido el salario que venía devengando.

(Lea: Senador Musa Besaile es enviado a la cárcel La Picota)

La medida se da porque el recién suspendido senador se ajusta al artículo 4 de la reforma al Equilibrio de Poderes –con el que se modificó la Constitución Política- y que expresa claramente: “Los miembros de las Corporaciones Públicas de elección popular no tendrán suplentes. Solo podrán ser reemplazados en los casos de faltas absolutas o temporales que determine la ley. (…) En ningún caso podrán ser reemplazados (aquellos) contra quienes se profiera orden de captura dentro de los respectivos procesos”.

(Lea: Le presté $2.000 millones a Musa Besaile: José Miguel Ramírez Gómez)

Y es que en la discusión de dicha reforma, aprobada en 2015, fue incluida una nueva causal de pérdida de curul que se refería directamente a los delitos cometidos contra la administración pública. Un hecho que posa directamente sobre Besaile Fayad a quien la Corte Suprema de Justicia le emitió una orden de captura el pasado 26 de septiembre por presuntamente haberse beneficiado de la red de corrupción que, irónicamente, protagoniza el alto tribunal, también denominada el “cartel de la toga”.

Besaile ha confesado haber pagado $2.000 millones a exmagistrados de la Corte Suprema para frenar un proceso en su contra por parapolítica. Incluso, aseguró en su momento que la suma exigida por el expresidente del tribunal, Leonidas Bustos y por el exdirector de la Unidad Anticorrupción, Luis Gustavo Moreno era de $6.000 millones.

Con la decisión, que apenas se conoce hasta este martes, el senador Besaile no podrá regresar al recinto legislativo –además, físicamente está impedido dado que desde el 6 de octubre duerme en la cárcel La Picota- y tampoco tendrá derecho a ser reemplazado. Se le aplicará la figura de la ‘silla vacía’ cuyas repercusiones caerán directamente sobre su partido, la U.

Lo anterior, teniendo en cuenta que la colectividad del presidente Juan Manuel Santos deja de ser mayoría en el Senado (queda con 18 senadores de 21 senadores) y sólo es superado por el Centro Democrático (20 senadores), el principal partido opositor al Gobierno actual. Al caso de Besaile se suman los de Bernardo ‘Ñoño’ Elías, también de la U, y otro de los congresistas salpicados por corrupción, concretamente por el caso de la multinacional brasilera Odebrecht; y el de Martín Morales quien también perdió su curul luego de que se le abriera un proceso por narcotráfico, supuestos nexos con paramilitares y por el homicidio del exalcalde de San Antero Wílmer Pérez Padilla.