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                                                                                                                                Septiembre 14 de 1977: el último paro verdadero

                                                                                                                                Hace 42 años, Colombia vivió uno de los paros más fuertes en su historia, que debilitó al gobierno de Alfonso López Michelsen y fue la antesala del Estatuto de Seguridad del siguiente mandatario, Julio César Turbay. A un día del 21 de noviembre, El Espectador recuerda el episodio.

                                                                                                                                Germán Gómez Polo - Twitter: @TresEnMil - ggomezp@elespectador.com

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Le puede interesar: ¿De qué trata la reforma laboral que radicó el uribismo y que le enrostran a Duque?

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                                                                                                                                Los ciudadanos se movilizaron en transportes informales. La jornada estuvo marcada por la violencia.Archivo El Espectador

                                                                                                                                Como si fuera poco, la relación entre el Gobierno y los militares también entró en crisis. Un año antes, en 1973, al final de la administración de Misael Pastrana, el Ejército propinó un contundente golpe al Eln en la denominada Operación Anorí. La guerrilla quedó menguada, sus principales líderes huyeron a Cuba, y cuando los militares esperaban las órdenes de López para finiquitar la ofensiva, este se la jugó por intentar una salida negociada al conflicto con esa organización. El asunto terminó con oficiales deliberantes y el presidente tuvo que remover al comandante del Ejército, general Álvaro Valencia Tovar, y a otros oficiales para conjurar la crisis.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                En la mañana del 15 de septiembre, la prensa registraba más de una decena de muertos. En Bogotá hubo toque de queda.Archivo El Espectador

                                                                                                                                Lea también: Manual para entender las marchas del 21 de noviembre

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                Las centrales obreras reclamaban, entre otras cosas, un aumento de salarios.Archivo El Espectador
                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Le puede interesar: ¿De qué trata la reforma laboral que radicó el uribismo y que le enrostran a Duque?

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                                                                                                                                Los ciudadanos se movilizaron en transportes informales. La jornada estuvo marcada por la violencia.Archivo El Espectador

                                                                                                                                Como si fuera poco, la relación entre el Gobierno y los militares también entró en crisis. Un año antes, en 1973, al final de la administración de Misael Pastrana, el Ejército propinó un contundente golpe al Eln en la denominada Operación Anorí. La guerrilla quedó menguada, sus principales líderes huyeron a Cuba, y cuando los militares esperaban las órdenes de López para finiquitar la ofensiva, este se la jugó por intentar una salida negociada al conflicto con esa organización. El asunto terminó con oficiales deliberantes y el presidente tuvo que remover al comandante del Ejército, general Álvaro Valencia Tovar, y a otros oficiales para conjurar la crisis.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                En la mañana del 15 de septiembre, la prensa registraba más de una decena de muertos. En Bogotá hubo toque de queda.Archivo El Espectador

                                                                                                                                Lea también: Manual para entender las marchas del 21 de noviembre

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                Las centrales obreras reclamaban, entre otras cosas, un aumento de salarios.Archivo El Espectador
                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                Este Estatuto les dio vía libre a las Fuerzas Militares para enfrentar a los violentos, incluso otorgándoles facultades de policía judicial, lo que derivó en abusos, detenciones, allanamientos, arresto de ciudadanos por simple sospecha y, en general, una grave crisis de derechos humanos. Cuando empezaba su vigencia, el 12 de septiembre, fue asesinado en su casa Rafael Pardo Buelvas, exministro de gobierno de la era López. La organización Autodefensa Obrera lo justificó como una venganza por lo sucedido durante el paro cívico de 1977. Lo demás es la historia de una nación que en 1982 se la jugó por la paz, en la era Betancur, y terminó en las guerras del narcoparamilitarismo.

                                                                                                                                Por Germán Gómez Polo - Twitter: @TresEnMil - ggomezp@elespectador.com

                                                                                                                                Ver todas las noticias
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