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Las organizaciones Dejusticia y el Colectivo de Estudios Drogas y Derecho (CEDD) solicitaron al primer mandatario Iván Duque que no expidan el decreto que fortalecería las facultades de la Policía para sancionar a quienes portan drogas ilícitas pues plantean que la iniciativa es “un retroceso, una idea costosa y además estigmatiza a los usuarios de drogas”.
Sin embargo, el presidente Iván Duque anunció que este lunes 1° de octubre quedará en firme el decreto que autoriza a la Policía a confiscar la dosis mínima de drogas ilícitas que se porte o se consuma en lugares públicos del país. El primer mandatario reiteró que las drogas y su consumo deben salir de la cercanía de los niños colombianos y no se puede permitir que el narcotráfico aproveche escenarios públicos, como los parques, para ampliar y fortalecer sus mercados.
(Lea: El laberinto jurídico frente a la dosis personal)
Desde su anuncio hace apenas algunas semanas, la medida ha causado revuelo a nivel nacional. En este caso, fueron Dejusticia y el CEDD quienes manifestaron su desacuerdo, “consideramos que la medida es ineficaz y costosa, no contribuye a avanzar a la solución del problema de las drogas y, por el contrario, promueve la discriminación y estigmatización de las personas que las usan”.
De igual forma, estas dos organizaciones señalaron que consideran que las políticas encaminadas a prevenir el consumo a través de herramientas policivas recaen en una gran falla y es que no logran diferenciar el consumo problemático, del consumo ocasional o recreativo.
En la carta, dirigida al presidente Duque; el ministro de Defensa, Guillermo Botero y la ministra de Justicia, Gloria María Borrero, Dejusticia y el CEDD exponen varios argumentos clave que darían cuenta de “por qué enfrentar el problema de las drogas desde la criminalización de los consumidores es obsoleto, innecesario y discriminatorio”.
(En contexto: La puja por la dosis mínima por cuenta de decreto que permite decomisar droga)
En primera instancia, las organizaciones señalan que regular el porte de drogas ilícitas no es bajo ninguna medida un acto legislativo novedosos y por el contrario recae en las reglas impuestas con anterioridad, reglas que hasta el momento no han causado mejorías.
Por otro lado, la carta señala que la medida que se firmará este lunes “no es el remedio contra el narcotráfico” para las organizaciones no es claro cómo el decomiso y destrucción de la dosis personal, que es una medida administrativa es decir que implica multas y no una judicialización y posible privación de la libertad, va a lograr impactar las redes organizadas de narcotráfico y señalan que “éstas no han podido ser desmanteladas a pesar de que el país tiene una de las legislaciones penales más estrictas en esa materia”.
Y, recalcaron que, aunque en Colombia existen ya suficientes herramientas jurídicas para combatir el narcotráfico, es tarea de las autoridades enfocar sus esfuerzos en la persecución de las cabezas de quienes trafican drogas en vez de promover todas las medidas represivas contra las personas que las usan.
(Lea: El lunes se expedirá el decreto que faculta a la Policía a decomisar la dosis mínima)
Acabar con la dosis mínima fue una de las promesas de campaña de Iván Duque. Hace algunas semanas, el Ministerio de Justicia dio a conocer un borrador del decreto a implementar. “Hay que volver a penalizar, pero no criminalizar. El que esté portando no se tiene que ir a la cárcel. Hay que confiscarle la droga e imponerle una multa para que el porte esté prohibido”, dijo en su momento entonces candidato.
En concreto, el decreto le dará facultades a los policías para incautar la dosis personal cuando un ciudadano la lleve en las calles. En ese caso, además, la persona que sea sorprendida portándola podrá ser multada con $208.000, aunque tendrá la opción de pagar menos si hace un curso pedagógico.
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